Lugares Oscuros

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- ¿Que quieres que haga que?, pffft...¡JAJAJA!,lo siento pero yo no soy una puta, ni un mercenario soy un: Legionario y yo lucho por mi mismo, por nadie más.-Max estaba indignado, ¿Quienes se creían ellos para tratarle así?, los sujetos tras las sombras se quedaron callados por un momento, pensando que decirle. - Escucha Max, solo tienes que ir y ayudarles no es nada del otro mundo, no es que seas un mercenario, pero sería de gran ayuda que... - Max les interrumpió, levantándose y golpeando con sus manos la mesa. - Ya te dije que no, no te ayudaré solo lucho por mi mismo, por nadie más. - Las personas ocultas en la oscuridad se quedaron calladas, susurraron entre ellos para saber que podrían hacer ante Max, el no era tan fácil de convencer como Alicia. - Mira Max, te tenemos una propuesta, te dejaremos a cargo de un grupo de hombres, cerca de 50 o 60,podras hacer lo que quieras con ellos, lo único que pedimos es que les enseñes tus métodos, que sean fuertes, poderosos a cambio, nosotros te brindaremos una forma de regresar a la Legión, en una ruta donde incluso podrás encontrar oponentes fuertes y con ello más accesorios a tu armadura. - Max dudo un momento ante ello, a decir verdad... No estaba seguro de querer regresar a la Legión, se sentía bien incluso feliz de poder estar con Alicia, disfrutaba de su presencia pero... El honor, la gloria y el papel que desarrollaba en la Legión le costaron años... No podía negarse ante tal oportunidad. - Bien, quiero ya ese mapa ahora mismo o no tendrán nada. -
- Tras unos segundos de espera, Max recibió el mapa y salió de la habitación, afuera estaba AT, recargada en la pared. - ¿Y bien?.
- Pues...si, tenias razón... ¿Cómo fue que lo descubriste?. - Max se cruzó de brazos mientras ella se apartó de la pared llevando su mano hacia su mentón pensativa.
- Carlos me lo dijo, no fue difícil hacer que hablara... Además de que alcance a darle una hojeada a sus archivos. - Maximilian analizó por un momento la situación, cobraba más sentido conforme unían los hilos. - Entonces... Dices que puede ser una trampa... ¿Cómo me dijiste que se llaman estos tipos?. - Max miro a AT, quien pensó por un momento, pero luego recordó sus nombres. - ¿Los gusanos y las águilas?.
- Si, ellos vaya nombres... Pero si se identifican así, ¿que le vamos a hacer?, ahora entiendo por qué Alicia y Carlos fueron juntos... Debemos mantenernos en silencio si ellos saben, que nosotros bueno... Sabemos sobre sus planes podríamos tener problemas, lo mejor será mantenernos en silencio y continuar.
- Me parece bien, hay que largarnos de aquí. - AT se dio la vuelta y comenzaron a caminar tenían cosas que hacer...

Al pasar un tiempo AT y Max estaban listos para partir, todo estaba preparado, no habían visto a Alicia y Carlos, tal vez estaban ocupados, Max quería despedirse pero no sentía que era la mejor opción... Tal vez era mejor solo irse en silencio, sin despedidas. - ¿Estas preparada?. - Preguntó el Centurión quien no estaba muy contento de que AT le acompañará.
- Si, vámonos ya... ¿te vas a despedir o algo?. - AT apretó las correas del casco-cráneo que llevaba puesto a la par que acomodaba su cabello. - No... No es de tu interés, solo hay que largarnos. - Respondió Max, inquieto
- Deberías dejarle una carta aunque sea... Al menos para que no se, no se sienta tan mal.
- ¿Por qué te importa tanto?. - Preguntó Max, molesto de que ella le insistiera tanto con eso.
- Solo creo... Que al menos deberías de darle una explicación o algo... Ya sabes, tu y ella pues... Tienen una relación muy cercana.
- Bien... Bien, ¡Bien!, lo haré si con eso dejas de molestar... Iré por un papiro y un lápiz y lo haré. - Maximilian acompañado de AT fueron hasta un cuarto repleto de instrumentos médicos y científicos o como Max solía llamarlos "Objetos para idiotas", y no era para menos pues Max al ser un Legionario, estaba en contra de todo artilugio médico o científico. - Bien, mira: "Alicia me debo ir a un lugar alejado, adiós".Listo, ¿eso te tiene satisfecha?.

AT suspiro, si que era un idiota y de los buenos tal vez necesitaba algo de ayuda para hacerlo era necio, pero detrás de toda esa imagen de sujeto duro estaba (o al menos eso creía ella), un chico torpe y confundido sobre lo que sentía por lo que, le prestaría un poco de ayuda. - Dejame ayudarte con eso... Será mejor si lo hago yo, no eres muy listo a decir verdad... Mira solo,escribire algunas cosas por aquí, otras por allá y... - Después de un rato la carta estaba lista, AT tomó otro pedazo de papel y lo dobló hasta formar un sobre y con cuidado metió la carta en el sobre entregándosela a Max. - Ahora solo debes de entregarla,anda ve.

¡Por la República no pises al!... ¿César? (Reeditando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora