capitulo 3

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Shippo abrió sus ojos, escucho el cantar de las aves, vio a su alrededor, aún seguía cerca del lago, recordó a la chica y la busco con desesperación, hasta que la vio, sentada en una roca viendo hacia el lago.

-ahhhh ya te despertaste-dijo Ahome volteando-como dormiste?-le pregunto sonriendo-.

-Bien-contesto-¿y tú?-le pregunto-.

-pues….casi no dormí-le dijo dándose la vuelta-solo dormí 2 horas-le dijo-.

-¿Entonces¿Si lo viste?-le pregunto sorprendido-¡de verdad lo viste!-.

Ahome volteo a ver al pequeño que tenía una cara muy ilusionada, suspiro para dar su respuesta.

-No, no lo ví-le dijo mintiendo-me mantuve gran parte de la noche pero no vi nada-dijo volteándose de nuevo-.

-¿que?-dijo aún sin creerlo-pero…si-pero cayó, no sabía que decir, era posible que una leyenda así y que muchos de la aldea juraron verlo, no existiera?-.

-¿volvemos Shippo?-le pregunto poniéndose de pie-van, vámonos-.

El pequeño solo se levanto y camino regreso al pueblo seguido por Ahome, que solo se limito a voltear a ver al lago y luego levanto su mano derecha y vio la rosa blanca, que seguía iluminada por un extraño rocío.

-"Para mi eres verdad pero para todos eres mentira"-pensó-"ojala, te vuelva a ver"-.

Ahome estaba ya en el pueblo, estaba en la casa de la anciana con la que se había encontrado cuando llego.

-Y…¿que encontraste?-le pregunto mientras se sentaba con una taza de té en las manos-Shippo me dijo que no habías visto nada-.

-Y es cierto-le contesto-no vi nada-dijo tomando un sorbo de su té-.

-mmm…chica, no me mientas, sé que anoche apareció, además, puedo ver que mientes, tus ojos lo dicen-le dijo con tranquilidad-.

-Pero, señora, no lo ví!-le dijo algo nerviosa-no pude mantenerme despierta-.

-¿Te llamas Ahome cierto?-le dijo-pues mira, estoy segura que ayer apareció el chico, y que te vio, y que tu lo viste-.

-Cómo puede estar tan segura!-le dijo Ahome algo ya enojada y nerviosa-.

-La luna ayer estuvo más brillante de lo normal, y tenia un brillo rosáceo-le contesto-has de recordar este párrafo de la leyenda-.

Y en las noches que haya luna llena

Será por que el niño este de buenas

Ahome se quedó callada, en una parte la canción tenía algo de razón pero en otra no.

-usted dijo que tuvo un color rosáceo-le dijo-y en el párrafo dice que en las noches de luna llena, así que no le encuentro…-.

-¡Ahome!-dijo la anciana interrumpiéndola-sabes muy bien que él existe, sé que lo viste, no me puedes mentir a mí, tengo años observando a las personas que van al Fuji para verlo y solo algunas traen ese brillo de victoria en sus ojos-le dijo-y tu eres una de ellas-finalizó-.

Solo agacho al cabeza en forma de derrota, no podía guardar el secreto, esa anciana sabía reconocer a la gente que lo había visto, además¿para que guardar un secreto si ya lo descubrieron?

-Esta bien¿que quiere que le diga?-pregunto resignada-.

-Solo quiero saber¿que le hiciste?-le pregunto con la mirada puesta en ella-.

-¡NADA!-contesto al instante-¡no le hice nada!-.

-¿segura?-le pregunto dudosa-¿realmente segura?-.

HIJO DE LA LUNA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora