¡Por la República no pises al!... ¿César? (Reeditando)

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Después de esa noche en la cabaña, de todas esas revelaciones y sentimientos encontrados, era momento de partir. Alicia iba enfrente, caminaba observando el paisaje le gustaba este tipo de caminatas. Caminar y observar era algo que ella disfrutaba mucho. 

El silencio era acogedor, AT no se había atrevido a hablarle después de... Bueno lo que pasó. Sentía mucha vergüenza sobre eso y no quería hablar sobre eso. Alicia, por otro lado fantaseaba con la venganza que tomaría contra Marie, pensaba y pensaba en cómo le mataría. Definitivamente no sería rápido, se daría gusto con eso, su venganza seria dulce, tan dulce que incluso había pensado cada mínimo detalle.

Alicia y AT caminaron por un buen rato en silencio, hasta que AT le sacó de sus pensamientos. Su voz tímida hizo que Alicia voltearse a verle. —Alicia... Hay un poblado por allá, tal vez encontremos un poco mas de provisiones. —Laa últimas palabras las balbuceo intentaba concentrarse pero no le era posible. —Si, habría que ir... Me gustaría además comprar un poco de equipo. —La Ranger asintió y le pidió a AT indicarle el lugar. 

Ambas caminaron hacia el poblado, era un asentamiento corriente, había un banco de trabajo y un par de personas haciendo actividades comunes, tales como cultivar o dormir. —Alicia se acercó a uno de ellos, preguntando si tenían algo para comerciar o fabricar. Por suerte si había alguien con quien comerciar asi que Alicia fue con esa persona, mientras AT se quedaba a esperarle observando en silencio. AT observaba su alrededor, curiosa comenzó a merodear   el lugar era... Curioso hecho de lámina y basura esta gente vivía en la miseria... Mientras tanto, ella tomaba nota sobre lo que le parecía interesante o curioso. Estaba totalmente perdida en su mundo, anotando y haciendo dibujos sobre aquello que le llamaba la atención, hasta que alguien tocó su hombro, haciendo no solo que saliese de sus pensamientos, si no que, de paso le asusto. —¡Ah!. — Chilló, tras el repentino toque y volteo a ver quien le había tocado y asustado.

Al darse la vuelta molesta, vio a Alicia quien estaba con una pequeña sonrísa. —¿Te asuste?, lo siento mucho. —Dice entre risas, parecía que estaban listas para partir. —Antes de irnos, estos sujetos necesitaba ayuda, ¿me quieres ayudar?. —AT la observó, era la primera vez que la veía sonreír. La sonrísa de Alicia era cálida era extraña verla sonreír después de tantos días viéndola comportarse tan... Extraño. —Yo... Claro, si... ¿Que necesitas?. — dijo casi susurrando. —Solo tenemos que matar a un par de tipos malos ¿sabes?, hace poco secuestraron a los hijos de los lugareños, están en eds fabrica abandonada de allá. —respondió Alicia, señalando una pequeña maquiladora al norte desgastada por el tiempo. —Vale... —Dijo AT, algo no le gustaba de todo esto. —Bueno, vamos. —Dijo caminando junto a ella, tomándola de la espalda y avanzando. —No te pongas nerviosa contra los saqueadores, a ellos les gusta dar miedo pero en cuanto les das dos o tres balazos se ponen sumisos. Yo te cubro, el lugar es pequeño así que no tendrás problemas en encontrar a los rehenes. — (¿Encontrar?), pensó AT.
— ¿A qué te refieres?.
Alicia no respondió, pues estaban cerca del sitio. —Escucha, estas son balas perforadoras del calibre .44, son para ti te serán de utilidad. —Entrega a Asenat las balas, para después limpiar con un paño y agua la mirilla de su rifle. —Yo te cubrí desde aqui, entra por los ductos de ventilación, de ahí solo busca a su líder lo llaman "Rizos" no me dijeron por que pero seguro lo sabrás. — Alicia le miró a los ojos y tomó su mano, para después darle un abrazo. — Y... Por favor... ¿Ten cuidado quieres?, solo... Cuidate de verdad, intentaré matar a todos los que se te intenten acercar. —Después de un abrazo de varios segundos Alicia se fue. AT llevó su mano hacia su pecho, sintiendo como su pulso se aceleraba, sentía su rostro arder y un indescriptible sentimiento de felicidad le invadió. Asenat suspiro, apretó los ojos y avanzó hacia la vieja fábrica, cuidando de no ser descubierta. Avanzó, dudando de si debía matar a las personas a su alrededor a la lejanía, observó el ducto. Camino hasta el y cuando estuvo s punto de entrar escucho un Ruido seco tras de si. — Pero que... —Se dio la vuelta, observando a uno de los saqueadores frente a ella, muerto. Tenía un cuchillo seguro estaba a punto de matarle pero Alicia se interpuso. Asenat suspiro y se metió, eran perfectos para alguien como ella...especialmente por su estatura.

Tras avanzar un poco de detuvo a pensar: ¿cómo fue que la convenció para hacer esto?,  sólo necesito de... Ese cálido y cariñoso abrazo y de ver su... Su linda sonrisa y... Y... Asenat se coloro de nuevo al pensar en ella, aun no entiende esos sentimientos y cada vez eran mucho más fuertes. Sin embargo sentía vergüenza y tenía miedo de decirle algo. ¿Tal vez por ser rechazada?, ¿o simplemente era pena?. Asenat trató de olvidar lo que sentía y continuó avanzando, hasta encontrar una rejilla, misma que tomó y levantó para poder bajar. Ya en el suelo desenfundo su revolver... No se sentía cómoda con querer matar, así que respetaría sus ideales sin importar que.

Camino hasta una puerta cercana y antes de poder abrirla,unas manos se posaron en su boca y nariz, con un paño entre ellas, Asenat se retorcio en un intento de escapar sin embargo, las fuerzas poco a poco abandonaron su cuerpo y AT, quedó desmayada...