Cuestión de decisiones

Capitulo 27-28

CAPÍTULO 27

Era el día de la graduación.

Estaba sentada al lado de Lucía y Roberto, otro de mis compañeros de curso. Ricardo estaba sentado a la par de su mejor amigo Pablo. Había logrado escabullirme de él.

"Estoy nerviosa" me dice Lucía "tengo miedo de caer cuando suba a tomar mi diploma"

Desvió mi mirada de Ricardo y veo a Lucía "Mira hacia abajo cuando subas las gradas" mi tono de voz era débil.

"Anímate Natty" me dice Lucía pasando su brazo sobre mis hombros "es el día de nuestra graduación"

Sonrió débilmente e intento mejorar mi estado de ánimo.

Le pregunto a Lucía si ya eligió una especialidad en la universidad. Esto la hace hablar por un largo rato hasta el momento en el que comienza el acto de graduación.

La alumna estrella de nuestro curso da su habitual discurso de sueños y mirar hacia el futura. La misma basura típica de siempre. Podría rodar los ojos, pero hasta para eso he perdido el ánimo.

Comienzan a entregar los diplomas y uno por uno los estudiantes suben a la tarima para recoger su título.

Llega mi turno y me levanto para ir hacia la tarima. Camino recto sin desviar mi mirada a ningún lado. Tengo miedo de encontrarme con la mirada de Ricardo.

Tomo mi diploma y luego regreso a mi asiento deseosa de que esto termine y así regresar al refugio de mi cuarto.

Mamá invito a mi abuela, lo que hace que el temperamento de papá se controle. A papá le gusta fingir que es el esposo y padre perfecto ante los demás.

Veo a los padres de Ricardo acercarse y sé que el también viene.

"Felicidades" la mama de Ricardo les da un abrazo a mis padres "ya cumplimos nuestra cuota con estos chicos"

Papá responde de manera educada y sonríe. Rodo los ojos sin que él me vea. Es tan hipócrita.

Veo a Ricardo tras su padre, el me mira y me indica con su cabeza que vayamos a otro lado.

Que sea lo que tenga que ser.

Asiento y me alejo de nuestros padres.

Caminamos en silencio hasta la cancha de basquetbol.

El cielo comienza a tornarse naranja. Lo aprecio por un largo rato, hasta que Ricardo se decide hablar.

"Felicidades, ya somos graduados" asiento "te ves muy bonita"

"Gracias. Felicidades a ti también" digo casi en tono monótono.

Ricardo suspira y se queda de nuevo en silencio.

"Si eso es todo lo que tenías que decirme, voy a regresar con mis padres. Creo que iremos a cenar con mi abuela"

"¿y debes ir con ellos? Pensé que tú y yo podríamos ir a celebrar juntos"

"Si debo. Sabes como de ogro se pone papá si no hago lo que él dice"

"Si, lo sé" dice Ricardo con lamento.

"Bien, adiós" comienzo a caminar de regreso hacia donde están mis padres.

"Nos vemos esta noche entonces" me dice Ricardo a mis espaldas.

"¿Me lo estas pidiendo o exigiendo?" digo sonando molesta de que me lo esté imponiendo.

"Ambos" me da un beso en la mejilla y comienza a caminar hacia donde están los demás.