Un Fénix Oscuro. [2]

Feliz Navidad.

POV: Fred.
Chloe salió casi corriendo a la escalera que lleva al dormitorio de las chicas, no parecía bien, me preocupé.
-¿Qué le pasa? Le pregunté a Gabriella preocupado.
-Sintió que algo le sucedió a Franco, ellos siempre tuvieron ese don, nunca supe como sentían lo mismo que el otro como si fueran…
-Gemelos. Completó George
-Mjm. Dijo esta
-¿Quién es Franco? Preguntó Harry de pronto.
Harry me cae bien, es buen chico pero al mismo tiempo lo envidio. El está pasando mucho tiempo con Chloe y ella es amable con el y también se preocupa por el, al igual que por Ron. Yo quería que ella fuese igual conmigo, pero no lo era en cambio era evasiva y a veces sentía que no me ponía atención. Eso me enojaba pero no sabía porque deseaba su atención. Nota mental descubrir esto.
-Es nuestro primo, se crío con nosotras pero más que todo con Chloe, ellos fueron criados como gemelos ya que tiene la misma edad y el mismo ego diría yo… Pero la madre de Franco, mi tía Amelia, se lo llevó con ella a Estados Unidos hacen 8 meses para que estudiara en Ilvermornie. Contestó Gabriella tomando los libros de su hermana.
-Eso debió de dolerle mucho. Creo que subiré a ver como está. Dijo Harry poniéndose en pie.
-No podrás pasar del tercer escalón, está hechizado, iré yo. Hasta mañana. Dijo Gabi para luego irse.
-¿Preocupado? Me molestó George sonriendo.
-Cállate. Dije.
Subí las escaleras y entré en mi habitación donde estaba Lee saliendo ya con su pijama, poco después llegó George.
-Te ves preocupado ¿Qué hiciste? Me preguntó Lee
-No hice nada y no estoy preocupado. Dije
-Chloe se sintió un poco mal allá abajo y Fred quiere ir a consolarla. Dijo George con una sonrisa de maldad
-Claro que no, solo estoy cansado y ya.
-¿Chloe es la niña de la que no dejabas de hablar en tus cartas durante el verano? Me preguntó Lee.
-La mencioné una vez. Dije
-Sí, en cada una de tus cartas. Me respondió para después reír.
Era cierto, desde que vi a aquella niña en su casa por primera vez quise saber todo sobre ella y a menudo me preguntaba que ¿estará haciendo? O ¿en qué piensa?.
-Ella es linda y amable, la he visto. Decía Lee
-No le hablarás. Le dije con un tono algo ¿Duro?
-¿Celoso? Tranquilo, no es su tipo. Decía George.
Decidí  ignorar a mis compañeros, cambiarme he irme a dormir, pero tardé bastante me preguntaba ¿Cómo estará ella?.

POV: Chloe
Desperté temprano al día siguiente, era la única despierta así que me bañé y me arreglé para para bajar a la sala común a ver a los chicos, deben de estar preocupados. Una vez lista me mire al espejo.
-Tu eres realmente la octava maravilla del mundo. Me dije
Bajé las escaleras. Ellos bajaron unos cuantos minutos después.
-¿Estas mejor? Preguntó Ron
-Sí, creo que Franco se puso triste o algo así. Dije
-¿Quieres que bajemos ya? Me preguntó Harry.
Asentí, todos bajamos al gran comedor y nos fuimos al resto de nuestras clases. Así pasó un mes.
Hoy es 31 de octubre o sea Halloween, un gran día, me desperté temprano bajé, esperé a los chicos y bajamos como todos los días a comer y después nos dirigimos a clase de encantamientos.
-Recuerden los ejercicios que practicamos y decir las palabras de forma clara Wingardium Leviosa. Decía el profesor.
-Wingardium LE VIO SÁ. Decía Ron frustrado.
-Espera, espera, espera le sacaras un ojo a alguien, además es leviOsa no leviosá. Le corrigió Hermione.
-Hazlo tú si te crees tan lista hazlo, hazlo. La reto Ron.
-Wingardium Leviosa. Dijo Hermione mientras una pluma se elevaba en el aire, miró con superioridad a Ron y este se quejó.
Solo Hermione, Parvati y yo logramos completar el hechizo, yo intenté ayudar a Harry mientras Ron se quejaba. Después de la clases íbamos caminando hacia herbología…
-Es insoportable, por eso nadie la tolera. Decía Ron
En ese momento pasó Hermione llorando, yo miré con mala cara a Ron.
-¿Qué te pasa? Ella solo es buena en lo que hace e intentó ayudarte. Le dije
-Ella quería ser la niña lista como siempre. Me dijo Ron
-Ronald Billius Weasley te vas a disculpar, es de muy mala educación hablar de una chica a sus espaldas, es más de cualquier persona. Le dije y luego me adelanté un poco.
