Y yo sólo esperaba un mensaje.
Esperaba su mensaje.
Mis manos desesperadas tomaban el celular cada cinco minutos, cada vez que sonaba, mi corazón se aceleraba y quería que fuera de él.
Sólo esperaba su mensaje, como todos los días, a cada hora.
Desconocido: Hola hermosa. x
Y con sólo un mensaje, miles de sensaciones sentía.