ITO (Taekook)

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Ya pasadas las once de la noche Jimin llegó a la casa de Jungkook para decirle que se quedaría con él a dormir debido a que su padre lo obligó a quedarse allí por la simple razón de que no quería que volviera solo a altas horas de la noche y más encima con un gato. Al final lograron convencer al señor para que se quedaran con el gatito con la condición de que el pelirrojo debía lavar las ventanas por un mes entero. Igual era un precio justo por el bienestar de Mandarina, así que no pudo negarse y aceptó su propuesta. Jungkook por su parte no tenía problemas de que estuviera ahí, ya que así podría ayudarlo a ver la condición del gato a lo largo de la noche y Jimin aceptó sin problemas.

—Voy a ir a dejar a Taehyung y vuelvo— dijo el pelirrojo mirando a su amigo. Pero este solo lo veía con el entrecejo arrugado como si quisiera decirle algo—... ¿Qué pasa?

—¿No que me ibas a hacer la cena?— ante eso Jimin se tapó la cara con una mano por haber olvidado lo que le había prometido a su amigo por la ayuda que le dio hoy.

—Perdóname... se nota que el mal amigo soy yo por olvidar tu paga— decía agarrándose de su ropa para que dejara de verlo con expresión enojada, pero si se trata de temas tan importantes para Taehyung, como la comida, no le importa quien sea, se enojará de todas formas hasta que ya sienta que fue suficiente—. Hyung... ¿Me dejas ir a hacerle la comida a Tae para que ya no me vea mal? Te juro que voy a volver pronto.

—No te creo— contestó Jungkook en broma, pero Jimin se enojó creyendo que lo que dijo fue verdad y solamente se fue a sentar al sillón cruzando sus brazos para murmurar lo que seguramente son maldiciones para ambos.

Taehyung y Jungkook al ver la reacción del pelirrojo solo se echaron a reír por lo divertido que les pareció su la forma de actuar, pero Jimin seguía firme y no le importó que después el rizado le hubiera ofrecido hacer él la cena para que ya no estuviera enojado, incluso Jungkook lo hizo, pero al ser tan terco cuando quiere, simplemente desistieron y el dueño de casa subió a ver la condición del gatito.

—Jimin...

—¿Qué?

—¿De verdad estás enojado o solamente es una rabieta como cualquiera?— el nombrado asintió sentándome correctamente en el sillón para luego pedirle a su amigo que se sentara a su lado.

—No me gusta cuando Jungkook cree que miento, es como si todo lo que le dijera fuera un chiste para él, por eso cuando empieza a hablar así simplemente lo ignoro un tiempo y ya.

—¿Y se lo has dicho? Porque igual no es buena idea que los amigos se traten así— Jimin asintió diciendo que no servía de nada, porque cuando le hablaba de eso notaba que su mirada se quedaba en un punto fijo, lo que significaba que su cerebro se había desconectado y no le estaba tomando atención— ¿Tan distraído es? Yo pensé que era más atento, sobre todo por lo que hace— dijo, comentando para sus adentros un "no esperaba que siguiera haciendo eso", que por suerte su amigo no entendió y simplemente siguió contándole sobre ese tema como si nada.