Sangre

3._Presentacion

Ahi estaba de nuevo. En la cama de su hermana,arrancándole poderosos y exagerados gemidos,que rebotaban en las paredes de la casa. Otra vez caía entre esas piernas húmedas y calientes que se cerraban en su espalda,mientras esa boca le pedía, entre suspiros,que le dijera que la amaba y que sólo era suyo. Whiss se lo dijo y se lo diría las veces que su hermana se lo pidiera. Seguiría las instrucciones como la primera vez. Tenia él trece años cuando Vados llego a su habitación, una noche de tormenta. Esa jornada mientras acariciaba y penetraba a su hermana, evoco esa primera vez.

No era raro que ella se fuera a dormir con él,cuando eran niños.Vados se acostaba a su espalda y comenzaba a hacerle caricias suaves que lo relajaban. Pero desde los once años la mano de su hermana,se metia bajo su camisa de dormir y sus pantalones, tocando aquello que había entre sus piernas. Al principio eso lo asustaba,
pero era Vados,su hermana,la que lo cuidaba siempre. Ella no podría hacerle nada malo. Sin embargo, eso no le gustaba. Tampoco le agradaba que ella se desvistiera en su presencia y lo hiciera tocar sus pechos. Paulatinamente fue normalizando aquello y esa noche, cuando ella se acostó junto a él,todo fue tan fácil. Pero no pudo evitar sentir una suerte de estremecimiento y no tenia que ver con el gusto o el placer. Fue algo diferente. Algo que se sostuvo por un tiempo. Una incomodidad que opacaba todo lo bueno de esas intimas experiencias.

La noche de bodas con Margaret fue muy diferente. También hubo allí una primera vez,pero él tenia experiencia en la cama. Ella no. Margaret fue pura hasta esa noche. Quiza fue ese contraste lo que lo conmovió o fue esa mirada de tímido anhelo en su esposa. No estaba seguro,pero algo sucedió.

Se casaron para el cumpleaños de Margaret. Fue una ceremonia hermosa,pero sus hermanos estuvieron ausentes. Ninguno fue a ver esa farsa. Para ellos,hace tiempo, no era un secreto su relación con Vados. Ella tampoco asistió.Los días previos a la boda su humor era insoportable. Ardía en celos. Decía que lo mataría si tocaba a Margaret, pero eran sólo amenazas. Whiss tomó a su esposa la noche de bodas y lo seguiría haciendo hasta que quedara embarazada. Margaret estaba muy enferma. Un parto,con toda certeza, la mataría. Con algo de suerte también moriría el bebe y sino lo hacía lo cuidaría. Usaría de excusa al niño para no volver a casarse y todo seguiría,más o menos,como siempre.

-¿Estas pensando en ella?-le preguntó Vados, cuando notó lo distraído que estaba.

-No-respondió Whiss y ceso en sus embestidas para mirar a su hermana, que lo empujo a un lado tirandolo en la cama.

-Eres un mentiroso. Seguro que te cautivo con esa carita de ángel que tiene y desde luego su pureza. Porque estoy segura que ella era virgen-le dijo mientras se cubría con las sabanas y hacia un gesto infantil de reproche.

Whiss no respondió y después de limpiarse,comenzó a vestirse para volver a casa de su padre. Vados entristeció su mirada. Hace tiempo que sentía a Whiss lejano. Su cuerpo estaba con ella,pero no sus pensamientos.

Los años que Whiss sirvió al ejercito le dieron una perspectiva del mundo algo apática. Los hombres,la humanidad,era cruel e inmoral. Sus compañeros violaban a las mueres e hijas de sus enemigos,como un acto de superioridad y desprecio. Se diría que nadie podría disfrutar de presenciar actos como una violación, pero Whiss vio a su superior ultrajar una mujer y a sus compañeros hacer un circulo para burlarse de ella,que suplicaba piedad en medio de golpes despiadados. Porque primero estaba la humillación y después la corrupción. No conformes con abusar de la mujer la orinaron y la quemaron viva. Hicieron lo mismo con sus hijos. A los hombres los mutilaban. Les cortaban un brazo o una pierna dejándolos vivos, pero inútiles. Fueron tantas las veces que Whiss presenció lo peor del ser humano, que concluyo que la humanidad era repulsiva. Que los hombres eran el azote de su ellos mismos. Que la virtud no era más que la hipocresía de la sociedad. "Si quieren actuar como animales asi los voy a tratar" Eso les dijo su padre y posiblemente eso mismo dijo dios al contemplar su creación. Así como su padre,el creador se rendio y los abando. Whiss se sentía solo y perdido. Pero entre los brazos de su hermana... Ahí no había bien o mal.Ahi sólo hacia lo que se le decía obteniendo a cambio un placebo a su miseria. Mientras volvía a casa pensaba y contrastaba esa perdida de control en la cama de su hermana,con el control que él tenia en la suya.