Martina
Dos semanas más tarde...
Hago lo mismo que desde hace dos semanas, levantarme, desayunar e ir a ver si Mía despertó o no.
Hace una semana, la pasaron a una habitación normal pero sigue sin despertar.
Estoy sentada al lado suyo y observo al peluche gigante que se encuentra al lado mío, lo trajo Sebastián, eso me recuerda a como me costó hacerlo entender que no fue su culpa.Flashback
Estoy rescostada en el hombro de Gabriel, de repente alzo mi vista y veo a Sebastián, tiene unos cuantos moretones y un yeso en el brazo derecho.
Me acerco a él y lo abrazo, hace días que tuvo el alta médica y no quería entrar a ver a Mía, simplemente preguntaba cómo estaba y se quedaba sentado. Hoy está haciendo lo mismo así que decido enfrentarlo.-Ve a verla.
-No...
-¿Por qué no quieres verla?
-Siento... Culpa- toma un respiro y sigue- íbamos charlando y haciendo bromas, justo cuando me volteo para verla, nos estampa el auto... Lo último que vi fue su hermosa sonrisa. Fue mi culpa, me distraje unos segundos. Si no me hubiera girado a verla...
-No es tu culpa, ¿Está bien? Es culpa de ese maldito borracho que los atropello. Así que más te vale que entres y la veas- el asiente y a pasos lentos entra a la habitación.
Fin del Flashback
Gabriel ha sido mi mayor apoyo, ha estado conmigo cuando no quería salir del hospital y hasta me obligó a comer cuando se dio cuenta que no había comido en todo el día, Lucía ha venido a acompañarme varias veces también.
-Hija iré a comer algo a la cafetería, ¿quieres ir?
-No gracias, ma. Después nomás comeré.
Ella sale de la habitación y yo me dedico a peinar el cabello de Mía. Estoy tan concentrada en eso que cuando alguien agarra mí mano me sorprendo, poso mí vista y es Mía.
-Despertaste- me lanzó a ella y suelto un sollozo.
-Ya Tina... Ya estoy bien- dice en un susurro.
-Por un momento pensé que... No despertarías- ella acaricia mí mejilla.
-Nunca te abandonaría hermanita.
Nos quedamos abrazadas hasta que alguien entra, miro y es nuestra madre que corre a abrazarnos.
-Las amo, hijas- dice dándonos un beso en la frente a cada una- son mí vida.
-Tambien te amamos, ma- decimos al mismo tiempo.
Pasamos toda la tarde juntas, hasta que me pregunta por Gabriel.
-Se fue...
-¿Como que se fue?
-Si...- suspiro.
-¿Es broma no?- dice y mira a mamá quien niega.
-Tuvo que ir, era necesario.
-¿Pero a dónde fue?
-A Canadá.
-No tiene nada que hacer ahí. A ver explícame que ando muy pérdida y recién hoy volví a despertarme después de semanas.
-Si sabías que Gabriel toca en una banda- ella niega- tiene una banda con su mejor amigo, el toca la guitarra y Lucas canta, hace una semana lo llamo diciendo que consiguió en un bar para que participen. El no lo dudo es algo que lo apasiona y yo no iba a detenerlo, así que ese mismo día agarró el primer avión y se dirigió hacia allá.
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Probablemente ¿Amor?
Teen FictionMartina risueña, curiosa, un cero a la izquierda en los estudios. Gabriel serio, inteligente, sarcástico. ¿Qué pasará cuando ellos se reencuentren después cinco años?. Acompañame a esta historia llena de amor, amistad y corazones rotos.