xliii. the farewell

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CAPÍTULO 43
La despedida

 CAPÍTULO 43 La despedida

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Maratón 3/5

Vieron a Lupin, Ron y Pettigrew saliendo con dificultad del agujero de las raíces. Luego salió Hermione, seguida por Hydra y Sadie que hablaban. Sadie sintió vergüenza al recordar que realmente estaba pensando en Ron. Luego Snape, inconsciente, flotando. A continuación iban Harry y Black. Todos echaron a andar hacia el castillo. El corazón de Sadie comenzaba a latir muy fuerte. Levantó la vista al cielo. De un momento a otro pasaría la nube y la luna quedaría al descubierto...

—Harry...Sadie —musitó Hermione, como si adivinara lo que pensaban—, tenemos que quedarnos aquí. No nos deben ver. No podemos hacer nada.

—¿Y vamos a consentir que Pettigrew vuelva a escaparse? —dijo Harry en voz baja.

—¿Y cómo esperas encontrar una rata en la oscuridad? —le atajó Hermione—. No podemos hacer nada. Si hemos regresado es sólo para ayudar a Sirius. ¡No debes hacer nada más!

—Está bien.

La luna salió de detrás de la nube. Vieron las pequeñas siluetas detenerse en medio del césped. Luego las vieron moverse.

—¡Ahí está Remus! —susurró Sadie con pena, mirando a su padrino—. Se está transformando.

—¡Sadie! —dijo Harry de repente—. ¡Hermione! ¡Tenemos que hacer algo!

—No podemos. Te lo estoy diciendo todo el tiempo.

—¡No hablo de intervenir! ¡Es que Lupin se va a adentrar en el bosque y vendrá hacia aquí!

Hermione ahogó un grito.

—¡Rápido! —gimió, apresurándose a desatar a Buckbeak—. ¡Rápido! ¿Dónde vamos? ¿Dónde nos ocultamos? ¡Los dementores llegarán de un momento a otro!

—¡Volvamos a la cabaña de Hagrid! —dijo Harry—. Ahora está vacía. ¡Vamos!

Corrieron todo lo aprisa que pudieron. Buckbeak iba detrás de ellos a medio galope. Oyeron aullar al hombre lobo a sus espaldas.
Vieron la cabaña. Harry derrapó al llegar a la puerta. La abrió de un tirón y dejó pasar a Hermione, a Sadie y a Buckbeak, que entraron como un rayo. Harry entró detrás de ellos y echó el cerrojo. Fang, el perro jabalinero, ladró muy fuerte.

—¡Silencio, Fang, somos nosotros! —dijo Hermione, avanzando rápidamente hacia él y acariciándole las orejas para que callara—. ¡Nos hemos salvado por poco!
—dijo a Harry y a Sadie.

—Sí...

—Demonios— susurró Sadie—, solo tomé como cuatro fotos.

—¡Sadie, no es momento!

SADIE SHEPHERD Y EL PRISIONERO DE AZKABAN [3]  ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora