Mi dulce momento

CAPITULO 14 MARIPOSA PARTE II

"Kirinmaru llego exhausto después de haber entrenado con InuTaisho, hacía tiempo que no entrenaba, tanto que pensó que sus métodos de batalla se estaban oxidando, pero se alegró al percatarse que su amigo aún seguía siendo el mismo. Suspiro cansado al darse cuenta que tan concentrado estaba en su batalla que no logro llegar a tiempo para estar con su hijo Riku, hacía que fue en búsqueda del obsequio que le daría al infante y justo cuando se encontraba en la puerta visualizo a Midoriko salir de esta, con clara cara de reproche.

- ¿Sabes cuánto tiempo estuvo esperándote? – reprocho la sacerdotisa. – Si no pensabas llegar a tiempo, no entiendo por siempre lo ilusionas Kirinmaru. – cruzándose de brazos.

- Pensaba llegar antes Midoriko, se lo importante que es para Riku tener tiempo con los dos, pero...pero simplemente son tratados que tengo que ver como Rey de las bestias, eso deberías de saberlo completamente. – se disponía a abrir la puerta que la mujer no se lo permitió.

- Riku ya está dormido, es mejor que hables con él mañana temprano.

- De acuerdo, ¿te quedaras a dormir aquí? – decía el pelirrojo.

- No, tengo que dejar todo listo antes de crear a la perla de Shikon. – ante la mención de esa maldita perla arrugo su entrecejo. – Se que no estás de acuerdo, pero...

- Te quejas diciéndome todo el tiempo que no estoy lo suficientemente cerca de mi hijo, siendo un egoísta en el proceso, pero y tu Midoriko. ¿Acaso no piensas en lo que te sucederá si deseas crear la perla de Shikon? – tomando las manos de esta.

- Quien te escuchara pensaría que me quieres. – sonrió triste la mujer.

- Y te quiero Midoriko. – los ojos de la mujer brillaron. – Pero lamentablemente no te amo, pensé que con el tiempo el afecto y cariño que te tengo se convertirían en ese amor que siempre mostraste por mí.

- Comprendo. – la sacerdotisa deseaba salir corriendo antes de que esas traicioneras lagrimas salieran. - Antes de irme toma. - entregándole una perla blanca. – Así como Riku tendrá un recuerdo de mi deseo que al menos me recuerdes obteniendo esto.

- Midoriko no es necesario...

- Cuando llegue el momento protegerá a esa persona que verdaderamente amaras, además de otorgarte del don de traspasar el tiempo y dimensiones. – eso ultimo hizo que el pelirrojo arrugara el entrecejo.

- Sabes que jugar con el molino del tiempo es peligroso. Akuru se dará cuenta y no tardará en detenerla para...

- Lo sé, pero es como dijiste Kirinmaru. Nunca dejare de ser una persona egoísta. – dándole un rápido beso. – Es mejor que la guardes para un momento especial esta perla se la ortigaras al ser que más ames, y respecto a el tiempo puede ser cuanto te plazca querido. Sayonara, despídeme de Riku y de Zero, aunque no sea su persona favorita.

Ante lo último Kirinmaru sonrió, ya que en general nadie era la persona favorita de su Oneesan, excepto InuTaisho.

- Espero que tu máxima creación salga como planeas Midoriko y más que nada que sobrevivas. – él sabía que no sucedería eso, pero lo deseaba no solo por su hijo, sino porque es como le decía a la azabache realmente la apreciaba."

Setsuna se encontraba harta de toda esta situación, realmente no deseaba haber discutido con Towa, pero debía de ser realista probablemente ninguna de ellas regrese a la Era moderna además por más afecto y cariño que les tomo a la familia Higurashi su obligación era permanecer al lado de sus padre, sobre todo estar cerca de su mamá.