-¡Su majestad!...¡su majestad!...por favor despierte... - tiene demasiada fiebre. Lo muevo un poco y hay sangre. No... ¿Cómo es que paso esto? Necesito ayuda - ¡Belmont! ¡Belmont! – en su lugar aparece Annette, tiene una cara de horror – por favor llama a Belmont...
Sale corriendo. Como puedo logro acomodarlo en mi regazo. Respira con dificultad, busco un pañuelo y limpio la sangre. En eso aparece Belmont. Le explico la situación, entonces lo lleva en sus hombros hasta su habitación, al parecer llamaron la médico real. Lo deja en la cama. Él me pide dejarlos un momento para cambiarlo de ropa. Mis manos tienen sangre... Luka aparece después con una cara de preocupación
-¿Qué paso? ¿Por qué tienes sangre? – mi vestido estaba lleno de la sangre del emperador
-No es mía...cuando...cuando fui a verlo...él tosió sangre... - miraba mis manos, ¿Por qué?
-Cálmate Marinette... - me toma por los hombros – Adrien ¿está enfermo? – asiento – ese idiota – riñe – no te preocupes, ve a cambiarte, no puedes recibir al médico así
Fui a mi habitación Annette me seguía de cerca. Me dio un vestido limpio. Me lavé las manos en el baño y fui a la habitación del emperador. Cuando entre Belmont estaba en la ventana, al verme se inclinó. El emperador tiene mucha fiebre y está pálido, no me gusta esto. Su expresión muestra dolor. Mi corazón... ¿Qué es esto? En eso entra Luka con el médico real. Nos pide que los dejemos solos para hacerle su chequeo.
Voy con Luka a la sala del segundo piso, mientras Belmont se queda en la puerta. No me gusto la cara del médico, siento una opresión en el pecho. Me llevo las manos a la cara, se veía bien... entonces ¿Cómo de un momento a otro él...? Luka me abraza
-No te preocupes, el médico está con él, estoy seguro de que se pondrá bien
-¿Qué clase de emperatriz soy? Ni siquiera me di cuenta de que estaba enfermo...
-Oye... - pasa uno de sus dedos por mis mejillas – no es tu culpa, así que no llores, yo me voy a quedar a tu lado... - en estos momentos es reconfortante tenerlo aquí, cerca de mí.
Esperamos un rato hasta que el médico hizo acto de presencia, su cara no me gustaba para nada. Se que son malas noticias
-Nunca...había visto un cuadro de gripe como este. Trate con todos los medicamentos disponibles, pero ninguno logra bajar su fiebre, creo que debo hablar con alguno de mis superiores para que me diga si hay otro remedio en los límites del reino
-¿Qué se puede hacer?
-Creo que por el momento agua fría y toallas, eso ayudara al menos para que pase la noche. Vendré mañana temprano a revisarlo. Tenga fe su alteza
Annette lo acompaño a la salida. Yo fui corriendo hasta su habitación, varias de las chicas estaban poniendo toallas en su frente. Les dije que se fueran, yo lo haría. Hicieron una reverencia y desaparecieron. Respiraba con dificultad, puse una toalla en su frente, se removió incómodo. Luka me observa.
-Siempre ha sido así desde que era un niño...todo lo tiene que cargar por el mismo... idiota... - Luka se veía molesto y preocupado – será mejor que me vaya... tú lo estas cuidando ahora...
-Luka...tengo miedo... ¿Qué tal si no soy lo suficientemente apta para ser la emperatriz? Solo mira como termino y ni siquiera me di cuenta. Perdí la memoria y no sé nada de esta persona. Solo me centre en mi... ¿Cómo voy a sacar todo esto adelante?
-Escucha Marinette... esto no es tu culpa. Adrien siempre ha sido de las personas que les gusta cargar solos con los problemas. Quizá no quería incomodarte, pero aun así resulto en esto. Eres fuerte e independiente, solo fueron unos meses, pero lograste mucho así que no pienses así – esas palabras me reconfortaron – si tienes miedo yo estaré contigo
ESTÁS LEYENDO
ME CONVERTÍ EN SU ESPOSA
Hayran KurguMarinette Dupain Cheng princesa del reino de Norman es obligada a casarse con el emperador del reino vecino Adrien Agreste por un error. Aunque a los ojos de todo el mundo son una pareja normal la verdad es que ella es muy infeliz ¿podrá dejar de l...