Parte 6

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Ducado Shinmon.

Castillo de Asakusa.

Ala oeste del castillo.

Domingo.

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Eran las siete de la mañana, el sol ya estaba presente en el día, cuando las doncellas entraron a la recámara principal del ala oeste. Vieron a su señora sentada en el gran ventanal con vistas hacia el bosque, estaba muy quieta, nadie podía saber que era lo que le pasaba, pues no se podía ver su rostro.

Ayaka quien también era nueva junto las otras doncellas, al hablar un poco con _________ Shinmon le agarró un poco de cariño a aquella nueva señora de sociedad. Un poco preocupada por ella fue hasta donde _________ pues, aunque habían entrado y hecho un poco de ruido, no las había mirado.

—Mi señora... ¿está usted bien? — dijo Ayaka acercándose a poner su mano en los hombros de la recién casada.

-Claro que si Ayaka- dije no apartando la mirada del ventanal- ya es hora de prepararme ¿no?

Ayaka asintió y me levante, me dirigí al baño mientras las demás me seguían y cuando al final todo estuvo listo algunas salieron a preparar la ropa de hoy, joyas, aceites, perfumes, zapatos mientras Ayaka me asistía en el baño, como el día anterior se repitió lo mismo en cierto momento le pedí que saliera del baño para poder lavarme la cara y limpiar la máscara.

Ya eran un poco más de las ocho y media cuando finalmente ___________ ya estaba lista. Estaba deslumbrante, el vestido hacía que su piel reluciera, el cabello era mitad recogido y suelto, pequeños mechones en onda caían sobre su máscara haciéndola dar una impresión más cautivadora, aunque también indagadora, las joyas que portaba no eran tan llamativas, pero eran muy hermosas para hacerla resaltar. En otras palabras, una mujer deslumbrante.

Justo en el momento que ya todo estaba listo, y las doncellas procedían a arreglar la habitación, tocaron a la puerta. _________ que estaba sentada en el tocador cerca de la puerta se dirigió a abrir la puerta, Ayaka miraba sorprendida su señora que, aunque no estuviera acostumbrada ahora era la esposa de un duque y tenía que apegarse a ciertas reglas, entre ella no abrir por abrir la puerta de su habitación. Era Konro.

-Buenos días señora- dijo esbozando una gentil sonrisa.

-Buenos días ¿señor...? - dije alegremente, aunque un poco apenada por no saber su nombre.

-Konro, Konro Sagamiya señora- hizo una leve reverencia, luego recupero su postura inicial- soy la mano derecha de Waka.

-¿Waka?

-¡Oh disculpe! Usted no estará familiarizada con ese término- dijo un poco apegado- así es como le decimos a Benimaru.

-¡Oh! Está bien- en estos momentos apareció Ayaka en el umbral de la puerta- ¿Qué ha pasado? ¿Qué necesita de mí?

-Venia para indicarle ciertas ubicaciones del castillo, dado a que sus doncellas no tienen más de una semana en el castillo me imagino que no sabrán tanto como aquellos quienes llevamos años en él.

-Me parece bien, entonces... ¿ya nos vamos?

-Por favor señora ______ sígame.

Konro hizo un ademán para la siguiera y ________ lo siguió sin dudar, Ayaka fue detrás de la señora y como las demás ya observaron que tiene cierto favoritismo de parte de la dueña del ala oeste, Ayaka les ordenó que para cuando la señora volviera quería el baño y el dormitorio limpio.

~ La Segunda Esposa ~ Benimaru X Lectora ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora