𝔻𝕖𝕤𝕔𝕒𝕟𝕤𝕖𝕞𝕠𝕤

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- Llegas a mi cuidad, -empezó a quejarse Bill,- activas mis trampas y esa basura casi rompe mi mano hábil. -levantó su mano lastimada.

- Estamos aquí porque le debes unos favores a Joel, -se quejó enfadada la pequeña,- así que empieza por quitarme estas cosas. -levantó la mano donde aún estaba esposada.

- Le debo favores a Joel, -habló sarcástico el castaño,- mira los favores que te deba no son tan importantes. -se dió la vuelta.

-Sí lo son, -respondió el moreno, se acercó a él.- necesito un auto.

- Oh, ¡claro! -respondió Bill afilando un machete,- vamos Joel, te daré mi auto, ¿no quieren mi comida también? -preguntó sarcástico.

- No te haría mal perder un poco de esa comida... -murmuró Ellie haciendo alusión a su peso.

- Tú, -la señaló con el machete,- cierra la boca, basura. -amenazó.

- ¡Púdrete! -le gritó la pequeña pero mi pareja la detuvo,- ¡me esposaste... -antes que siguiera quejándose la detuvo.

- Necesito que te calles... -gruñó en voz baja, volvió con Bill.- Necesito que me ayudes.

- Mira, aunque pudiera, no hay un auto que funcione en esta cuidad, -habló y completó la frase rápidamente.- y aunque lo hubiera, ¿por que crees que te lo daría?

Ignoré su platica hasta que Bill ofreció ir a su casa para descansar y pasar la noche. Joel le quitó las esposas a Ellie y volvió hacia mi.

- No duele, -dije mientras tomaba mi rostro, al parecer tenía el labio partido,- ayúdame a ponerme de pie. -dije intentando pararme pero me tomó en brazos otra vez.

Llegamos a una casa amurallada con cabezas de infectados colgadas de palos, al entrar Bill nos indicó no tocar nada, nos llevó al segundo piso, a una habitación con una cama grande y un sofá.

- Pueden dormir aquí, -dijo mientras tomaba unas cajas sobre la cama.- prepararé pasta con carne de soya y salsa, espero les guste.

Salió dejándonos a los tres sobre la cama, Joel me ayudó con la bota y a descansar el pie en alto, esto con ayuda de la mochila de Ellie, recosté mi cabeza contra la pared.

- Deberíamos estar en camino a ese auto, -me quejé mientras la pequeña se acomodaba a mi lado.- soy solo un peso muerto.

- Descansaremos por hoy, -dijo mi pareja mientras dejaba su mochila a un lado,- en especial tú. -señaló mi tobillo.

Él fue abajo con Bill, mientras la pequeña sacaba el cuaderno con el lápiz y me sonreía inocentemente, sonreí mientras nos preparábamos para más platicas.

Le hablé sobre geografía e historia, mis asignaturas favoritas en la secundaria y bachillerato, le conté sobre Mochi, los pasteles y animales.
Jugamos tres en raya, ahorcado y luego solo veíamos como llovía por la ventana.

En algún momento caí en un sueño profundo, sentía a la pequeña a mi lado, la abrazaba mientras su cabeza descansaba en mi hombro, me sentía bien cuando ella estaba a salvo.

Horas más tarde, desperté sintiéndome un poco mejor, había un plato con comida a mi lado y un par de pastillas, busqué con la mirada a mis compañeros de viaje pero debían estar cenando con Bill.

Me acomodé sobre la cama y comí la pasta que Bill había mencionado, tomé las pastillas, me puse una venda para poder dormir en paz y me cubrí con las cobijas para volver a descansar.

•••


Escuché la voz de Joel hablando en susurro, no abrí los ojos para que pensara que seguía durmiendo.

- Tú duerme en la cama, -le dijo él a la pequeña mientras se acercaban,- yo podré dormir en el sofá. -sentí como había más peso a mi lado.

- ¿Llevan mucho siendo pareja? -preguntó la pequeña curiosa.

- Veinte años, -respondió Joel antes de apagar la luz,- nunca creí que seríamos pareja, es mucho más joven que yo. -él siempre se quejaba de eso, creía ser muy mayor para mi.

- No creo que eso sea un problema, -dijo Ellie mientras se acomodaba,- es feliz contigo. -añadió con un bostezo al final.

- Eso espero, -respondió mi pareja después de varios minutos.

Lo amaba en serio.

•••

Desperté a la mañana siguiente, me removí sintiendo mi tobillo mucho mejor, palpé la cama en busca de mi pequeña, pero, al no sentirla, me asusté.

Me senté en la cama, busqué por la habitación pero sus mochilas no estaban, iba a ponerme de pie hasta que vi una nota a mi lado.

Tn.

Hemos salido en busca de ese auto, no te preocupes, volveremos por ti más tarde, el gordito simpático planea estar aquí al atardecer y luego nos iremos en busca de Tommy, espero y te sientas mejor, te guardé un sándwich de huevo para que desayunes.

Ellie.

Sonreí al ver que mi pequeña se preocupaba por mí, iba a guardar la nota cuando noté más contenido al otro lado.

Esta niña me volverá loco, si sigue fastidiando a Bill con su peso la va a terminar matando, como sea, volveré antes del anochecer como dijo Ellie en su nota, descansa, te conozco y querrás caminar, te veré más tarde.

Con amor, Joel.

Dios, como lo amo.

•••

¡Trece malditas horas! Ya no puedo más, desde que desperté he mirado el techo como si fuese lo más interesante del mundo, esperaba que Joel y Ellie llegaran pronto.

Mientras me ahogaba en aburrimiento, escuché un motor a lo lejos, pasos subiendo las escaleras y Bill quejándose por haber saldado su cuenta con mi pareja.

- ¡Te esperan abajo! -gritó frente a mi puerta, tomé mis cosas y me encaminé a la salida.- Ya no les debo nada.

- Gracias por todo, Bill, -agradecí mientras intentaba bajar, de la nada me ofreció su ayuda y bajamos juntos.- espero te vaya bien, suerte.

- Suerte con la mocosa insolente, -gruñó cerrando la puerta, reí mientras caminaba al auto.- ¡Tn! ¡Cuídense, suerte!

Subí a la parte de atrás con Ellie, quien parecía querer dormir, conversé con Joel mientras avanzamos al próximo destino: Tommy.

The Last of UsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora