Tren hacia Fuyuki...
Al atardecer...
Un día nublado...Un tranvía bastante clásico, los ruidosos sonidos del metal sobre metal y la creciente vibración del vehículo mientras avanzaba. Eran bastante inusuales en estos días la mayoría de ciudades tenían extraordinarios transportes que recorrían miles de millas en sólo horas, pero, el lugar al que se dirigía era bastante inusual, a pesar de ser una ciudad con un flujo turístico moderado, infraestructura moderna, e incluso un aeropuerto, le faltaba equipamiento terrestre.
Fuyuki. Una ciudad alejada, rodeada por montañas y el mar que la protegían, el clima era bastante agradable en sí, con golpes de estación moderados y definidos, de amplia producción agrícola y pesquera, era un buen lugar para vivir, pero, por que la gente huía de allí?
La urbe se caracterizaba por estar bastamente rodeada por manciones de estilo clásico japonesas al igual que manciones Europeas, lo interesante era la belleza de las construcciones, lo fresco que se veían en verano, lo colorido de la primavera, la calidez de otoño y la magia que tenían en invierno.
Era uno de los principales atractivos por lo que la ciudad era visitada, sin embargo la ciudad tenía heridas que a nadie le gustaba recordar, el primero hace 12 años, la herida más grande y catastrófica, un incendio de proporciones exorbitantes que consumió y quito la vida de muchos, del que muy pocos habían escapado.
Fue a raíz de esto, la razón por la que muchos curiosos visitaban la ciudad, fue en principal motivo por el que Fuyuki se convirtió en un punto atractivo para los fanáticos religiosos y también para los investigadores paranormales.
Fuyuki siempre fue un punto misterioso, sucesos extranormales y extraños acontecimientos o luces entre las montañas o explosiónes de pilares de fuego, fueron la otra razón para visitarla.
Pero exactamente desde hace 12 años la ciudad se había convertido en un punto peligroso para la gente, no eran problemas de delincuencia o algo parecido, de hecho se podía dejar las cosas en un lugar y volver horas después y dicho objeto aún seguiría allí, lo que atemoriza a sus residentes eran las extrañas desapariciones de gente a la cual nunca más se la volvía a ver y también los asesinatos de los cuales jamás aparecía un culpable, eran escenarios bizarros en los cuales se apreciaban cuerpos perfectamente cortados o incluso quemados y congelados.
Sus habitantes ya hacía un tiempo que estaban huyendo del lugar, argumentando de que no querían terminar desapareciendo para siempre o muertos. Luego de él incidente del incendio y los extraños asesinatos y desapariciones, se sumó algo más, hace dos años empezaron rumores de criaturas oscuras y extrañas, personas con armadura que se podían ver en lugares aleatorios de la ciudad, extrañas explosiónes y explosiones de luz y fuego asustaron aún más a la población local, mayormente durante las noches.
Fuyuki tenía una demografía bastante numerosa y sólo fue gracias a eso que la desaparición, muerte o huida de muchos no pareció notarse, últimamente los sucesos extraños de hace dos años volvían a ocurrir, el tiempo de paz se había acabado al parecer y el infierno amenazaba en caer nuevamente a la ciudad de Fuyuki, los muertos crecían una vez más al igual que las desapariciones y también los extraños rumores de hombres con armaduras o los gritos sin explicación en la tierra.
En medio de los bagones del tren vacío como lo era siempre, los ruidos de metal y metal se oían dentro, una joven de bello rostro como el de una muñeca, de aspecto delicado, cubierto con el traje azul oscuro y blanco de religiosa, quedando en las rodillas, con medias negras y zapatos marrones, de cabello blanco como la nieve, hojos redondos y grandes con un pequeño lunar al costado de sus finos labios rozados.
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Fate: Fragments of a Broken Sword
RandomEl destino jugó con el una y otra vez, el infierno una y otra vez, salvado una y otra vez, luchado por sus ideales una y otra vez, perder todo una y otra vez, matanza tras matanza, batalla tras batalla, traicionado por sus propios ideales, traicionó...