Dragon Ball: Golden Legends

9. La chica más lista del mundo

El peligro había pasado. JR ayudaba a Karel para que así pudiese recostarse en un árbol. Le dolía mucho su cuerpo, sumado a las pocas energías que le quedaban recostarse en el suelo le pareció el paraíso. 

ーKarel, será mejor que nos vayamos. A no ser que quieras que te entrevisten. ーle dijo JR. 

Karel asintió. Apoyó una mano en el árbol y con la otra agarraba a JR para así ponerse en pie. Pasó su mano al rededor de su cuello y comenzaron a volar. Pero al tiempo de elevarse unos escasos centímetros, una voz los detuvo. 

ー¡Karel! 

Karel reconoció enseguida de quien era esa voz. Se trataba de Tarín. Se preguntaba que hacía aquí y como sabía que el estaba ahí. 

ー¿Tarín? ーpreguntó Karel para así confirmar su sospecha. 

ーSi. ーdijo saliendo de detrás de unos árboles. ー¡Ay, dios! ーexclamó al ver el lamentable aspecto de Karel. ー¿Estás bien? 

ーDiría que no. Creo que tengo costillas rotas, contusiones, creo que tengo quemaduras... No se. Pero me apetece acostarme. 

ーKarel, ¿quien es esta? ーpreguntó JR al no saber quien era la chica que acababa de hacer acto de presencia. 

ーEs una amiga mía. Pero lo que no se es como ha llegado aquí. ーle respondió. 

ーHe comprado un vuelo lo antes posible. Y te he reconocido enseguida. Ese pelo que tienes lo reconocería aunque estuviese a oscuras. 

ーJe, je... ¡Au! ーse quejó Karel por el dolor. ーMe duele si me rio. Así que no me hagas reír. 

ーGracias por preocuparte por el, pero será mejor que lo lleve con Kuroi. Digo yo que podrá curarte. ーdijo JR. 

ーNo, no. Yo puedo hacerlo. Tengo tecnología de primera. 

ー¿Enserio? ーpreguntó JR. 

ーSi. Es muy lista la canija esta. Así que llévame de vuelta al Prat. Yo te digo su casa. Y tu, ーdijo señalando a Tarín. ーVuelve a tu casa lo antes posible. Y haz lo que tengas que hacer... 

Tarín asintió y se marchó corriendo. JR agarró a Karel por las piernas y el cuello y comenzó a volar a máxima velocidad. Las personas de la ciudad vieron el destello que dejaba el aura de Ki al volar muy rápido. Tarín se marchó al aeropuerto lo antes posible y tuvo complicaciones para conseguir un vuelo lo antes posible, pero lo logró. 

JR y Karel llegaron al Prat. Karel le indicó donde estaba la casa de su amiga y volaron hasta allí. Llegaron hasta su casa y había gente dentro. Se metieron por una ventana y bajaron hasta el sótano en silencio. JR dejó a Karel en una silla y esperaron hasta que llegara Tarín. 

Pasó una hora y todavía no llegaba. 

ーDe verdad, no deberíamos haber venido. Con Kuroi sería más rápido y estarías recuperándote. ーle dijo JR. 

ーY yo te digo que tengas paciencia. Tarín es de confiar. La conozco desde que era un niño. 

ー¿De niño? Que, ¿os bañabais juntos? ーdijo JR con un tono que denotaba picaría. 

Karel se rio y quejó por el dolor de la risa. En ese momento llegó Tarín dando un portazo al cerrar la puerta. 

Rápidamente fue al escritorio, y activó un programa en su ordenador. Al instante una de las paredes se enterró bajo el suelo y apareció una máquina. Parecía una pequeña capsula para una sola persona y conectada con cables.