MI DROGA

Capitulo 38

- Hugo: ¿que te pasa Eva?

- Eva: te tengo que ser sincera

- Hugo: dime que pasa

- Eva: Hugo cuando me echaron mis padres de casa no tenia ni un duro, no tenia ni ropa, para sobrevivir, empecé a robar carteras como ya sabes, y también a vender mi cuerpo a cambio de dinero. Mi primera vez fue así y no me gusta para nada el sexo, para mi es dolor. Hasta que me defendiste, me estaba vendiendo

Eva rompe a llorar

- Hugo: tranquila amor

- Eva: ¿me has dicho amor?

- Hugo: si, Eva te quiero y no te quiero ofender ni obligar a nada que tu quieras. Bueno si que te voy a obligar a que te quedes aquí conmigo no quiero que te vayas

- Eva: me tienes que convencer para que me quede

- Hugo: Eva, estoy enamorado de ti, cada noche desde que paso lo del hospital me las paso llorando por ti, solo con tenerte aquí delante de mi abrazada a mi y viendo esa cara tan preciosa que tienes ya me haces feliz. También te digo que claro que me gustaría hacerlo contigo, eso esta claro, pero solo cuando tu quieras y estés preparada.

- Eva: me has convencido para que me quede. Ahora tengo que buscar donde dormir

- Hugo: sabes que ya están en tu cama

- Eva: ¿cómo?

- Hugo: te vas a quedar aquí en mi casa a vivir conmigo y mi madre, y vamos a dormir los dos en esta cama. Te aseguro que no voy a intentar nada, solo te voy a robar besos por las noches y dormiremos abrazados.

- Eva: Nadie a sido tan bueno conmigo como tú. Tampoco es que haya tenido una relación con nadie.

- Hugo: lo que estoy haciendo es amor, Eva solo con verte me sale ser así contigo te quiero y no quiero nada más.

Eva no puede más y lo abraza enterrando su cara en el cuello de Hugo, y le deja un beso de agradecimiento en la mejilla, y otro en el cuello cuando vuelve su cabeza al cuello de Hugo.

- Hugo: Eva no me des esos besos ahí que si vuelves ha hacerlo no me voy a poder reprimir y hacerte el amor. (le susurra)

- Eva: vale, no lo vuelvo a hacer

- Hugo: solo hazlo cuando quieras que sea tuyo.

- Eva: vale

Siguen abrazados durante un buen rato más, hasta que oyen la puerta de la casa cerrarse, entonces se separan y salen de la habitación.