Never Enough ~ Shadonic

12

El timbre sonó y la puerta fue abierta por un mayordomo. Los pasos se escuchaban dentro de la mansión y el azulado bajaba las escaleras para recibir a quien fuera su visita.

– Hola, Sonic. – saludaba el moreno.

– Shadow. – llamaba sorprendido yendo directo hacia él – ¿Qué te trae por aquí?

– Quise venir a verte, ¿Estás ocupado?

– No, hoy no tengo planes. – en eso, miró a su mayordomo y asintió una vez con la cabeza – Gracias, Víctor.

– Un placer. – respondió y procedió a irse para dejarlos solos.

– Am... ¿Quieres nadar? ¿Tomar algo?

– Solo quisiera que platiquemos. – confesó sin problema.

El azulado lo guio con él subiendo las escaleras e irse hacia uno de los balcones. Tenía sillas muy cómodas bajo una sombrilla color blanca.

– ¿Cómo has estado, azul? – preguntaba mientras se sentaba al mismo tiempo que el actor.

– Bien, he estado bien. – respondió volteándolo a ver – ¿Y tú...?

– Ni bien, ni mal. – suspiró – Era algo que iba a pasar. – confesaba, pero antes de que el azulado preguntara algo, retomó la plática – por cierto... Vi el celular de Verena el otro día y justo vi los mensajes. – lo miró.

– E-Eh... Y-Yo estaba... – se rascaba la nuca desviando la mirada sintiéndose muy incómodo y apenado – Ya sé que no fue la mejor forma, pero me sentía con mucho coraje y... Me arrepentí después que quise llamarla y pedirle perdón por todo eso, pero no he logrado contactarla.

– Está muy molesta. – desvió su mirada suspirando – Ambos lo estamos, pero no entre nosotros... Sino con la industria.

– ¿No te molesta que te haya engañado? – lo miro confundido.

– Sonic. – lo miró nuevamente – Ella es más joven que nosotros dos. No sé cómo fuiste a su edad, pero yo me salía con la mía y ahora mismo no debo darme el lujo de hacerme el "pobrecito de mí, me engañaron". De jóvenes cometemos errores. Hacemos cosas sin pensar, pero tomamos el riesgo para muchas cosas.

– Si... También me salía con la mía en esa edad. – confesaba suspirando.

– ¿Sabes que es lo peor de todo? Que solo la atacaron a ella y a Jehan casi ni lo tomaron en cuenta para amenazarlo de muerte. – negaba con la cabeza – ¿Por qué solo se juzga a las mujeres y no a los hombres?

Sonic se quedó callado por completo, él se desquitó solamente con la reina del rock y jamás mandó un mensaje al director.

– Es una mierda todo. – comentó nuevamente el moreno.

– ¿Crees que pueda ir a verla?...

– Ahora mismo no quiere ver a muchos. – lo miró – No quiero que vuelva a tener una aneurisma...

– ¿Le puede volver a dar? – preguntaba nervioso.

– Las probabilidades son bajas. – respondió – Aun así, no está del todo exenta por el estrés de ahora e incluso del miedo. No he hablado con ella, por lo mismo de que no quiere ver a nadie, pero temo a que vuelva a pasar y... No sobreviva esta vez.

– ¿Había pasado algo entre ustedes para que hiciera tal cosa, Shadow?

– Había un enorme problema que ha estado entre nosotros desde hace tiempo y que no podíamos hacer algo para terminar con ese problema de mierda.

– Y... ¿Qué es o qué era?

– No quiero hablar de ello, por ahora. – suspiró – Pero creo que con lo que hizo, terminó el problema. ¿Tienes nuevos proyectos, Sonic? – lo miró.

– Por el momento no. – sonreía un poco – No he tenido interés de tomar un papel y mi agente tampoco ha conseguido alguno bueno.

– Starline te apoya mucho, ¿No?

– Sí. – sonreía divertido – Es como si fuera mi papá. Siempre al pendiente de mí.

– Es bueno contar con excelentes tipos en tu carrera. – mencionaba – Por desgracia, hay muchos que quieren aprovecharse como pasó con esta cantante... – miraba hacia el cielo tratando de recordar – ¿Cuál era su nombre?... Es la loba rubia...

– ¿Kesha?

– Sí. Ella. – negaba con la cabeza – Lo peor fue que su agente ganara el juicio teniendo todas las posibilidades de ella ganar. ¿Recuerdas a Brendan Fraser?

– Me gustaban muchas de sus películas. – comentó el azulado muy interesado – ¿Qué ha sido de él? Ya no lo he visto.

– Resulta que un asqueroso tipo lo toco. – contaba con molestia – Claro que, Brendan, se opuso y por no quedarse callado, ese sujeto le perjudicó su carrera. Se culpaba a sí mismo por algo que no cometió.

– ¿Qué? – su expresión facial mostraba sorpresa y asco a la vez – Que mierda es este mundo. Es como con el antiguo agente de Taylor Swift, creo que era el antiguo agente. Quiso apropiarse de las antiguas canciones que ella misma compuso y ganar dinero sin darle nada a Taylor.

– Y no solo pasa dentro de esta industria, pasa en todo el mundo. – suspiraba – Parte del mundo es una mierda, pero cuando conoces a los correctos, la otra parte del mundo es una maravilla.

– Estoy de acuerdo. – sonrió – Me sobrarían dedos para contar a quienes han sido una maravilla.

– A mí también me sobrarían. Solo espero que todo esto termine pronto.

Los entrevistadores perseguían a cada famoso que estaba en su camino, como lo estaban haciendo con la hermosa y diseñadora, Rouge.

– ¡Rouge! – llamaban todos los entrevistadores – ¡Rouge!

– ¿Qué opinas acerca de la infidelidad por parte de la reina del rock? – preguntó inmediatamente una gata dándole el micrófono al murciélago.

– ¿Por qué están todos obsesionados con eso? – cuestionaba irritada – Lo único que espero es que, como público, logren separar la vida personal del trabajo que hace. No queremos que pase algo semejante como lo fue con Amber con Johnny Deep.

Procedió con su camino alejándose de todos los entrevistadores.

– ¡Silver! ¿Cuál es tu opinión del engaño de la reina del rock?

– Es mi mejor amiga y siempre tendrá mi apoyo. – contestaba con tranquilidad – Todos ustedes son una basura por querer sacar provecho de eso. – no dijo más y siguió con su camino.