Día 7: Amigos de Infancia a Amantes

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- ¡Mamá! ¿Dónde estás? - Exclamaba un niño mientras caminaba de un lado a otro, buscando a su madre por el gran parque.

Había estado buscando a la mujer durante varios rato... Ella siempre le había dicho a su hijo que si no la veía, debía quedarse quieto en su lugar hasta que ella volviera a aparecer, sin moverse y ni siquiera tratar de buscarla.

Fue por eso que el pequeño pelinegro ni siquiera había intentado moverse de su lugar... Tan solo retenía sus lágrimas mientras observaba entre la gran multitud, viendo como niños corrían y otros adultos que estaban supervisándolos estaban alrededor. En realidad, tenía mucho miedo ya que estaba solo.

- ¡Mamá! - Volvió a gritar mientras inevitablemente, comenzaba a caminar, subiendo a uno de los juegos para fijarse si podía ver a su madre desde allí arriba.

La buscó y la buscó con la mirada, pero ella no parecía estar en ningún lado. Comenzó a desesperarse y tan solo comenzó a llorar, bajando del juego y comenzando a correr mientras se alejaba de todos, no quería estar allí, quería volver a su casa con su mamá.

Siguió corriendo, saliendo del sector de juegos para niños mientras trataba de secar sus lágrimas, pues ellas le nublaban su vista y no veía a donde estaba yendo. Se sentía mal por ni siquiera saber cómo buscar a su madre, tenía seis años... Ya no era un bebé al cual cuidar, o eso pensaba, el pequeño Jimin quería sentirse como un niño grande.

Pero en ese momento necesitaba a su mamá, ya no quería seguir solo allí.

Iba tan concentrado en correr y no tropezar mientras secaba sus lágrimas, que no se dio cuenta de que había otra persona delante suyo. Chocaron y está otra persona con la que chocó fue lo suficientemente rápida como para tomarlo de su brazo y evitar que el pequeño niño cayera.

Jimin se sorprendió por el golpe, puesto que no esperaba chocarse con alguien. Estuvo a punto de soltarse bruscamente del agarre, pies su madre le había dicho claramente muchísimas veces que no debía hablar con extraños, cuando notó que quien lo había agarrado era otro niño... No parecía ser mucho mas grande que él, pero sin duda lo era, le quitaba aproximadamente una cabeza de altura.

Tenía su cabello negro cortado muy prolijamente y tan solo lo había ayudado a pararse mientras se veía preocupado.

- Oye ¿Estás bien? ¿Te golpeaste? - Preguntó el niño más alto mientras apoyaba una de sus manos en la espalda del más pequeño, pues este seguía llorando.

Jimin lo observó aún con sus ojos llorosos y abultando sus mejillas, tan solo negó levemente, siendo incapaz de hablarle, ya sea por timidez o porque no quería llorar genere a él. Aunque sea un completo niño desconocido, quería verse fuerte.

- ¿Estás perdido? Se ve que eres un niño pequeño.

El más bajo no pudo evitar sentirse algo ofendido, pues si... En realidad era mucho más bajo de lo que un niño de su edad debería de ser... El tenía unos veinte centímetros menos y además tenía sus mejillas muy regordetas (n.a: I believe in Jimin chiquito supremacy). Pero no le gustaba que le digan lo muy chiquito que era, él ya quería ser un niño grande para los demás.

- No soy pequeño... Ya soy un chico grande - Dijo mientras formaba un puchero y observaba a ese otro niño - Tengo seis años. No soy un bebé.

- Tienes casi mí edad. Yo tengo ocho años - Dijo mientras sonreía tratando de hacer sonreír al otro niño - ¿Cómo te llamas?

- Me llamo Jimin. ¿Y tú? - Anunció el más bajo, sintiéndose cada vez más despreocupado, olvidando la situación que había pasado hace un momento.

Yoonmin Fest 2021 [Veybex Edition]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora