Parte 7

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Ducado Shinmon.

Castillo de Asakusa.

Ala oeste.

Domingo.

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Todos en el castillo ya habían desayunado y habían vuelto a sus labores. Los sirvientes a atender el castillos y necesidades de sus amos o de los superiores.

Annaisha y las gemelas se fueron juntas a la habitación de la mayor a pasar la tarde, en cambio Benimaru y Konro se fueron al despacho del joven para seguir analizando unos informes que habían llegado.

_________ se encontraba sentada en el pequeño columpio rústico que estaba en el viejo árbol de su patio personal. Miraba al bosque con alegría y disfrutaba de las voces de los pájaros que, aunque estaban lejanas aún eran hermosas.

Ya había pasado unas dos horas desde el desayuno cuando _______ recibió visita.

Su suegro.

Hibachi Shinmon.

-Espero que mi presencia no te incomode.

-Para nada padre, ¿Qué necesita usted de mí?

-¿Por qué no mejor nos sentamos en la mesa del jardín?

-Lo que usted desee padre- dicho esto me pare, mi suegro me ofreció su brazo para caminar junto a el esta donde estaba una mesa para el disfrute de la vista en el jardín.

-¿De qué me quería hablar padre o para que soy necesaria?

-¿Por qué tu mascara _____? ¿Cuál es a razón?

Me sentí intimidada ante Hibachi, sabia que mi suegro no había ido con mal intención, pero sé que nadie podía negar su genio y de como voluntariamente e involuntariamente podía intimidar con voz y mirada. El estaba hablando claro, una razón eso es lo que él quería, pero...

-Padre yo...

Mientras tanto en otro lugar.

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Ala norte del castillo.

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Ya era las cinco de la tarde, Konro se había marchado a inspeccionar las tierras y todo estaba tranquilo en el despacho.

Pero el joven duque no podía dejar de pensar, en la conversación que había que tenido con Annaisha en el desayuno. No quería tratarla así, pero no le gustaba que se metería en la relación de el con la ahora la recién casada.

No podía ir de una vez a consumar el matrimonio así por así, pues no la conocía tanto como para tomarla y luego no verla, aún con Annaisha pasaron algunos meses hasta que se consumara su matrimonio, desde entonces no se volvieron a tocar más. Afortunadamente los dos habían estado de acuerdo en eso, pese aún las quejas de Hibachi con el tiempo el dejo de protestar, pues tomó a Annaisha como una hija.

Benimaru se sentía un poco incómodo que salió a caminar por el castillo. Recorrió el castillo, observó algunas cosas que debían ser cambiadas y la anotó mentalmente, paso por el ala este, pero no entró, al escuchar las risas de las gemelas y de su amiga las dejó en su mundo y siguió por su camino.

Finalmente, sus piernas lo llevaron al ala oeste, estaba muy tranquila, eso le extraño.

Hasta que escuchó un piano y se dirigió a la sala de música de dicha ala. Antes de llegar Benimaru vio a Ayaka que con un ademán le dijo que se marchara, y la doncella se fue sin más.

Vio la escena enigmática de _________ tocando dulcemente el piano, la luz del atardecer del sol la bañaba completamente, daba nostalgia la escena. Se quedó un poco hipnotizado, aún para su orgullo, aunque si le preguntaran diría que no cuando sería la respuesta que lo estaba completamente.

Él se sonrojo un poco.

________ seguía tocando el piano, no se daba cuenta de la presencia de su esposo, pues la mirada de Benimaru hacia su esposa era suave.

Ella empezó a cantar y él la escuchó.

Era una canción lírica.

Dime que el viento me ha mentido

Que se confundió con sus palabras

Dímelo ahora mientras aún estoy enamorada

Decía la niña

¡Oh mi dulce niña!

Ten cuidado del viento

No tiene cuidado en la dirección que sopla

Decían las estrellas

¡Oh mi dulce niña!

Mejor mira por ti misma el amor

No cierres tus oídos al mundo

Y estarás bien

Si tu amor no es mentira

Si su amor por ti se cumple

Si al final ustedes se aman

Bendeciré su amor

Decía la luna

¡Oh el amor!

Decía el pequeño fruto del amor

Deseo que el bien no acabe

¡Oh pequeño fruto del amor!

Así debe de ser la vida

Tiene que venir el bien y el mal

Sin embargo, disfruta el amor

Decía el destino.

Dio las últimas entonadas al piano y paró. Cuando ________ paró se dio cuenta de Benimaru mirándola mientras estaba recostado en el umbral de la puerta.

—Mi señor...— recién salió de su trance al escuchar su voz.

~ La Segunda Esposa ~ Benimaru X Lectora ~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora