Forma# 35: A veces las formas en las que nos enamoramos de las personas, son totalmente raras.
Emily
Camino con mi carrito de compras de manera tranquila y desinteresada. Habían pasado tres días desde la venta de mercancía y no había nada que hacer, todo esta bien tanto en el negocio y en las empresas, hacer nada realmente aburre. Doblo la esquina del pasillo para ir a buscar mis galletas de jengibre favoritas, el sonido de algo chocando y cayendo contra mi carro de compras hace que me detenga para ver.
Unos grandes ojos lagrimosos y saltones color verde, me hacen arrodillarme para levantar su regordete cuerpo. El niño se enrosca en mi cuerpo y comienza a llorar.
— Hermoso, ¿donde esta tu mama? — El niño niega sin soltarme.
— Papi, ocupo encontal a papi — Asiento y enrosco en un lado de mi cadera al niño para buscar al padre de este, veo un joven como de unos viente años mirando a todos lados de manera desesperada, hasta que hacemos contacto visual y putas Alexia tenia razón que con solo mirar a alguien hermoso podrías tener un orgasmo.
— Dios mío Kerem, ¿donde estabas? No hagas eso papa estaba muy preocupado — Toma el cuerpo de su hijo y lo apega a el como si su vida de dependiera del niño —Muchas gracias por encontrarlo señorita, estaba muy preocupado.
— Tranquilo —Le sonrió y me devuelve la sonrisa con sus mejillas algo rosadas. Esta es tu oportunidad para tener algo serio Emily — Si gustas te puedo acompañar con las compras, me sentiría tranquila si ambos llegan sanos a su casa. Seria para disculparme por a ver golpeado a tu bebe con mi carrito de compras.
Veo como muerde su labio inferior como dudando, pero al final asiente. Trata de mover su carrito con el bebe en brazos, pero el niño se remueve de manera incomoda, haciendo que este pare.
— Podrías tomar a mi bebe un momento, solo ocupo buscar unas galletas de jengibre y podre ir a pagar —Asiento y tomo al niño de pelo castaño, pego mi nariz en el pequeño hombro para aspirar el rico aroma que amena del niño.
— Mi nombre es Emily, tengo veintitrés años y tu? — Digo para romper el ambiente algo tenso.
— Me llamo Ayaz, tengo veinte. El es Kerem, tiene dos años y medio — Toma el paquete de galletas de jengibre y lo hecha en su carrito — Son las galletas preferidas de Kerem — Sonríe mirando las galletas y echa andar su carrito
— Son nombres Árabes, eres de haya? — Este asiente y caminamos hacia el cajero, veo como pasan los productos y Ayaz juega con sus manos de manera nerviosa.
— Son treinta cinco dolares señor — Este con algo de temblor saca su desgasta billetera y comienza a contar el dinero.
— No traigo todo el dinero, podría sacar las galletas — El cajero asiente desinteresadamente y con un gesto de burla, lo cual me hace enojar.
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Alexia Smith |+18|
DiversosAlexia Smith, joven empresaria de veintiséis años de edad, que para su corta edad es una de las mujeres más envidiada y codiciada en el mundo empresarial, no solo por el género femenino si no por el masculino también. Mujer dominante, fría, que no...