𝐓𝐎𝐃𝐎 𝐃𝐄 𝐓𝐈【𝐘𝐮𝐣𝐢 𝐈𝐭𝐚𝐝𝐨𝐫𝐢】

𝟐|| 𝐁𝐢𝐞𝐧𝐯𝐞𝐧𝐢𝐝𝐚

Era la primera vez que me encontraba en la estación Harajuku y mi primera experiencia en este lugar es horrible, esta repleta de personas, ya iba tarde al punto de reunión y la lentitud de la gente no ayudaba, tampoco mis maletas pesadas con sus pequeñas llantitas que se atoraban en la acera cada diez segundos.

Nanami me dijo que solo me llevará lo necesario, una indicación que lamento no haber tomado en cuenta.

Me paré unos instantes para ver el gps de mi celular. Ya estaba cerca, antes de que continuara con mi camino escuché una pelea de una chica con un hombre.

– No huyas, dímelo de frente– Observaba cómo le gritaba mientras lo tomaba del cuello de la camisa.

Gracias a su pequeño escándalo pude notar que el color de su uniforme era igual que el mío.

Entonces tú eres una de mis compañeras eh?

– Oigan por aquí– volteé para ver quién había hablado, era nada más y nada menos que Gojo Satoru. Pasan los años pero él sigue viéndose exactamente igual, aunque ahora lleva una clase de venda en los ojos.

Caminamos por unos minutos hasta que llegamos a los casilleros de la estación.

–Bueno preséntense– dijo Gojo rompiendo el silencio.

Inmediatamente un chico con el pelo rosado dio un paso y se presentó– Itadori Yuji.

Otro chico de pelo oscuro y pestañas más grandes que mis ganas de vivir habló– Megumi Fushiguro– después de eso solo se volteó indiferente a otro lado.

–Kugisaki Nobara– suspiró aburrida la chica a un lado mío. Bueno creo que ahora es mi turno.

–T/n Nanami, mucho gusto– dije con media sonrisa. Al instante sentí como alguien me miraba, volteé disimuladamente y vi cómo Yuji me analizaba en un punto específico de mi cuerpo.

¿Acaso lo notó? Rápidamente tomé mi cabello y lo posicione enfrente de mis orejas.

– wow T/n, cada año te pones más linda, te extrañe enana– Sentía como mis pies dejaban de tocar el piso y los brazos de Gojo me envolvían de la cintura.

– Apártate Satoru– Mis palabras no combinaban con mi acción ya que le correspondí con fuerza. Lo había extrañado tanto estos últimos meses.

– Alégrense de que se les sumaron 2 chicas al grupo– escuche a Nobara decir a mis otros dos compañeros con cierto aire de superioridad.

Después de los saludos y de varias peleas por cual lugar de Tokio visitaríamos Gojo escogió Roppongi.

Algo muy dentro de mí decía que no iríamos a un lugar turístico y estaba en lo correcto. Nos encontrábamos en frente de un edificio abandonado y al verlo se notaba la energía maldita de su alrededor.

–Entren– dijo nuestro ahora sensei.

– Pero sensei, no se supone que maldiciones combaten con otras maldiciones– Itadori miraba al edificio confundido.

– No idiota. Estos son principios básicos ¿cómo no lo vas a saber ?– Dios si fuera un concurso de la más peleonera, Nobara ya tendría ganado el primer lugar.

Jugaba con mi collar de lado a lado mientras que esos idiotas acabaran de hablar.

–¿¡Te comiste el dedo de sukuna!?– Pare de golpe, ¿acaso dijo sukuna? Mi compañera estaba quejándose del asco mientras yo miré a Itadori.

Encuentra a Sukuna; vino a mí la frase que se repite constantemente en mis sueños y uno que otros momentos de mi día a día. No podría ser coincidencia ¿o si?.

Inconscientemente me acerqué a él, y con uno de mis dedos toqué la cicatriz que tenía debajo del ojo.

– ¿Esto es de él verdad?– pregunte inspeccionándolo más de cerca. Este asintió por lo que me tomó por sorpresa,

¿Cómo rayos sabía yo eso?

Pequeñas risas sonaron a mi derecha.

– T/n, es tu primer día y ya estás buscando novio– No entendía las palabras de Satoru, hasta que me di cuenta. Estaba muy cerca de Yuji. Demasiado. A tal punto que nuestras narices estaban a nada de chocar. Al instante me aleje.

–Perdón Itadori– Como siempre mi curiosidad haciéndome ver como una tonta. Para mi suerte todos olvidaron rápido esa escena.

– Ok, considérenlo como una prueba de campo, maten a las maldiciones y ahorita nos vemos.– Dijo Satoru a mí y a los otros 2 estudiantes. En esta ocasión Megumi no iría ya que se había lastimado en una misión pasada.

Saque las dagas que se encontraban a los costados de mis piernas haciéndome recordar mi buena decisión.

Sabia que el uniforme podíamos hacerlo de acuerdo a nuestro gusto por lo que después de varias peleas con Satoru por teléfono se decidió que usaría un traje de cuerpo completo el cual se adaptaba muy bien a mis armas y cuerpo.

Además...no se me hacia una buena idea estar corriendo tras las maldiciones en falda.

Me puse en medio de mis dos compañeros y pude notar que no era la única con un arma , Yuji traía una clase de cuchillo demasiado raro en sus manos y Nobara un martillo.

No podía negar que estaba un poco nerviosa, pero es cosa del primer día no?

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Este capítulo es un poco corto pero los próximos empezarán a subir de intensidad :).

Nos vemos individuos que lloran por personajes 2D ✌🏽❤️.