I Can't Let Back Our Pack! (¡No puedo dejar nuestra manada!) || 2 TEMPORADA

Capítulo 13

Atención ⚠️

- Alfa Wolff, espero que encuentre la estadía...cómoda.

Se mofó.

Adam había cambiado drásticamente durante esos cinco años. Su cabello castaño oscuro estaba mucho más largo, tanto que lo tenía recogido en un moño alto. Se había dejado crecer una barba increíblemente espesa, y además, su masa muscular había aumentado considerablemente. Más no superaba la de Noah y Alexander.

- Debí imaginarme que no te quedarías de brazos cruzados -admitió el castaño claro.

El hombre bufó. Sin embargo, parecía más divertido con la situación que molesto.

- Sigues siendo todo un bocón, ¿no Noah? -le pinchó, cruzándose de brazos y apoyándose contra el marco de la puerta.
- Y tú el mismo don nadie, renegado de la vida -apuntó con mordaz sarcasmo.

El gesto del ex-miembro Blackwood se endureció.

- No hablaría tanto en tu estado, degenerado -apuntó.
- Cómo te atreves a hablarle de esa manera a mi Alfa, grandísimo ca... -y no pudo terminar de decir Lex, pues un golpe surcó su rostro.

Noah gruñó en protesta, al igual que lo hizo Lex por el golpe.

- No eres tan rudo cuando estás atado, ¿eh, Alexander? -acotó el de cabellos largos.

Uno de los muchos Alfas que se encontraba en la reducida estancia, había sido el responsable del golpe.

Noah supo que lo mejor sería evitar que su muy bocazas Ejecutor saliese más lastimado de lo debido.

- Tú problema es conmigo, Adam -afirmó- Deja a Alexander en paz.

Adam solo pudo echarse a reír sutilmente, mientras se encogía de hombros.

- Tú no entiendes -aseguró- Mi problema no es con ninguno de los dos.

Le restó importancia.

- No, tú maldito problema siempre ha sido el que envidiaras a Brook por ser mucho mejor Alfa de lo que tú nunca serías -soltó Lex, escupiendo la sangre que se había acumulado en su boca.
- Alexander, cállate -murmuró Noah entre dientes.

Las facciones de Adam se contrajeron, provocando que el mismo le asestara otro golpe .

- Cállate -advirtió.

Y Lex simplemente le gruñó de vuelta.

- Para quién trabajas Adam -dijo Noah con sus dientes sumamente apretados por la ira.

No quería que le hiciese más daño a un miembro de su familia.

El hombre se volvió hacia él.

- No trabajo para nadie -aseguró- Trabajo con ellos. Nosotros somos la voz de la razón contra todas esas estúpidas leyes que se han ido firmado dentro de las diferentes manadas.... Luchamos  por un cambio dentro del Consejo... Un cambio que debió hacerse hace mucho. Un cambio para que todos abran los ojos de una buena vez.