Capítulo 6

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ATENCIÓN: ⚠️

*Realmente aconsejó la lectura con la canción, te dará una mejor experiencia. 😉👌✨




- ... la verdad es.... tuvimos que escapar de allí, señor.



Los dos adultos presentes en la habitación abrieron muchísimo los ojos. ¿De qué carajos estaba hablando ese niño?



- ¿Escapar? -pregunta el Alfa claramente desconcertado.
- Señor -habla muy suave, casi en un susurro suplicante- Nos están persiguiendo unos hombres... No sé qué es lo que quieren, ni qué están buscando; lo único que sé es que estaba en casa con mis padres y de repente irrumpen a la fuerza y... ellos... ellos... -mira a su hermana con auténtico desconsuelo- Ya no están señor, ya no estarán nunca más.



Sus ojos a punto de derramar algunas lágrimas,  su labio inferior siendo atrapado por sus dientes y su estado conmocionado; le dieron los suficientes indicios para entender lo que había intentado decir. Se habían quedado solos, sin nadie que los protegiese.



Con un nudo en la garganta miró a su Beta, que lucía igual de entristecido que él. Suspiró sonoramente.



- ¿Tampoco hay más familiares? -intento ser razonable.
- No señor, ni uno solo que conozcamos.
- Entiendo -volvió a suspirar- Y qué hay del Alfa de tu manada.
- Señor, no me malinterprete, pero créame que si he venido hasta aquí es claramente porque sabía que ni allí estaríamos a salvo. Lo más probable es que supusiesen que iríamos ante el Alfa de nuestra manada primero, y allí nos hubiesen dado caza... Por eso consideré como mejor opción ir a un territorio más lejano.

»En primera instancia quería ir al territorio Whitefang, pero he de admitir que me perdí en el trayecto y terminé aquí ... En territorio Greylake por lo que escuché decir de sus hombres, señor.


- Tiene sentido -admitió el hombre- Así que considerando lo que me estás comentando, supondré que lo que deseas es que os de protección a ti y a tu hermana, ¿o me equivoco?
- No señor, en absoluto.


El Alfa miró del muchacho a la niña, la cual permanecía completamente quietecita, sentada en el regazo de su hermano, abrazándolo por el cuello, pero mirando fijamente a sus ojos. Su vista volvió a subir hasta su Beta, el cual había susurrado un "pobres criaturas".



Asintió. Y cuando se proponía a darles su aceptación en palabras un fuerte ruido como de explosión sacudió toda la instancia, provocando que todos en la habitación se tensaran.



- ¿Qué demonios ha sido eso? -exteriorizó su descontento.



El Beta tomó su walkie preguntando por el otro lado de la línea qué era lo que estaba ocurriendo.


"Jefe -escucharon del otro lado a alguien toser- Han entrado una personas a la casa. Ahora mismo estamos en código de alerta máxima"



- ¿Qué demonios quieres decir con eso? -el Beta frunció su ceño y utilizó una voz realmente amenazante. Lógicamente ya sabía a lo que se refería.




"Acaban de entrar por la fuerza, Jefe -respondieron del otro lado- El Líder y usted tendrán que evacuar, mientras nosotros contendremos a los intrusos- y seguidamente se escuchó una serie de disparos antes de cortar."





- ¡Diosa! -vieron al muchacho tensarse en su lugar, hasta casi derramar nuevamente lágrimas- Nos han encontrado. Están aquí.



La cara de auténtico terror del niño hizo que ambos hombres vibrasen con furia acumulándose en su interior. El Beta observó a su Alfa, y mantuvieron una conversación a través de sus miradas conectadas. El Alfa fue el primero en hablar mientras se dirigía hacia un cuarto secreto detrás de la pequeña biblioteca a espaldas de Matt.




I Can't Let Back Our Pack! (¡No puedo dejar nuestra manada!) || 2 TEMPORADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora