𝗠𝗮𝗳𝗶𝗮;𝗔𝗶𝗱𝗮𝗻 𝗚𝗮𝗹𝗹𝗮𝗴𝗵𝗲𝗿

Tres

Llegué y toque el timbre, me abrió la puerta Ignacio.

-Hola T/n -me da un beso en la mejilla- pasa

Se corre para que yo pueda pasar, pase y ahí estaba Aidan, sentado en el sillón.

-¿Milana? -pregunté.

-Arriba, sube si quieres.

Asentí y subí arriba, golpee la puerta y entre.

-Perritas -dije y me tire en la cama.

-¿Sigue abajo? -pregunta Milana.

-¿Quién? -pregunté.

-Aidan tarada -dice Dayana.

-Ah, sisi -ellas me miraron haciendo cara de pícaras- ¿Por qué?

-¿Salimos hoy? -acotó Milana.

-Seee -responde Dayana.

-Cámbienme de tema zorras -hablé indignada.

Ellas se rieron.

-Bueno, ¿Salimos? -dijo Dayana.

-¿Ah dónde? -pregunté con una ceja alzada.

-Nose, nos invitó mi hermano a un bar de por aquí -respondió Milana.

-Si no me da pereza voy con ustedes y obvio si me dejan -hablé tirándome encima de la cama.

-Yo también tengo que preguntar, pero mis padres no están -dijo Milana.

-¿Enserio?, los míos tampoco -acotó Dayana por fin.

-Estamos iguales, ¿a donde habrán ido?

-No tengo idea. ¿Vamos a ver qué nos pondremos o qué? -preguntó Milana.

-No sabemos si nos dejarán ir Milana -dije.

-No quiero estar toda la tarde encerrada en la habitación de esta -acotó Dayana mirando a Milana- Vayamos a conocer el barrio.

Dayana y yo asentimos.
Salimos de la habitación de Milana y bajamos las escaleras.

Escuchamos como Aidan saludaba a Ignacio y se iba.

-Mmm, ya se fue tu chico -dice Milana fingiendo tristeza y me mira.

-Mentira, si tu hermano sigue aquí -le dije en broma.

Dayana mira la cara de culo que puso Milana y se empieza a reír.

-¿Qué hacen ahí? -preguntó Ignacio.

Ya que estábamos las tres paradas en las escaleras, riendo como idiotas.

-Que te importa -le respondió Milana, bajo y detrás de ella nosotras.

Ignacio le pega un zape en la frente.

-Respeta a tus mayores Milanga -le dijo riendo.

Milana se detiene en seco enojada.

-¿Qué me dices Milanga? Oregon de mierda.

Amor de hermanos. Dayana y yo reímos.

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