Capítulo 12

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Un escalofrío recorrió todo su cuerpo y, percatándose de que ninguna de las dos mujeres se diera cuenta, empezó a pasar su mirada por todos lados buscando a ese infeliz, pero tenía una perspectiva muy reducida y no pudo ver nada.

A los pocos minutos Erick regresó con apenas dos vasos de agua y se los entregó a Yenny y Diana, las cuales ya estaban apenas un poco más calmadas.

-y yo?

-tu puedes pararte e ir a buscar tu vasito con agua solo- le sonrió burlonamente mientras se sentaba a su lado

-vengo hasta aquí sin comer nada y pa' rematar no eres capaz de traerme un simple vaso con agua? Todo mal Erick- le dijo con un tono de voz más bajo y se cruzó de brazos

-ya dramático, sin llorar- el castaño abrió su boca ofendido y se puso de pie

-ya vas a ver cuando me pidas un favor- lo señaló de una manera amenazante y le sacó la lengua

Al mismo tiempo que se dio la vuelta escuchó a Erick reírse de él; soltó un suspiro y empezó a alejarse con destino a la cafetería. No se iba a dejar morir de hambre.

En el camino a la cafetería, aprovechó y empezó a buscar con cautela a Sebastián; miró por los pasillos, escaleras, habitaciones y hasta a través de las ventanas, pero no estaba por ningún lado. suspiró rendido y siguió su camino.

Al estar allí pidió un paquete medianamente grande de papas fritas con un jugo en botella y se sentó en una de las mesas libres a disfrutar su comida. Abrió el paquete, sacó la primera papa y antes de que pudiera meterla en su boca sintió unos brazos rodear su cuello y un beso en su mejilla.

Inconscientemente soltó un suspiro de cansancio y dejó lo que había comprado sobre la mesa, se giró y pudo ver a Erick con una gran sonrisa. Al parecer le encantaba joderle la vida porque ya no lo dejaba ni comer en paz.

Era evidente que el menor hacía todo de aposta; le parecía divertido ver a Chris estresado y sin poder hacer nada al respecto.

El pelinegro tomó una de las sillas y la corrió para quedar más cerca del castaño, tomó su mano y la entrelazó con la suya. Sin decir nada lo miró y se acercó a su rostro hasta cerrar la distancia que los separaba con un beso dulce y lento el cual fue correspondido.

-qué pasa amor, estás como estresado- dijo tratando de no reírse

-tu crees? -respondió con sarcasmo y giró los ojos

-no sé, dime tu

-pues el estar trabajando toda la mañana, tener una reunión de casi dos horas, enterarte que tu hermano está en el hospital herido y no comer nada en todo el día son motivos suficientes para estar estresado no crees?

-espera...como que no has comido nada?

-e-eeh...

-Chris, esta mañana me dijiste que tenías tiempo suficiente para desayunar y por eso estabas en una cafetería- dijo serio

-pues sí, pero de un momento a otro se me quitó el hambre y solo me tomé un café

-ajá- soltó el agarre de sus manos y se apoyó en la mesa

-fuera del hecho te vas a enojar? -no recibió respuesta- increíble- se puso de pie tomando el paquete y la botella dispuesto a irse, pero Erick se lo impidió

-siéntate...por favor

-ahora qué?

-quieres que nos vayamos a casa? Creo que necesitas descansar y comer bien, unas papas no te van a hacer mucho

Heridas Abiertas || ChrisErick (Segunda Parte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora