Estaban apunto de terminar las prácticas, tres meses más, unos cuántos exámenes y serían libres. Fueron los mejores meses de su vida, aprendió una barbaridad y encima en la rama que más le gustaba, a la que pensaba dedicarse si las oportunidades de lo ofrecían, se integró con los compañeros, su jefa resultó ser un amor y una de las mejores abogadas de todo Texas, cuando en entraba en un juzgado, parecía una auténtica Femme Fatale y ella solo quería llegar a ser cómo esa mujer, solo su presencia ya llenaba toda la sala.
A Clarke le habían dicho que cuando terminara la carrera si estaba interesada podrían hacerle un contrato por medio año en el centro deportivo en el que estaba haciendo sus prácticas, las dos lo fliparon un poco, aquello no se lo esperaban, lo único malo es que era en Austin, y en principio trastocaba un poco sus planes, pero una vez dijeron que irían dónde primero estuviera el trabajo, no era la gran cosa, pero al menos una de las dos tenía por dónde empezar. Su novia se hizo un poco la dura, se la jugaba así, le gustaba el riesgo y les dijo que les diría algo, a ver cuánto aguantaba sin ir corriendo con boli en mano.
Aquel domingo salieron a correr, de Clarke había que tirar de vez en cuándo, iban a ir las cuatro, porque Raven era rara la vez que no se apuntaba a aparecer por allí aunque fuera un día, decía que iba a ir las cuatro porque Octavia se rajó en el último momento, le salió el plan alternativo de irse a tomar unas birras y Raven a provecho la situación, esa chic ano se cansaba nunca, era impermeable a las negativas y lo peor de todo era que su amiga ya ni siquiera se molestaba en decirle ninguna bordería, se había resignado a aquello y Clarke le decía "¿Estás preparada para cumplir con el trato?" Y eso le daba un poco igual, pero odiaba perder. Aunque seguía confiando en su amiga y en su heterosexualidad
Llegaron a la entrada del parque, había un autobús enorme de color naranja aparcado en la cera de enfrente, a ella se le encogió el estómago de golpe y se le aceleraron las pulsaciones, sobre todo cuando vio la cara de la rubia que también lo acababa de ver y lo miraba con el ceño fruncido. Estaba claro que la sociedad no evolucionaba lo suficiente y que se empeñaba no solo en anclase en el pasado si no parecía que les gustaba retroceder en él. Parecía un autobús de alguna campaña política. Había una silueta de una mujer y de un hombre como las que se podían ver en los lavabos públicos y un texto "Las niñas tienen vulva y los niños tienen pene, que no te engañen" Un mensaje de odio la hostia de evidente.
Clarke...
Venga, vamos a correr, este cuerpo no se mantiene así por nada
Su novia le sonrió de medio lado y echó a correr al interior del parque, odiaba cuando hacía eso, como si las cosas no le afectaran, al menos podría decirle a ella cómo se sentía por mucho que ya lo supiera, lo insultarían y se quedarían más tranquilas, pero no, Clarke sonreía y ella se aguantaba la rabia, ya no solo por ella por toda la gente a la que aquel odio podía afectar. Corrieron en silencio como una media hora y su novia terminó tirándose en el césped unos minutos después, su rubia favorita no le podía seguir el ritmo y ella retrocedió los metros que se había adelantado para tumbarse a su lado.
O respiro o me muero
Te concedo un descanso solo porque me das un poco de pena
No me importa, mientras consiga lo que quiero
Lo tienes muy fácil conmigo siempre - Se incorporó sobre ella y le metió la mano por debajo de la camiseta para acariciarla, la rubia enfoco sus ojos y acariciaba su verde con ellos - Clarke... puedo pincharle las ruedas o ponerle caca de perro en los asientos
¿Echas de menos ser una mafiosa? - Clarke le sonrió y ella asintió - No pierdas tiempo ni esfuerzo con eso
No lo hago, me divierte
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You are my everything (Clexa) (G!P)
FanfictionSe conocieron a los seis. Lexa entró en la vida de Clarke para quedarse y salvarla, Clarke siempre supo que Lexa era la mujer de su vida. Dos almas destinadas a encontrarse y cuidarse frente a cualquier adversidad.