Harry me alcanzó un poco después, supuse que estaba debatiendo quien tenía razón. En la clase de herbología Hermione no apareció, pero Ron me dijo que se iba a disculpar y que estaba avergonzado  así que decidí perdonarlo y continuamos con la lección.
Transcurrió el día y no volví a ver a Hermione en ninguna clases, ya me estaba preocupando, estábamos en el banquete y tampoco llegó así que me decidí a preguntar.
-¿Alguien ha visto a Hermione? Pregunté a nadie en particular.
-Parvati Patil dijo que se encerró en el baño de niñas y que ha estado llorando. Me respondió Seamus
Miré a Ron cara de pocos amigos y este tragó con dificultad el trozo de tarta, Harry agachó la cabeza decidido a no participar en el asunto que se venía, pero justo cuando iba a hablar entró el profesor Quirrell corriendo como loco.
-¡UN TROLL EN LAS MAZMORRAS! Solo es un aviso. Dijo antes de desmayarse
Todo el salón entró en pánico hasta que Dumbledore habló.
-SILENCIO, prefectos lleven a los alumnos de sus casas de vuelta a la sala común y profesores por favor síganme. Dijo este.
Todos nos empezamos a mover siguiendo las instrucciones Dumbledore hasta que Harry, que iba delante de mi, se paró en seco.
-¿Qué pasa? Le pregunté
-¡Hermione! Aún está en el baño y no sabe del troll. Respondió alarmado.
Nos escabullimos y corrimos hasta el baño de niñas en donde vimos al troll.
-Creo que ya no está en las mazmorras. Dijo Ron
Entramos al baño corriendo en cuanto lo vimos alejarse
-¡Hermione! La llamé
Está salió de uno de los cubículos limpiándose las lágrimas y nos miró.
-¿Qué hacen aquí? Preguntó con voz ronca.
-Vinimos por ti, hay un troll en el castillo, tenemos que irnos a la sala común ahora. Le dijo Harry
Pero cuando nos volvimos vimos al troll frente a nosotros.
-Chicos soy demasiado maravillosa y joven para morir. Les dije
Todo pasó muy rápido y de repente Harry y yo estábamos sobre su espalda, la varita de Harry se enterró en la nariz del troll haciendo que este gruñera, tomó su bate y estaba listo para pegarnos con el y fue cuando Ron logró hacer el hechizo Wingardium Leviosa y hacer que el bate golpeara al troll en la cabeza y este se desmayó de pronto. Harry y yo nos levantamos del piso, Hermione llegó corriendo hasta nosotros desde el otro lado de la habitación mientras Harry tomaba su varita de la nariz del troll.
-Que asco, moco de troll. Dijo
En ese momento llegaron los profesores y observaron la escena, no costó mucho que entendieran.
-Pero ¿Qué significa esto? Preguntó MacGonagall
-Es mi culpa profesora. Mintió Hermione
Todos la vimos sorprendidos
-¿Señorita Granger? Preguntó la profesora.
-Escuché lo del troll y como había leído sobre ellos creí que podría con el, pero me equivoqué y si Harry, Chloe y Ron no me hubieran encontrado yo no estaría contando esto. Dijo ella.
-Esperaba más de usted, 20 puntos menos para Gryffindor. Dijo la profesora
-En cuanto a ustedes tres, tienen 10 puntos como recompensa cada uno. No cualquier estudiante acaba con un troll de la montaña y vive para contarlo. Dijo la profesora antes de retirarse.
-Gracias Minnie. Le dije antes de que se fuera.
Snape que también estaba allí me observó y para sorpresa de todos los presentes habló.
-¿Está bien señorita Di Lessio? Me dijo como quien no quiere la cosa.
Todos estábamos atónitos, Snape ¿Se preocupa por mi?
-Sí señor, gracias por preguntar.
-Bien, jamás en tu vida vuelvas a ser tan incensata como para poner tu vida en peligro o le escribiré a tu madre. Me advirtió.
Yo solo asentí y el se fue.
Nos miramos y decidimos dirigirnos a la sala común. Pero acabamos en el tercer piso el cual estaba prohibido, claro que no queríamos estar ahí, pero como dije nos perdimos.
Vimos a la señora Norris justo ahí frente a nosotros y luego se fue.
-¡Corran va a ir por Filch! Dijo Hermione
Empezamos a correr hasta llegar a una puerta que estaba cerrada, escuchábamos a Filch cada vez más cerca.
-Alohomora. Dijo Hermione
La puerta se abrió y todos entramos de inmediato llegó Filch, lo escuchamos del otro lado, hasta que se fue. Fue entonces que Ron habló
-Chicos….
-Chicos... Repitió
-¿Qué pasa? Le dije
Pará cuándo nos volteamos vimos a un perro y negro, tenía tres cabezas y su pata estaba sobre una trampilla en el piso. Hermione tomó mi brazo y todos corrimos a la salido antes de ser devorados, no nos paramos a descansar hasta estar en la sala común que estaba vacía.
-¿Qué hace un animal así en una escuela? Preguntó Ron.
