Complicado(s)

Fiestita de bienvenida

Sexto capitulo

Narrador universal.

Este era el primer día de los chicos en el famoso elite way school, un prestigioso instituto, conocido por ser el más importante en el país, dice la leyenda, que los lideres del mañana se formaban en ese mismo colegio.

Era domingo, por lo que tenían el día libre, se los obligaba a ir un día antes, ya que era para la adaptación de los nuevos, debían acomodar sus cosas, se repartían las habitaciones y conocía al personal, a la mañana siguiente comenzarían las clases y los cuatro estaban en 6to año.

Ninguno de los cuatro tuvo que compartir el cuarto entre sí, por suerte para todos ya que cualquiera podría decir que sus peleas eran intolerables, incluso sin conocerlos. El orden de los cuartos estaban listos y colgados en la pizarra, las habitaciones estaban divididas así:

Manuel Aguirre, Nicolás Provenza, Marcos Aguilar

Pablo Bustamante, Tomás Escurra, Guido Lasen

Mía Bustamante, Felicitas Mitre, Victoria Paz, Pilar Dunoff

Marizza Spirito, Luna Fernández, Luján Linares

Al llegar cada uno a su habitación estaban vacías pero todos encontraron la misma nota sobre su cama. Cada una tenía su nombre, pero ninguna tenía remitente.

"Te esperamos luego de la media noche en el cuarto de la lavandería, sin acompañantes."

Los cuatro creyeron que era una broma, pero los cuatro tenían intriga. Para colmo ninguno de sus compañeros de cuarto se habían presentado, no conocían a nadie más que a ellos mismos. Les llevo toda la tarde acomodarse en sus respectivas habitaciones, en cuanto terminaron a la noche fueron al bar a cenar, donde se encontraron todos y tenían la esperanza de conocer gente nueva.

Primero entraron los mellizos, que al ver que solo la mesa del medio estaba disponible ambos se sentaron juntos, sintiéndose observados por todo el lugar aunque no distinguían quienes eran, tampoco se les acercaban.

—Como te estaba diciendo Pablo, estoy segura que fue idea de la parejita de grasas, habrán sido ellos los que nos dejaron las notas, es una bromita no hay que ir ¿si? —

—Ya lo se Mía pero tengo una idea mejor, vamos a ir juntos y vamos a estropearles la joda, van a aprender que con los Bustamante no se jode, me tienen harto—

Mía asintió con la cabeza y se quedaron unos segundos en silencio, una tranquilidad que no duro mucha ya que luego entraron los dos faltantes al bar y al ver que no quedaba otro lugar Manuel se acercó a ellos

—¿Nos podemos sentar? es que no hay otro lugar disponible y a ustedes les sobran dos sillas—

—No queremos simios en nuestra mesa, disculpa— negó con ironía Mía

—Manuel, no vale la pena la diplomacia con estos dos ridículos, los muñequitos no entienden que no son dueños de nada, y que todos aquí dentro tenemos los mismos derechos— sonrió Marizza —Podemos sentarnos donde queramos, y da la casualidad que estos son los únicos dos asientos libres—

La pelirroja se sentó junto a Pablo, mientras que Manuel tomó asiento junto a Mía, algo avergonzado. 

—No nos queda otra opción— aclaró el mexicano

—Lo único que nos faltaba— suspiró el rubio— Me tienen harto ¿que parte no entienden? que estemos en el mismo colegio no significa que seamos amigos ni nada—

—Ay cállate Pablin, tu opinión no interesa— lo calló — mejor cuéntenle a su nueva hermana ¿Qué compañeritos de cuarto les tocaron?— preguntó con mucha ironía