Un Fénix Oscuro. [2]

Maratón 4

El tren era golpeado por una fuerte lluvia, los cinco amigos estaban esparcidos por todo el compartimiento.

Hermione estaba leyendo sentada en las piernas de Franco mientras el recibía caricias en su cabello por parte de la castaña.

Ron estaba dormido en el hombro del rubio/castaño con una varita de regaliz aún colgando de su boca entreabierta.

Chloe estaba jugando con una bola de fuego en sus dedos mientras estaba sentada en su cómodo asiento, o sea Harry Potter.

Este último solamente jugaba con el cabello de su amiga mientras la veía con una sonrisa.

"-Vas a gastar a mi hermana- Le dijo Franco en su mente.

-No sé de qué hablas rubio- Respondió el"

Harry estaba totalmente sonrojado y cambió la dirección de su mirada a Hermione que lo veía sonriendo.

-Tengo tanto sueño- Murmuró Chloe acomodándose para dormir-

-Yo igual - Respondió Franco.

Ambos gemelos rápidamente se quedaron dormidos mientra tarareaban una nana que Sirius les había estado cantando las últimas semanas.

Hermione se levantó de su asiento y se colocó junto a Harry.

-Tienes que decirle- Susurró.

-¡¿Estás loca?! -

-¿Qué podría salir mal? -

-¡Todo! ¡Literalmente todo! - Le respondió el azabache tirándose del cabello - Ella podría rechazarme, nuestra amistad de toda la vida se iría por el caño, Franco me odiaría, Sirius me mordería o peor aún, me mataría y eso sin mencionar lo que Draco me haría-

-Esos son sólo los contras- Recordó Hermione.

Harry suspiró cansado y rodando los ojos.

-No le diré Herms, déjalo ya- Dijo cansando.

El resto del viaje pasó en silencio y al llegar rápidamente Chloe y Hermione, las perfectas de ese año, se aseguraron de hacer sus labores.

-Aún no entiendo cómo es que ambas son prefectas- Les dijo Ron.

-Minnie dijo que no había una regla que dictará que tiene que ser un chico y una chica- Recordó Chloe.

Los cinco esperaban un carruaje hasta que Chloe, Franco y Harry se congelaron viendo el transporte.

-¿Qué sucede? - Preguntó Ron.

-¿Qué ustedes no ven a los caballos enormes, esqueléticos y tétricos? - Preguntó la chica.

-No, los carruajes se mueven solos Chloe- Recordó Hermione.

-No querida Mione, yo también los veo- Continuó Franco.

-Y yo -

Los cinco subieron al carruaje y poco después llegó Neville con una media sonrisa y acompañado de una chica rubia muy bonita.

-Hola chicos- Saludó el rubio Gryffindor entrando seguido por la otra chica.

Nev al ver que todos veían a su amiga sonrió para presentarla.