4- Estilo Jiang

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Notas de la autora:

Fire v2.0 en el sentido de que esta historia sigue generando capítulos en contra de mi voluntad. Bueno, veré a dónde conduce.

***

Cuando Lan Xichen se despertó, se sintió... más ligero. Al menos, eso fue, hasta que intentó moverse. Cada músculo de su cuerpo protestó y él gimió en queja junto con él. Mientras se enderezaba, volvió a gemir. Sus miembros se sentían rígidos, pesados ​​y lentos para responder.

Solo cuando logró moverse para sentarse en el borde de la cama se dio cuenta de que había dormido sin soñar y que la luz que entraba por la ventana era la de la madrugada. Se sintió bien descansado por primera vez en mucho tiempo, lo cual era sorprendente dada la relativamente corta noche que había tenido.

Se masajeó los muslos un poco antes de ponerse de pie. Por primera vez desde que Jiang Cheng colgó la campana, Lan Xichen la alcanzó para hacerla sonar. Un pequeño golpe de Energía le hizo retirar la mano por reflejo. Se miró el dedo índice, luego la campana, y finalmente se dio cuenta de que Jiang Cheng la había tocado en múltiples ocasiones.

El hecho de que el propio Jiang Cheng hubiera estado accionando la campana con su Energía, manteniendo a raya la peor de las pesadillas, hizo llorar a Lan Xichen. Era ridículo que esta pequeña cosa, después de todo lo que Jiang Cheng ya había hecho por él, hiciera llorar a Lan Xichen.

Enjugándose los ojos y sollozando un poco, volvió su atención hacia adentro. Su núcleo todavía se agitaba constantemente, circulando qi a través de sus canales. Esperó por el ahora conocido sentimiento de disgusto, pero no se encendió. Durante un largo rato, simplemente se quedó allí, confundido por la falta de disgusto consigo mismo, antes de darse cuenta de lo estúpido que estaba siendo. Volviendo a mirar la campana, contempló agregarle su propia Energía, pero la idea de usarla de nuevo, aparte de simplemente dejarla estar, todavía lo llenaba de inquietud, aunque no la reacción completamente negativa a la que estaba acostumbrado. Decidió no presionar su buen humor.

Sabiendo que probablemente dolería como el infierno, pero apretando los dientes de todos modos, caminó hasta el centro de su habitación y comenzó una serie de ejercicios de calentamiento para que la sangre fluyera por sus músculos rígidos. Luego se estiró. Aunque no hizo nada contra la fatiga general de su cuerpo, al menos disminuyó algo de la rigidez y el dolor. No soportaba pensar en lo mal que se habría sentido sin el baño de hierbas de la noche anterior. Probablemente todos y cada uno de los músculos se hubieran contraído por completo.

Parpadeó y se dio cuenta de que la bañera ya no estaba en su habitación. ¿Realmente estaba tan desmayado que se las habían arreglado para quitársla sin que él se diera cuenta?

Suspirando y decidiendo que realmente no importaba, se movió de nuevo a la cama y al cofre al lado para vestirse adecuadamente.

Con la forma en que había gritado la noche anterior, todo Lotus Pier seguramente debió haberlo escuchado, si ni al menos algunos de los habitantes del pueblo que vivían cerca. El sonido se transmite por el agua, después de todo. Era una idea vergonzosa y solo las palabras de Jiang Cheng de "recuerda que ellos saben" evitaron que Lan Xichen simplemente se metiera en la cama y se escondiera nuevamente.

Para cuando se vistió y se sentó detrás de la mesa, sintió que toda la energía con la que se había despertado se le había agotado. Lo confundió. Esos ejercicios de calentamiento no podían contar como un ejercicio, incluso con sus extremidades en protesta, entonces, ¿qué había hecho para volverse tan somnoliento?

Se preparó un poco de té, pero terminó medio dormido mientras se empapaba. Sólo cuando sonó un golpe en su puerta, salió de su siesta, su té estando más allá del punto de ser bebible.

La Tranquilidad del AguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora