En ese momento lo único que se me cruzó por mi cabeza fue "Mi mamá va a matarme".
¿Qué iba a hacer cuando se entere que me expulsaron? No podría ir a otro instituto a esta altura del año, tendría que esperar a que termine el semestre. ¿Y si me obliga a trabajar? Ya me imaginaba haciendo malabares en los semáforos mientras Emilio pasaba con un sombrero por las ventanillas de los autos para que nos den algunas monedas.
Mirándolo positivamente, a mi mamá le iba a dejar de caer bien Emilio cuando le dijera que él fue el causante de que me expulsaran, aunque no iba a servir de mucho cuando le dijera que fui yo la que le tiró la tiza en el ojo a mi profesora mientras estaba castigado.
- ¿Qué creen que están haciendo? -repitió la profesora acercándose a nosotros-
Lo miré a Emilio sin saber que decir, él me lanzó su típica mirada de "déjame a mi, yo lo arreglo" lo que me provocó más miedo. Luego de que Emilio le dijera a nuestro director que pretendía prostituirnos ya no confiaba mucho en sus habilidades de arreglar situaciones como esta.
- ¡Señorita Andrade! -la saludó Emilio con una sonrisa de oreja a oreja- esta muy elegante hoy.
- Marcos, sus encantos no sirven en mi, puede que sirvan en el joven Gress , pero no en mi.
Alcé las cejas sorprendido. ¿Mi profesora había dicho eso?
- ¡A mi no me provocan nada los encantos de Emilio! -exclamé más alto de lo que pretendía-
La profesora Andrade me miró sorprendido ante mi arrebato pero Emilio puso sus manos en mis hombros, cerrando los ojos.
- Joaquín, acuérdate de lo que me dijo mi doctor, no alces tu voz, alza tu espíritu.
Lo mire boquiabierto ¿De que diablos hablaba ahora?
- Pero si.. -Emilio me calló poniéndome un dedo sobre mis labios-
- Shhhh, respira -me susurró-
- ¡Estoy respirando! -le dije frunciendo el ceño-
- Basta ya -nos cortó la profesora- Quiero saber que esta pasando aquí ¡ahora!
Emilio me soltó y se acercó a la profesora para hablarle en voz baja.
- Estamos liberando nuestras energías negativas -le explicó Emilio-
¿Quéééééé?
La profesora Andrade apoyó sus manos en su cadera y lo miró entre cerrando los ojos, esperando a que Emilio siguiera hablando.
- Lo que pasa es que estoy aprendiendo Tarot -continuó él y pasó su brazo por mis hombros tirándome para que me acercara a ellos- y descubrí que Joaco esta muy tenso, lo que pasa es que es de Géminis, entonces es bastante complejo.
- Yo no soy..---
Emilio me interrumpió dándome un codazo. La profesora me lanzó una mirada de arriba abajo y luego miro a Emilio con el ceño fruncido.
Este es nuestro fin, nos va a matar.
- ¿Eres de Géminis? -preguntó la señorita Andrade-
Estuve a punto de decirle la verdad pero luego miré a Emilio, quien me incentivó a que le siga el juego así que asentí con la cabeza, la profesora sonrió.
- Verán.. es que yo también soy de Géminis.
Mi mirada voló hacia la de Emilio que tenía una sonrisa triunfante en el rostro. ¿Cómo diablos sabía que nuestra profesora era de Géminis?
-¡¿En serio!? -preguntó Emilio- Vaya, que coincidencia... espero no ser muy osado pero con mi conocimiento sobre Géminis tengo que asumir que seguramente usted también tiene problemas con el amor en esta época del año.

ESTÁS LEYENDO
¡ᴇsᴛᴏ ᴇs ɢᴜᴇʀʀᴀ! -εмιℓιαcσ- ✓✓
Fanfiction¡EEG! |Emiliaco. - No querrás que actuemos como pareja ¿cierto?.-preguntó el ojos miel horrorizado. Emilio se río. - ¿Estás loco? - ¿Quién sabe? tal vez y terminas enamorado de mí.