8

392 52 37
                                    

Ya estaban en la playa, justo llegando a una bella casa ubicada en la playa. Con ellos, había ido Jehan, Rouge, Amy y Silver.

Rouge era una importante y reconocida diseñadora de modas. Silver era también un famoso cantante del género R&B/Soul.



– Wow... – admiró el azulado al ver la casa – Es bellísima.

– Esta casa la compró Verena para que su familia viniera de vacaciones. – le comentaba el moreno – Es un lugar muy tranquilo y la parte de atrás es aún mejor. – aseguró.



Ingresaron a la casa, estaba muy bien cuidada y muy limpia. Los muebles eran blancos con tejido. Había una puerta que se deslizaba y las cortinas estaban abiertas, daba vista hacia el mar.



– Este lugar se ve asombroso ante la puesta del sol. – comentó el plateado.

– ¿De verdad? – preguntaba asombrada la rosada – Quiero ver el atardecer...

– Incluso se ve más bello cuando las garzas pasan volando durante el atardecer. – mencionó el gato rojo.

– Oye, creo que subiste una foto así a Instagram. – comentaba el azulado – Entonces esa la tomaste aquí. – sonreía.

– Si, justo hace un año vine con Verena.

– Debieron pasarla bien los cinco.

– ¿Cinco? – frunció un poco el ceño riendo – Verena y yo venimos solos.



No dijo, quedó muy sorprendido por lo que escucho. En su mente pasó toda una serie de opciones que pudieron haber sucedido mientras estaban solos, recordaba también cuando los vio muy juntos en la cena. No quería pensar mal de ambos, pero los hechos le hacían hacerlo y no le parecía justo que estuvieran haciendo algo a escondidas del rey del rock.



– Vayan a dejar sus cosas en las habitaciones. – comentó el moreno – Descansemos un rato, vemos el atardecer y luego nos vamos de fiesta. ¿Irás, Rouge? – la miró.

– No, gracias. – respondió con una ligera sonrisa – Quiero aprovechar el clima para darme mi baño de burbujas.

– De acuerdo. – mencionó mientras se acercaba a la gata – llevo tu maleta a la habitación, Vanny.

– Gracias. – le sonreía muy cariñosa.























Más tarde, estaban todos sentados en los sillones elegantes listos para la puesta del sol. Tenían canciones a un volumen considerable para que pudieran platicar sin ningún problema, también tenían con ellos bebidas como refresco y algo de botana.



– ¿Qué tienes pensado sacar esta vez para primavera? – preguntaba curiosa la rosada.

– Es sorpresa, cariño. – sonreía orgullosa la murciélago – Pero te aseguro que quedarán muy felices con lo que sacaré este año.

– ¡La apuesta de sol! – decía con gran emoción la rosada – ¡Es hermoso! – admiraba al mismo tiempo que sacaba muchas fotografías.



Todos admiraban la apuesta de sol, el azulado se distrajo un poco al escuchar la voz de la reina del rock. La miraba, ella lucía tan feliz señalando mientras que el rey del rock estaba ocupado tomándole fotografías aprovechando que estaba distraída. La acción le hizo sonreír y admitía para sí mismo que, lo que sus ojos apreciaban, era algo realmente bello.



– ¡Es hora de irnos a divertirnos! – celebraba el plateado poniéndose de pie.



Ya estaban en aquel sitio en donde muchos se reunían para tomar algo y platicar o para bailar sin parar, la música podía ser en vivo o simplemente con la que ponían en las bocinas del lugar.

Never Enough ~ ShadonicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora