Nuevamente Assasin veía a alguien conocido, recuperar tus memoria era extraño e incluso incómodo, entonces ver a alguien que debería de estar muerto era muy raro.
Assasin se habia puesto a pensar en la manera en cómo estas personas obtenían sus recuerdos, podría ser la memoria intrínseca que conecta esta singularidad con la línea de tiempo original, tal vez simplemente podria ser capricho de esa mujer, en esta singularidad o realidad, aparentemente Kiritsugu Emiya había muerto, sin embargo el ya lo estaba desde mucho antes, incluso antes de unirse al Einzbern otra vez, por lo que probablemente la frágil línea que divide este mundo con el otro se habia fracturado para filtrar las memorias mientras devolvía su identidad o viejo nombre como la máquina llamada Kiritsugu Emiya, dando así la posibilidad de existir más que como un simple sirviente, aunque eso se había mezclado con los orígenes de "EMIYA", observó meticulosamente y habían algunas diferencias con su yo pasado, habían más que cambios en su fuerza y poder al lograr alcanzar el estado de espíritu heroico, había obtenido lo que se dice vulgarmente "Canon heroico", si su actual aspecto exótico de cabello blanco y piel morena, claro, además de sus ojos de color rojo sangre eran cosas muy llamativas entre muchas personas, entonces el propio cambio de su cuerpo para cumplir su trabajo fue algo extraño, era como ser un mocoso en crecimiento, afortunadamente era algo instantáneo, pero fue molesto acostumbrarse al cambio de altura que tenía su cuerpo.
Necesitaba ser discreto para ser un Assassin, pero tener una talla similar a la de Archer o Saber Emiya era algo extraño, podría ser el efecto secundario de llevar su cuerpo a otro nivel al usar demasiado sus habilidades y también el hacerse llamar EMIYA en un lugar con tantos EMIYA, desde siempre podía contar con un mármol de realidad para manipular su propio tiempo, pero el acceso total a su mármol de realidad era otra cosa; un mundo cubierto de ruinas en su totalidad, un lugar repleto de armas de fuego, era como un campo de guerra que fue bañado con un mar de sangre, con el cielo ilumidado por el paso del ocaso y las llamas que se extendían hasta horizonte, era como ver el propio infierno, aún así era la representación perfecta de su alma, su vida y también el final que obtuvo.
Eso fue sorprendente, lo admitía, inicialmente buscó el acceso total a su mármol de realidad para obtener mejor control del tiempo, esa fue la única manera de obtener un control absoluto para Time Alter y extender sus capacidades hasta su límite más lejano.
Pero esperaba un páramo frío o un lugar desértico, esperaba un campo de llamas y muerte, mientras en la lejanía veía la isla de su infancia, pero fue entonces cuando se dio cuenta de que el lugar estaba repleto por armas de fuego, cubierto de sangre, escombros y fuego, representaba el lugar donde su vida acabó y perdió sentido hasta morir bajo la Luna al lado de Shirou.
Era un sentimiento amargo, al parecer convertirse en un guardián era lo que le faltaba para materializar su mármol de realidad en el mundo, eso significaba que su cabeza estaba jodida.
Kiritsugu... Dijo ella, con miedo, aterrorizada ante lo que tenía delante suyo, una vez más veía una fuerza desconocida que estaba mucho más allá de cualquier límite meramente humano y mortal, más fuerte que cualquier ajecutor o apóstol que había conocido, sin embargo silencioso, invisible, sin honor y sin embargo aún más fuerte que cualquier recuerdo suyo, una niebla de cenizas y prana ingresó por sus sentidos, un olor muy familiar a pólvora y tabaco, una niebla densa que acabaría contigo tan solo con respirar cerca de ella, el humo negro de un proyectil asesino que atravezaria tu cabeza sin dudarlo en menos de un segundo, no era una masa bestial como sintió alguna vez, tampoco era terrorífico como un monstruo enloquecido y fuerte a niveles completamente insanos, este era aterrador por que también olía a sangre, el olor de alguien que había tomado la vida de miles, alguien que luchó y acabó con la vida de cosas que nadie nunca se podría imaginar, cosas que nadie debería de ver, cosas que natie tenía por qué conocer...
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Fate: Fragments of a Broken Sword
RandomEl destino jugó con el una y otra vez, el infierno una y otra vez, salvado una y otra vez, luchado por sus ideales una y otra vez, perder todo una y otra vez, matanza tras matanza, batalla tras batalla, traicionado por sus propios ideales, traicionó...