-¿No lo viste? Le pregunté.
Harry y Ron me vieron confundidos, pero Hermione respondió por mí.
-Había una trampilla bajo su pata, la esta cuidando. Dijo esta.
-Eso no es explicación.
-Yo me voy a dormir antes de que ustedes hagan algo que haga que nos maten o peor que nos expulsen. Dijo enfadada subiendo a nuestra habitación.
-Tiene que ordenar sus prioridades. Dijo Ron confundido.
-Claro que sí. Le dije yo.
-Vámonos antes de que alguien nos vea aquí. Dijo Harry.
-Adiós. Ron se marchó
-¿Estas bien? Preguntó Harry
-Sí ¿tú? Le pregunté de vuelta.
-Tendré pesadillas. Dijo con una sonrisa.
-Yo estaré ahí para ti si eso pasa, siempre estaré aquí para ti. Le dije
-¿Lo prometes? Me preguntó
-Claro que sí Jamie.
-Me gusta que me digas así, Ale. Yo te prometo que siempre voy a estar para ti y que siempre te voy a proteger por sobre todas las cosas, eres la hermana que nunca tuve. Dijo
-Te quiero y tu también eres como mi hermano , buenas noches Jamie. Le dije, le di un beso en la mejilla y me fui a mi habitación.
Todas ya estaban dormidas, incluso Hermione, así que me cambié y me fui a dormir.
El tiempo pasó y pasaron muchas cosas. Harry se convirtió en el nuevo buscador de Gryffindor y ganó su primer partido, por supuesto que me alegré por el y en ese primer partido llevé mi nuevo suéter con la inscripción “Potter” y el número 7 este me lo regaló Harry y me encantó. Poco después de eso conocí al capitán del equipo de Gryffindor, Oliver Wood, es amable conmigo y los demás y es gracioso nos llevamos bien.
Durante el partido Harry tuvo dificultades con la escoba por culpa de Snape y casi se cae de su escoba de no ser por Hermione. Después una bludger casi le da a mi cabeza de no ser por Fred, después de eso jugó un poco más rudo y mi hermana igual, ella es cazadora. Harry atrapó la snitch o mejor dicho, casi se la tragó. Cuando terminó Ron, Hermione y yo corrimos a los vestidores a ver como estaba.
-¿Estas bien Jamie? Me preocupaste. Le dije mientras lo abrazaba y el a mi.
Poco a poco la cercanía de Harry y mía se fue haciendo más estrecha, hasta el punto de que podría contarle lo que sea.
-Lo estoy ¿Y tú? Vi esa bludger. Me dijo.
-Estoy perfecta, por cierto gracias por eso fotocopia te debo una. Le dije a Fred.
-Igual la habría esquivado. Dijo mi hermana.
-Sobre una escoba quizás, pero en tierra lo dudo mucho. Le dije.
-¿Tú juegas? Me preguntó Fred
-¿Qué si juega? Está obsesionada, es cazadora, como yo. Dijo Gabriella
-Haz la prueba el año que viene, ahora que Katie se va a retirar. Dijo Wood
-Me lo voy a pensar. Le dije
Este sonrió y se fue, nosotros también nos dirigimos de vuelta al castillo.
Al día siguiente después de clases alcanzamos a Hagrid después de que Harry recordará que el fue quien había traído el objeto que sacó de la cámara 713, la cual después fue saqueada, así que supimos que el tenía que ver con el perro.
-Hagrid. Lo abordó Hermione
-Díganme.
-¿Conoces lo que guarda el perro de tres cabezas del tercer piso? Preguntó Harry siendo directo, muy directo.
Hagrid palideció y nos observó
-¿Cómo saben sobre Fluffy? Preguntó
-¿Fluffy? Dije yo
-¿Lo conoces? Preguntó Hermione
-Claro que sí es mío, se lo presté a Dumbledore para que cuidara…
Palideció de nuevo y parecía haber dicho demasiado.
-¿Qué es lo que guarda? Preguntó Harry
-Eso no es asunto de ustedes, solo del profesor Dumbledore y de Nicolás Flamel. Dijo para luego taparse la boca.
-¿Quién es Nicolás Flamel? Le preguntó Ron
-Ya dije demasiado.
-Pero creemos que alguien quiere robarlo. Dijo Hermione
-¿Quién querría robar en Hogwarts? Preguntó Hagrid
-Creemos que es Snape y que por eso quiso matar a Harry en el partido. Le dije
-¿Snape? JAJAJA el jamás haría eso, ahora debo irme antes decir algo más. Dijo este.
-Y tu Chloe no desconfíes de Snape, el no haría nada para dañarte. Me dijo.
-¿Qué quieres decir con eso? Le pregunté.
Solo se fue, dejándonos aún más curiosos.
Los siguientes meses nos dedicamos a investigar a Nicolás Flamel, también recibí varias cartas de regreso de Franco, resulta que el viaje de la carta era de casi un mes de ida y otro de vuelta.