Por Amandine.

12 4 0
                                    

Leon:

ㅡLeon. Amor, déjame entrar. Debes comer.
ㅡ¡Vete! Déjame ㅡgrito entre sollozos en mi cuarto oscuro.

Una semana. Una semana y nada en mi interior cambia.

¿Y acaso cambiará lo que siento?

Los recuerdos. Los malditos recuerdos. Sus cosas en mi cama y el suelo.

Vanessa:

ㅡ¡No! ¡No! ㅡAruño mi cuello, mi pecho y mi cara. Muerdo mis labios hasta sangrar y golpeo la pared.

Quiero doler pero no por dentro.

Lo sabía. Si ella tan solo hubiera leído los mensajes que le dejé esa misma noche. Si el tráfico en el puente Good Will no hubiera estado atascado, si hubiera dejado el coche y hubiera salido corriendo. Si le hubiera dicho días antes lo que sospechaba. Si le hubiera dicho "Te quiero" en vez de estar encerrada intentando probar algo que ya era obvio.

Cuando vio aquellas fotografías debí haberle dicho que sí, se trataba de Lillian con un estudio dedicado añ acoso contra Amandine. Ella solo esperaba el momento oportuno y no intervine...

Veinticinco días después. 31 de diciembre.

Leon:

Cuando todos están en sus casas festejando el fin de año y esperando Año Nuevo, Lucas Bolet, Uma, Vanessa, Lionis, Mercedes, Mel, el padre de Aman, Amanda, mis padres y yo nos encontramos en el puente Goodwill Bidger.

Hace veinticinco días perdimos a nuestro Sol, a nuestra alegría y preocupación, esa que desearíamos tener siempre.

Amandine.

La noche en que el fuego me hizo pensar demasiado en vez de salir a tiempo en su busca. La noche en que el agua oscureció sus pensamientos y llenó su cuerpo.

No creí tener fuerzas para salir de casa. Pero pensar en que le gustaría un Fin de Año en que estuviéramos todos juntos me dio la voluntad para venir.

Mel trae el jarrón del que no quería separase con sus cenizas dentro.
Ya estoy llorando, tirado en el suelo con esas punzadas en el pecho que siento cada vez que algún recuerdo ataca a mi mente. Nadie se acerca a mí porque todos, a su manera, están colapsados y desolados en dolor.

Mis padres me levantan y me sostengo de la baranda del muelle. Al ver el río recuerdo la noche en que vimos los fuegos artificiales frente a este. La noche en que la hice mía.

Mi madre reparte pequeñas bengalas de cumpleaños. Le da, en el otro extremo, un encendedor al entrenador Bolet.

ㅡPor haber sido tan buena como para aceptarme como compañero en la vida de tu madre a pesar de que fuiste un medio para llegar a Mel ㅡ dice entre lágrimas luego de encender la bengala. La suelta al río y le pasa el encendedor a Uma.

Esta enciende la suya y la levanta.

ㅡPorque tu felicidad era la mía y la mía era tuya; así como la tristeza. Porque te... ㅡSe cubre la cara con la mano libre y sus hombros se encorvan derrotados. Todos desbordamos lágrimas ante la reacción de todosㅡ, te sentías bien cuando los demás lo estábamos y eso te hace valiosa. ㅡSuelta su bengala para que caiga hacia el río.

ㅡPor haberme aceptado a pesar de mis obsesiones y mi carácter. Por ser preocupada y atenta. Ser el ángel guardián nuestro ㅡexpresa Vanessa abrazando de costado a Uma con el brazo libre.

Así se van pasando el encendedor y dejan caer la bengala en llamas hacia el río.

ㅡ Haber sabido confiar en nosotros ㅡen Leon y en míㅡ y darnos oportunidad. A mí como cuñado, pues, de no haberte agradado e inspirado suficiente confianza no me habrías dejado estar con tu hermana. La protegías como si se tratase de tu alma. Porque me querías así todo friki como decías ㅡdice Lionis y luego de tirar la bengala da la espalda al río para llorar.

ㅡPor haber intentado ayudarme a confiar en mí. Defenderme de la que... ㅡtoma una bocanada de aireㅡ...de la que necesitaste defenderte tú misma. Por tu altruismo ㅡdeclara Mercedes casi incomprensiblemente.

ㅡPor saberme valorar no solo como madre sino como mujer también. Por entender mis crisis nerviosas y no alterarte cuando te sobreprotegía desde lo ocurrido a tus ocho años hasta tus quince años. Por... por tus besos en mi frente. ㅡLa bengala de Mel cae al suelo junto con ella. El padre de Aman levanta a Mel y del otro lado Mercedes toma la bengala antes de que se apague y la lanza al río.

ㅡPor ser comprensiva, cariñosa, terca... ㅡEl padre de Aman propina una pobre risa de recuerdos bonitos.

ㅡPor las veces que me ayudaste cuando mis brazos fueron inútiles. Por aceptar a cada cual como fuera. Como a mi hijo. Un orgulloso y roto hijo por dentro, con la necesidad de la comprensión de alguien más que sus padres. Por ser la hija que no tuve y la nuera que jamás tendré ㅡatribuye mi madre y la sola palabra "Jamás" nos supera haciéndonos soltar ríos de lágrimas y sollozos.

ㅡPor ser la representación del amor, independencia, coraje y carisma. Por presentarte a nuestras vidas ㅡdice mi padre y se seca las lágrimas que aguantaba para que no salieran.

Me pasa el encendedor a mí. Todo lo que siento es dolor y mi mayor temor es ahora... seguir adelante.

ㅡPor todos los "Te amo", los "Idiota amoroso", por ser tan hippie y felíz. Por los días que hiciste especiales y que ahora son todo lo que hay en mi mente. Por hacerme saber antes de partir que es posible amar y que es la mejor sensación, emoción y sentimiento que conoceré nunca. Por ser la niña que me iluminaba el día en la piscina y la mujer que me levantaba de mis borracheras ㅡdigo con un intento de reír, pero no lo consigoㅡ. Por la madre que pudiste haber sido. ㅡEl recuerdo de la noticia luego de la autopsia de que tenía cuatro meses de embarazo me destruye.

No se fue una vida, sino dos. Y mi alma también.

Lanzo la bengala hasta verla caer en el agua y apagarse.

Caminamos al otro extremo del puente. Hacia el lado de Brisbane donde quería que fuéramos cuando regresara de América.

Agradezco tanto haberle dicho te amo cuando se fue hacia su perdición.

Se oyen ruidos y estruendos.
Ya son las 12:00 a.m. Todos festejan y lo disfrutan. O casi todos.

Sé que otras personas, como nosotros, están en una funeraria o abrazando las cenizas de lo que fue una vida. Esta injusticia no debe ser solo para mí, ¿cierto?

Feliz Año nuevo, buscapleitos.

Nos paramos frente al río. A pocos metros de la colina donde vimos los fuegos artificiales. Todos tomamos un puñado de las cenizas con temor, malas emociones y dolor.

Lucas, Mel, Uma, Vanessa, Lionis y Amanda las esparcen por la hierba y por una esquina del puente.
Mi madre, mi padre, el padre de Amandine, Mercedes y yo lanzamos el resto de las cenizas al mar.

Así fue su vida. Siempre dejando el refugio de la tierra para adentrarse al mar, al agua. Caía en las tentaciones de su pasión una y mil veces. No se daba por vencida hasta que algo le afectaba y era totalmente dependiente de que alguien la sacara.

Y esa fue... su autodestrucción.

¡Por Amandine!

Autodestrucción / Acuafobia [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora