Hola, nuevo capítulo finalmente yujuu!
Advertencias: Violencia y sangre, aviso para no tomar a nadie por sorpresa.
Sin más, aquí vamos
OoOoOoOoO
Previamente:
Se olvidó del muchacho atado a la silla para ir a inspeccionar el ruido, con el cuchillo en alto, los sentidos alerta ante cualquier peligro potencial que pudiera existir.
Lo que encontró una vez que llegó a la sala de estar fue una piedra del tamaño de una mano que había sido arrojada contra la ventana, rompiendo el cristal en el proceso.
Todavía en la cocina, el cuerpo de Bob se relajó ante la ausencia del sujeto en la habitación, derritiéndose en su silla, sus extremidades volviéndose laxas. El corte en su pecho aún palpitaba y podía sentir su sangre tibia deslizándose sobre su piel, pero la herida ya no ardía, o tal vez estaba demasiado exhausto para notarlo siquiera. Como fuera, se dejó llevar por el cansancio, eligiendo hacer un buen uso del repentino pero bienvenido descanso.
Cerró los ojos y se desmayó.
Sacando también su arma, el hombre caminó con cautela, observando cuidadosamente a su alrededor, agudizando su audición para ver si podía detectar algo extraño. Se abrió paso sobre los pedazos de vidrio rotos, tratando de no pisarlos para no delatarse a quien estuviera afuera, y se acercó discretamente a la ventana ahora rota. Se arrimó y miró por el agujero, maldiciendo por lo bajo, pues ya se había hecho una idea de quién podría ser que estuviera allá afuera esperando para tenderle una trampa.
De seguro era esa maldita chica, la que se había escapado. Lo sabía, sabía que debería haber ido a buscarla fuera de la casa. Pero había caído desde dos pisos de altura, físicamente no parecía mucho, y el chico había sido su prioridad en ese momento, sacarle la verdad a como diera lugar, y había confiado en sus propias "habilidades de interrogación". Él había pensado que iba a sucumbir rápidamente, seguro de que sus métodos funcionarían en él, pero no, el chico tenía que ir y tratar de impresionar a la chica volviéndose todo valiente y audaz.
Y ahora tenía que lidiar con sus errores provocados por su propio orgullo.
Se prometió a sí mismo que iba a compensar sus errores.
Los iba a compensar de una manera muy dolorosa para los tórtolos.
Tan ocupado estaba regañandose mentalmente que no se percató de una figura caminando hacia él en la oscuridad, portando una palanca con la que se le acercó por las espalda y lo golpeó de lleno en la parte posterior de la cabeza, dejándolo aturdido por unos segundos, haciendo que soltara el arma y el cuchillo...
Varios Minutos Antes...
—¿Te importaría explicarme tu plan otra vez? —preguntó Calamardo a Arenita mientras la veía hurgar entre su caja de herramientas, haciendo quién sabe qué.
Estaba tan acelerada que ni siquiera había aceptado su ofrecimiento de un cambio de atuendo. La chica aun llevaba su ropa empapada y enlodada –un pijama que había visto usar a Bob una que otra vez cuando venía a su casa por alguna tontería, pero no iba a mencionar nada–. Ella solo habia ignorado su oferta, explicándole toda la situación apresuradamente y exigiéndole con todo el tacto posible que la llevara al cobertizo donde guardaba herramientas y cosas por el estilo.
Por supuesto que había tenido que estar de acuerdo con ella, con el chico Esponja en tantos problemas, incluso en riesgo mortal. Así que allí estaban, con él observando todavía confundido que era lo que estaba haciendo.
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Bajo La Tormenta
FanfictionUna feroz tormenta azota Fondo De Bikini, causando estragos y apagones, obligando a Arenita a refugiarse en casa de su mejor amigo. Esta experiencia no solo les hará enfrentar sus sentimientos, sino también a estrechar sus vínculos y enfrentar sus p...