Caricias Fingidas © [#1]✔️

Capítulo 55

La puerta se abre de golpe logrando que me sobresalte y miro asustada la puerta del baño.

Me tapó con mis brazos mi cuerpo en un fail intento de cubrirme cuando observó los rizos de yanina (La doctora) entrar y mirarme.

---¿Ya terminaste?--- pregunta y asiento terminada de lavar mi cabello. ---Ten, secate y colocate esto por favor--- habla y me tira una toalla miniatura.

Me seco rapidamente y mi piel se eriza al sentir la brisa fresca chocar contra mi piel desnuda.

Observó lo que me dio y frunzo el ceño.

---¿Que es esto?--- preguntó.

--- No preguntes, sólo colocatelo--- habla y no dejo de mirar la prenda.

Es... rara, es como un body armado, con muchas lentejuelas de brillantes, realmente lindo pero puedo darme cuenta con que intenciones se utiliza esto aquí.

--- No voy a usar esto --- digo devolviendoselo ---Es repugnante y me moriría de frío---

Ella rueda los ojos.

---¿No te parece que no estás en condiciones de reclamar nada? Si estas aquí en contra tu voluntad es porque en este lugar a nadie le importa lo que piensas y quieres, ahora, deja de hacerme perder el tiempo y pontelo--- dice de mala gana.

¡Maldita!

---Puedes quedarte esperando tranquila, que no me lo pondré--- habló, ni loca uso eso.

¿Qué se piensa que soy?

Aprieta su mandíbula llenándose de paciencia y se acerca a mi de forma amenazadora, pero no me intimida en lo más mínimo.

Las mujeres en este lugar me dan risa, creen que son superiores por maltratar a su mismo género pero lo único que dan es pena porque de alguna manera ella están igual que nosotras, cautivadas, presas, secuestradas y ella para no pasarla tan mal como nosotras deciden ser sumisas.

Pero yo no, no soy sumisa ni de mi propia sombra.

--- Mira niña, no tengo paciencia y si no quieres que venga otra persona por ti, que seguramente será peor te recomiendo que te calles y me hagas caso--- habla y trago saliva.

Tiene un punto, si ella llama a alguien más me obligarán a colocarmelo a puñetazos, no quiero golpes otra vez.

Enojada me lo colocó y siento como este se adhiere a mi cuerpo apretandolo, ella hace que me voltee y me lo acomoda logrando que mis pechos resalte y mi cintura parezca más pequeña.

---¿Por qué debo ponerme esta mierda?--- murmuró mientras me sube el cierre.

---Porque será tu nuevo uniforme de trabajó---

¿Qué? Espera un momento, no, no.

Me separó de ella de golpe y la miro.

--- No pienso ser una puta, ni loca--- habló.

---Yo sólo recibo órdenes y las cumplo, ese es mi trabajo entonces deja que lo cumpla--- trata de darme vuelta nuevamente pero son más rápida y agarró su brazo con fuerza.

--- Me importa una mierda, no voy a ser otra de esas pobres chicas --- aprieto el agarre mirándola con firmeza y ella me mantiene la mirada saltándose de golpe.

--- Eso lo hablas con tu papi y a mi me dejas en paz morocha--- habla.

---Quiero verlo--- mencionó---Traelo, quiero verlo--- ella niega.

--- No es posible, date la vuelta y...

---¡Quiero verlo!--- gritó y ella suspira dejandome en paz y sale del baño.