Un Fénix Oscuro. [2]

Después.

Gabriella veía perpleja a su madre ¿Se habrá vuelto loca?.

Bianca llamó al timbre y segundo después un elfo doméstico, que se veía bastante maltratado, abrió. Este al ver a Bianca le hizo una reverencia y la dejó pasar, luego posó sus enormes ojos en Gabriella y se asustó al ver el reflejo de su amo en los ojos de esta.

-¡¿Dónde está?! - Exigió Bianca molesta
-En el salón ama- Respondió temeroso
-Bien- Dijo Bianca arrastrando a Gabriella por el pasillo.
-Gracias- Susurró Gabriella al elfo que la veía con terror absoluto.

Llegaron a un gran salón decorado de negro con gris, todo muy oscuro, no había más luz que la de las lámparas.

-¿Quién era gusano? - Preguntó una voz gruesa.
-¿Cómo me has llamado? - Dijo Bianca en tono coqueto.

Gabriella vio como el hombre, que estaba de espaldas a ellas, sentando en una gran silla, se levantaba enérgico y se volteaba.

Al ver el semblante del hombre Gabriella dejó caer su mandíbula. El hombre tenía el cabello marrón oscuro, sus ojos eran del mismo tono azul hielo y frío que los de Gabriella, al instante reconoció la misma nariz que ella poseía en el hombre, los mismos labios de tamaño promedio, incluso las mismas cejas. De no ser por el cabello Gabriella sería la copia, versión femenina, de este hombre.

-La has traído- Observo viendo a Gabriella notando las mismas similitudes, pero también su uniforme de Gryffindor- ¡Por mi señor! - Exclamó viéndola con asco- Una Gryffindor, con mi sangre - Dijo asqueado.

Bianca lo vio mal y el rodó los ojos.

-Pero no te preocupes princesa- Dijo de manera más amable al ver la mirada de Bianca- Lo arreglaré, nadie lo sabrá-
-Más te vale- Le dijo Bianca caminando hacia el y luego lo besó.

Gabriella vio con asco, enojo y perplejidad como su madre besaba a este desconocido de una manera que nunca vio que besara a su Fede, con deseo.

-¡¿Qué es esto?! ¡¿Le eres infiel a mi padre?! - Gritó Gabriella con asco.
-¿Pero que dices niña? - Preguntó el hombre riendo un poco con su áspera risa- Sí tu padre soy yo. - Dijo obvio.

Gabriella abrió mucho la boca y luego sin esperarlo recibió un abrazo departe del hombre.

-Soy Christian Avery, tu padre- Dijo para luego soltarla y darle una cachetada.

Bianca solo rodó los ojos y se sentó en un sillón, viendo como su hija cayó al piso por el golpe

-¡¿Porqué hiciste eso?! - Reclamó Gabriella enojada.
- ¡ERES UNA AVERY! - Rugió el hombre- ¡DEBISTE DE QUEDAR EN SLYTHERINE! - Regañó antes de volver a levantar la mano
-¡PERDÓN! - Gritó Gabriella cubriendo su rostro con las manos por el miedo- ¡LO LAMENTO! ¡POR FAVOR NO ME PEGUES! - Gritó
-No te iba a castigar- Dijo el señor Avery serio- Solo te voy a levnatar- Dijo obvio.

Tomó del brazo a Gabriella y la puso en pie frente a él.

-Bienvenida a casa Gabriella Christina Avery- Dijo antes de abrazarla de nuevo- Jamás en tu vida me vuelvas a decepcionar o vas a rogar que solo te pegue - Amenazó con una sonrisa antes de sentarse frente a Bianca que le iba a explicar todo.

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Al día siguiente en Hogwarts.

Chloe bajó a la sala común acompañada de Ántares, Hermione y Ginny. Para su sorpresa George y Fred estaban esperando al pie de la escalera.

-¿Qué les pasa a ustedes zanahorias? - Preguntó Chloe pasando junto a ellos.
-Queríamos preguntar a Gabriella cómo le fue con su mamá- Explicó Fred