Capítulo 30 La Flor "No-me-Olvides"

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Ese momento en que sus labios permanecieron juntos fue quizás uno de los momentos más felices de su vida

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Ese momento en que sus labios permanecieron juntos fue quizás uno de los momentos más felices de su vida. En más de cien años finalmente pudieron dar ese paso en sus sentimientos que acallaron para no perjudicar al otro, no fue fácil y tuvieron que morir en una vida para poder encontrarse y ser personas normales en un mundo sin demonios

Ahora de vuelta en el interior del auto, aguardándose de la lluvia y el frío mantenían sus manos juntas y sus miradas puestas el leve movimiento de las olas al llegar a la fina arena. La curiosidad comenzó a picar en Giyuu, ya que nunca pudo saber los motivos por los cuales en el pasado, Shinobu le había pedido eso, pero ahora era diferente, pues podía pedir una respuesta a esa incógnita

— Ko-... no, Shinobu —la verdad se le hacia un poco extraño dirigirse a ella por su nombre, pero solo por ahora y en ese momento quería hacerlo

— ¿Qué sucede, Tomioka-san? —le devolvió la menor atrapando un mechón corto de su cabello y enrollándolo distraída en uno de sus dedos

— Quiero saber algo —musitó aflojando el agarre de sus manos para volcar su mirada y atención en ella— ¿por qué deseaste venir al mar en ese entonces? ¿Por que conmigo?

La sorpresa era evidente en los ojos morados de la joven, sin embargo no pasó mucho para que un sonrojo invadiera sus mejillas y su ceño se frunciera en un tonto intento de no demostrar su pena. A estás alturas ya no era necesario tener secretos y más si eran del pasado, por lo que solo una corta sonrisa adornó los labios de Shinobu

— Eso fue porque en el pasado alguien me contó una historia —habló Shinobu con una sonrisa de nostalgia— en ella hablaba de como el mar y la luna se enamoraron, pero la tierra y el sol no les permitían estar juntos, sin embargo no se rindieron y se prometieron reunirse en las noches cuando el sol no estaba, la tierra dormía y el mar se mantenía en calma apreciando su belleza

— ¿Quién te contó esa historia? —inquirió Giyuu

— Hum, una amiga que incluso ahora siempre está ahí para ayudarnos —respondió la joven divertida al ver la confusión en el rostro de su amado— la historia me encantó, pero si quería venir al mar contigo... es porque creía que la calma del mar y la luz de la luna podrían ser testigos de lo que sentía...

La imagen suave y apenada de Shinobu era un verdadero placer a los ojos de Tomioka. No lo había notado, pero una pequeña sonrisa se había instalado en su rostro, mientras se permitía darle una palmadita a la joven. Desde siempre ella tenía un lado más gentil y que no siempre dejaba ver, podía ser orgullosa, pero también hermosa

— Giyuu-san —le llamó Shinobu sacándole de sus pensamientos— ¿hubieras ido conmigo al mar? —añadió expectante

— En ese momento muchas dudas y cosas invadían mi mente, sin embargo cuando me dijiste aquello con una mirada tan sincera, supe que sin importar que... iría contigo, Shinobu —respondió Giyuu tocando su rostro— y aunque he demorado mucho, hoy lo he cumplido

𝘽𝙖𝙟𝙤 𝙡𝙖 𝙎𝙤𝙢𝙗𝙧𝙞𝙡𝙡𝙖 𝙍𝙤𝙟𝙖 - 𝙂𝙞𝙮𝙪𝙎𝙝𝙞𝙣𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora