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Omnisciente:

Él castaño se encontraba frente a la casa de Charlie tranquilizando su respiración y pudo escuchar la música que provenía de adentro.

Dió unos golpes a la puerta y se abrió rápidamente por la persona a la cual quería ver en esos momentos.

—¡Llegó la pizza! — exclamó y cuando vio de quién se trataba su cara se tornó neutra sin saber que decir o hacer — ¡Se cancela! — exclamó entrando nuevamente, siendo detenida por Louis.

—Necesito hablar contigo — pidió mirándola.

—No tenemos nada que hablar.

—Sí tenemos y es importante — contraatacó.

—Bien, dame un segundo.

Volvió dentro y vió a sus amigos los cuales no entendían nada, tal vez por el alcohol o tal vez porque ______ se encontraba haciendo señas de que quería morir.

—¿Qué? No entiendo una mierda — aclaró Charlie.

—Louis está afuera y quiere que hablemos — dijo y Jack rápidamente bajo el volumen de la música.

—¡Habla con él! — exclamó Charlie algo obvio y él de rizos asintió dándole la razón.

—Bien — comentó decidida tomando un trago de coca cola, ya que era suficiente alcohol para ella por ese día.

Cuando se alejó, ganó las miradas orgullosas de Charlie y Jack.

Salió y pudo ver al castaño quien seguía ahí murmurando cosas que solo él entendía.

—Hablemos entonces — dijo mirándolo.

—Ya no puedo fingir que estoy bien sin tí. Me cansé de ya no tenerte cerca, me cansé de no poder tocarte o besarte como antes. Es difícil ______, es difícil y ya no pienso seguir así, quiero estar contigo, quiero estar contigo como antes — decía mirándola y en sus ojos como en sus palabras lo único que se notaba era la sinceridad que transmitía.

Un mes desde que no había hablado con él y aún seguía sintiendo aquellos nervios y sus pelos de punta al escuchar su voz. Todo en él hacía que su mundo diera vueltas, todo en él hacía que se sintiera bien.

—Pasó un mes Louis ¿Por qué hasta ahora?

Porque no fuí lo suficientemente valiente antes.

—No sé que pensar, yo te veía en todos lados con ella.

Y yo solo deseaba que ella fueras tú.

—Me sentía tan sola y vacía ¿Sabes?

Lo sé, también me sentía así.

—No creo que podamos volver a ser lo de antes.

No me mires así.

Realmente quiero estar contigo, pero no sé cómo hacerlo.

No me mires como si todo estuviese acabando.

—Pensé que te estaba superando, pero vuelves y haces que todo hubiese sido falso.

Lo sé.

—No sé que decir.

Dime que me amas, porque siento que voy a morir.

Dime qué todo estará bien, porque yo ya no puedo.

Termina ésto, porque yo nunca podré

¿Quieres estar conmigo? — preguntó mirándolo.

Louis la miró y asintió con seguridad, tenía un nudo en la garganta y no sabía si podía contestar. Tenía impotencia y se sentía débil.

Pudo sentir los brazos de ______ rodearlo.

—Extrañaba ésto, realmente te extrañaba — comentó la chica aún abrazándolo, abrazo que él castaño correspondió.

—También te extrañé.

Era algo confuso pero cierto.

Nunca valoras a las personas lo suficiente cuando las tienes a tú lado, lo haces después de que se van.

Al saber lo tanto que las necesitabas.

Solo ahí te das cuenta de la importancia que tenían en tú vida.

Solo ahí te das cuenta si llegaste demasiado tarde o esa persona seguía esperando por ti. 

...

Ambos se encontraban caminando sin rumbo aparente. El día empezaba a tornarse oscuro y el día empezaba a ser más frío.

—¿Por qué hasta ahora me buscaste? — preguntó mirándolo.

—Porque decidí dejar de retener lo que sentía. Me estaba forzando a querer a alguien y decidí dejar de hacerlo.

—Se veían lindos — comentó mientras miraba al cielo sin expresión alguna.

—Lo sé, pero no me sentía agusto con ella ¿Sabes? Trataba de buscar la calidez que tú me brindabas y ese fue mi error.

—Bien.

Seguían caminando en aquel silencio cómodo. No decían ninguna palabra pero eso no significaba que no tenían nada que decir.

Tal vez simplemente no querían arruinar ese momento.

Tal vez simplemente sentían que no era el momento.

O tal vez simplemente tenían miedo.

Miedo a lo que pasaría en ese momento. Después de decir lo débiles que eran sin el otro, después de decir lo mucho que se extrañaban y se necesitaban. Después de decir la manera en la cual se complementaban.

—No quiero arruinarlo de nuevo — aclaró él castaño mirándola.

—No lo hagas.

—Cambiaré por tí, lo prometo.

—No quiero que hagas eso Louis, me encantas, todo de ti lo hace. Solo quiero que estés conmigo en todos los sentidos, no te digo que grites a los cuatro vientos sobre lo nuestro, pero tampoco quiero que lo niegues porque me hace sentir que no soy lo suficiente para estar contigo.

—¿Quieres que dejé de ser el chico más cotizado de Londres? — cuestionó con cierta sonrisa burlona y su voz algo débil por el llanto de hace unos minutos.

—Tal vez — contestó mirándolo con una sonrisa también.

Fake; Louis PartridgeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora