Algunos minutos después del incidente... Fuyuki...
Okita, Okita Soji es su nombre, aturdida, se reincorporó una vez más. Tenía su rostro y cuerpo adoloridos, analizó la situación, lo recordó: ese sirviente de cabello blanco la había golpeado tan duro que apenas pudo moverse durante algunos minutos. Intentó enfocar su atención y entender qué es lo que había pasado ahora.
Okita sintió algo sobre su piel, observó: había una gota de agua. Se suponía que estaban en invierno y, sin embargo, había una ligera lluvia, como si el cielo estuviera triste.
Se levantó, intentando acercarse a su maestro aún con su lento paso. Él fue lo primero en entrar en su campo de visión. Mientras más cerca estaba, entendió mejor todo: uno de los arqueros estaba herido y tenía un agujero en el estómago. Rider Medusa también estaba en el mismo estado, pero, sobre todo, dos humanas estaban tras ellos en una deplorable condición, estaban malditas. Uno de los Archer tenía el brazo ensangrentado y se dirigía hacia esas mujeres. Las identificó: se trataba de dos conocidas del maestro, una de ellas, Thosaka Rin, una mentora que lo guió durante algún tiempo, y también, Matou Sakura, la mujer a la que su maestro llamaba Madre.
Pronto llegó, se quedó detrás de su maestro, quien apenas reaccionó. Okita, ayuda a Nameless y Rider, mencionó. Su tono era monótono y frío. Se dio cuenta de que en el campo no había rastros de Mashu Kirielight y Fujimaru Ritsuka.
Shirou, dijo su maestro mientras se acercaba al otro Archer. Nameless estaba apoyado contra un pedazo de tierra, intentando llegar donde su maestro. Así que tú eres la que constantemente nos vigilaba. Qué agradable sorpresa, Okita Soji, mencionó sarcásticamente. Siguió moviéndose a pesar del agujero en el abdomen, que se veía del otro lado. No te muevas, Archer. Puedo curar momentáneamente la herida, pero si sigues moviéndote, entonces se volverá aún más grave. El otro Archer puede ayudar a la señora Thosaka. Descansa, o tu maestro también sufrirá. Archer bajó la cabeza y se sentó en el suelo, observó a Rider a un par de metros, que estaba inconsciente. Pensó en lo ridículo que era al ser capaz de soportar tal herida. No pudo moverse más al sentarse. Para empezar, Rin corre peligro, al igual que Sakura. Si sigo presente en este mundo, entonces moriré. No era un mal trato, pero, primero, ayuda a Rider, está peor que yo. Gran parte del impacto cayó sobre Emiya Shirou, probablemente sus huesos estaban fracturados y su brazo derecho estaba poco más que entero, pero todavía estaba mejor que él. Rápidamente trató a Rider, básicamente solo era cauterizar la herida. No había más que hacer. Pronto Rider despertó y, entendiendo la situación, volvió a su forma espiritual.
Tendría que hacer lo mismo con Rin; en ese estado, si seguía aquí, pondría en peligro su vida. Luego de cauterizar la herida, Archer volvió a su forma espiritual mientras veía que Emiya Shirou tenía algo brillante en sus manos.
Okita se dirigió hacia su maestro y escuchó: Shirou, puedo traer a Avalon, mencionó con algo de dureza mientras veía a las mujeres delante suyo. Para Shirou, sacar a Avalon de su interior en este momento ya era difícil; sus heridas le impedían varias cosas. No, si ese Avalon sale, entonces resonará con el mío y tal vez se conviertan en uno, o estallen si las cosas van mal. Shirou extrajo la vaina de Excalibur desde su propia alma; no había tiempo, esto era lo único que podía hacer ahora. Sus manos brillaron, y ambas de un color distinto: una era brillante y cálida, mientras la otra era oscura y fría. Dos vainas, ambas eran la misma; su naturaleza era similar, y además, era el único tesoro que impediría que la maldición de Goetia siguiera avanzando.
Las vainas aparecieron en sus manos. Shirou sintió como si algo le faltara desde su interior, lo ignoró. Las vainas flotaron sobre sus palmas y empezaron a emitir energía al acercarse a los cuerpos de Rin y Sakura, los colocó sobre ellas. Pronto empezaron a desaparecer; se fundieron con sus almas y el maleficio sobre sus cuerpos retrocedió, manteniéndose al límite.
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Fate: Fragments of a Broken Sword
RandomEl destino jugó con el una y otra vez, el infierno una y otra vez, salvado una y otra vez, luchado por sus ideales una y otra vez, perder todo una y otra vez, matanza tras matanza, batalla tras batalla, traicionado por sus propios ideales, traicionó...