Capítulo Cuarenta y Tres

89 22 21
                                    

Teach me how to love

Miro la televisión observando como los autos se detienen en medio de la nada, una lluvia torrencial acompañada con truenos es el escenario perfecto para el escape del T-Rex, Sebas se esconde a mi lado cuando las garras del dinosaurio se abren paso en los gruesos cables sin electricidad y ruge con fuerza. Lo miro divertida cuando el dinosaurio da sus primeros pasos alrededor de los autos y de pronto imita el rugido del T-Rex. Suelto una fuerte carcajada encantada con el niño que a pesar de amar los dinosaurios parece que les teme. Pienso que su relación es algo como Sebastián + Dinosaurios= Amor/Odio. Mamá se levanta de su lugar cuando golpean la puerta principal.

—¡Señora Adams! Soy un hombre de palabra y he venido a que me enseñe a cocinar ese delicioso pastel con fresas de relleno. —miro a Logan desde el sofá besar la mejilla de mamá.

—Será divertido enseñarte la receta. —responde mamá fascinada con la presencia del chico en casa—. Oh, Mateo también viniste.

Tal parece que cierto hermoso chico logró convencer a Mateo de que asistiera a la despedida de solteros de los futuros esposos. ¿Cómo lo sé? Ambos cargan con sus mochilas.

—He venido a degustar el pastel. —responde el pelinegro alzando sus hombros antes de acercarse a besar la mejilla de mamá.

—Empecemos enseguida Logan. Tina se molestará si encuentra a los invitados de la despedida de solteros cocinando. —se carcajea un poco caminando a la cocina.

Logan se acerca a besar mi mejilla con una radiante sonrisa en sus labios y luego mira curioso a Sebas que continua en su lugar mirando la película con temor a salir.

—¿Por qué no cambias la película? —me pregunta dejando su bolso a mi lado sin despegar su mirada del bebé.

—¿Quieres cuidarlo mientras llora? —él niega al instante y Mateo se acerca quitando el bolso de Logan para sentarse a mi lado—. Eso pensé.

—Mini. —me saluda alargando la i cuando se deja caer a mi lado.

—Moni. —respondo imitando su tono al alargar la i y me acerco a besar su mejilla.

Veo a Logan alejarse para hablar con mamá el dichoso pastel con relleno de fresa que se robó su corazón en alguna de sus visitas en la cafetería de mis padres. Mateo se remueve a mi lado y lo miro mal cuando no me permite concentrarme en el transcurso de la película, él suelta una carcajada divertido por lograr molestarme.

—¿Puedes quedarte quieto? —indago molesta por sus movimientos.

Él no responde y continúa moviendo su cuerpo como si estuviera bailando sentado, agita sus manos juguetón mientras una enorme sonrisa se forma en sus labios. Inclino mi cabeza a un costado curiosa por saber la razón de su repentino ataque de felicidad y la tierna figura que toma su boca al sonreír de esa forma tan amplia, una figura rectangular que derrite mi corazón y me hace olvidar por completo la película junto a todo lo que esta a nuestro alrededor.

—Dime, dime, ¿por qué tan feliz? —pregunto tomando sus manos entre las mías para que me preste atención.

—Porque estoy contigo —mis mejillas se encienden con fuerza, mis ojos se abren de la sorpresa y ¿esta demás mencionar el estado de mi corazón?— y podrás leer lo que escribí de la luna y las estrellas. —finaliza la oración y bajo mi mirada avergonzada—. ¿Pasa algo?

Alzo mis ojos al escuchar una nota de temor en sus palabras y niego al instante.

—¡Muestramelo Mateo! —chillo emocionada y salto sobre su cuerpo.

No puedo dejar de pensar en tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora