roommate || woosan

𝔭𝔞𝔯𝔱𝔢 𝔰𝔢𝔦𝔰.

San

Me desperté a las siete y media de la mañana y apagué la alarma con los ojos aún cerrados. Me da igual, voy a seguir durmiendo, que le den a las clases.

Noté cómo alguien me miraba. -San, levanta. Son casi las ocho de la mañana.

Wooyoung, obvio. Qué pesado es este tío. Decidí hacerme el dormido.

-Levántate ya- me zarandeó. -Te ayudo a levantarte no porque me gustes, sino porque soy buena persona. Que seguro que te crees tú cosas raras. Venga, que son casi las ocho.

-¡Calla ya!- le miré. -Déjame solo- me tapé hasta la cabeza con la manta.

-Vale, como quieras. Duerme todo lo que te salga del pito.

Cuando por fin escuché la puerta cerrarse me destapé. -Joder, la cabeza me está matando.

Cogí el móvil y llamé a Yunho.

-San, ¿dónde estás? Yo acabo de llegar a la universidad, vamos a tomarnos algo, anda.

-Yunho- este chico no callaba.

-Suenas raro. ¿Te acabas de despertar?- se rió. -Levántate ya, vago, que vas a llegar tarde. ¿Vas a saltarte las clases?

-Me duele mucho la cabeza...

-¿Te has puesto malo? ¿Tienes fiebre? ¿Te hago una visita?

-No, tranquilo, estoy bien. Solo necesito dormir. Nos vemos mañana.

Y colgué. No tenía ganas de nada, aunque Yunho se preocupara por mí. Dejé el móvil de nuevo en la mesita de noche y me tapé con la manta para seguir durmiendo.

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Narrador omnisciente

-Joder, ahora qué hago- pensaba Yunho en voz alta. Divisó a Wooyoung entrando al campus. -¡Wooyoung!- le saludó y se acercó. -Vaya cara me llevas, ¿ha muerto alguien?

-¿Qué quieres? Tengo prisa- respondió seco.

-San me ha llamado y me ha dicho que está malo, ¿es verdad o se lo está inventando para faltar?

Wooyoung miró extrañado a Yunho.

-¿No sabías que estaba malo?

-¿Y tú cómo lo sabes?

-Le llamé hace un rato a ver si desayunábamos juntos, pero me dijo que se encontraba mal-Wooyoung miró hacia otro lado intentando que no le importase. -Y tenía la voz tomada. Le he vuelto a llamar pero no me contesta. Por eso te he preguntado si de verdad está malo.

Wooyoung tragó pesadamente y miró todo lo disimulado que pudo el reloj.

-Oh, tienes clase, ¿verdad? Perdona, no te entretengo más. Ya voy yo a ver cómo está, tranquilo- sonrió. -Y luego volveré a clase, porque el profesor es súper estricto- rió ligeramente. -Nos vemos.

Yunho se dio la vuelta, pero Wooyoung le agarró del brazo.

-Espera- le miró. -Puedes... volver a clase. Voy yo a ver cómo está.

-¿Cómo? ¿Pero no tenías prisa por entrar a clase?- preguntó confundido.

-No te preocupes, vete a clase anda- sonrió. -¿Esta sopa es para él, no?- cogió la bolsa de la mano de Yunho. -Voy a ir a ver cómo está y tú vuelves a clase, ¿vale? Nos vemos.

Y antes de que le diera tiempo a Yunho de reaccionar al cambio de papeles, Wooyoung ya se había ido.

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