Capítulo Nº 22

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                                                             La biblioteca y Amanda.

                                                                        Maratón 2/3

Encontré el libro, lo saqué y me di vuelta para irme pero tenía al chico a unos diez centímetros de distancia, lo miré y él sonrió.-

---- Con permiso.- Traté de esquivarlo pero me tomó del brazo.-

---- Espera, no te vayas, divirtámonos un rato.- Me intentó sacar el libro pero lo sujeté fuerte con las dos manos.- Vamos, se que quieres, zorrita.- Me lo sacó y lo dejó en la mesa de al lado.- Bésame.-

---- Me tengo que ir.- Dije bajo.-

---- ¡Qué me beses!.- Todo su aliento a alcohol llegó hacia mis fosas nasales haciendo que me de ganas de vomitar. Me tomó del cuello y junto mis labios con los suyos, él movía su boca pero yo ponía mis manos en su pecho tratando de empujarlo, pero el pesa el doble que yo.

---- Basta, por… favor.- Logré decir cuando se separó un poco.-

---- No ven aquí.- Dijo y me tomó fuerte de los brazos pero yo zafé uno y lo empujé un poco.- ¡Qué vengas, perra!-

---- Déjame.- Dije con algunas lágrimas en mis ojos.-

---- No.- volvió a poner sus labios violentamente contra los míos, haciendo que me duelas, de seguro están sangrando.-

---- Basta.- Dije llorando.- Por fa…-

---- ¡Te callas!- Me interrumpió y luego me pegó una cachetada, eso hizo que llore más.- ¡Sh!- Me golpeó otra vez.-

Sus labios volvieron a los míos, pero yo seguía tratando de zafar y seguía llorando. Una mano suya entró por mi camiseta y comenzó a tocar mi panza, esto me da nauseas.-

---- Basta por favor, solo para.- Le supliqué llorando.-

---- Deja de hablar perra.- Con la misma mano que metió en mi remera, la sacó y fue hacia mi espalda, bajó un poco y comenzó a apretar mi nalga derecha, dios, no, hizo que llore aún más, pero mucho.

---- Solo para, no me toques, estás ebrio, por favor, para.- Le supliqué agarrando la mano que está detrás de mí.-

---- No lo voy a hacer.- La puerta se abre y los dos miramos, era Cameron, por dios, me da mucha vergüenza pero eso es lo menos que me interesa ahora; él quedó parado en la puerta, mirando, el chico hizo como si no lo vio y apretó mis labios fuerte haciendo que gema de dolor.-

---- Basta.- Lloré.- Por favor.-

---- ¡Cállate, perra!.- Me dijo cuando se separó pero volvió a juntar, yo lloraba, y sentía como mis lágrimas caían a nuestros labios.-

---- Te ha dicho que pares, Logan.- Oí la voz de Cameron cerca.- Esta llorando y tú estás ebrio, se te siente el olor desde aquí.- El tal Logan se separó.-

---- ¿Perdón? ¿Te conozco?-

---- Si, soy Cameron, estoy en tu equipo de fútbol, ahora déjala.- Miré a Cameron y solté un gemido e lamento.- Aléjate.-  Me miró.-

---- Aléjate tú, y deja que sigamos.-

---- Hazlo ahora, ella no quiere, mira como esta.- Cameron tomó mi mano.-

---- Vete.- Empujó a Cameron.-

---- Hey, cálmate y vete tú.-Me soltó y lo empujó, Logan le iba a pegar pero Cameron tomó su puño y lo doblo haciendo que Logan se de vuelta y Cameron lo empuje lejos de nosotros.- ¿Estás bien?- Me preguntó ¿preocupado?, yo lo único que hice fue ir a sus brazos y abrazarlo y llorar sonoramente, él me abrazó fuerte y frotó su mano por mi espalda.- Ya está, no va a pasar de nuevo.- Me susurró al oído.-

Detrás de mi sonrisa, tengo una mentira.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora