Bárbaro [E #1]✔️

Profecía

Aruño mis piernas mientras trato de zafarme del agarre, pero es imposible y el que me cubran los ojos no ayuda. Duman hizo que sus hombres me ataran y cubrieran mis ojos y en ese momento el miedo corrió por mis venas en grandes cantidades, pero estando ahí, casi dos horas en la camioneta y en completo silencio de alguna manera me calmó. No me arrepiento de nada, pero sé que él no lo va a entender y no sé qué me hará, pero estoy dispuesta a soportarlo con tal de no tener la muerte de ese niño en mi conciencia.

—Duman —lo llamo, pero nadie contesta y estoy en completo silencio hasta que percibo una mano sobre mi pecho y mi cuerpo se tensa al tiempo que mi piel se eriza al sentir el cuero— ¿Qué harás? —susurro sintiendo como mi piel se eriza bajo su tacto.

—Накажи свою маленькую крысу —gruñe y jadeo cuando su mano baja por mi torso hasta cubrir mi sexo el cual responde empapándose.

‹‹Castigarte, pequeña rata››.

Muerdo mi labio cuando hace presión en mi zona y entierro mis uñas en mis muslos, él lame mi labio y me tenso cuando me abre las piernas al tiempo que su lengua recorre el valle de mis senos, mi corazón se desboca y termino gimiendo bajo cuando se apodera de mis labios, haciendo que su lengua acaricie la mía y que mis labios ardan ante su agresividad.

—No juegues conmigo —gruñe y asiento tratando de ver por debajo de la venda.

—No lo haré más —respondo y abofetea mi pecho.

—Sabes que buscare a ese niño —dice y mi cuerpo se pone alerta.

—No lo hagas... por favor —digo con dificultad y él mete sus dedos en mi boca, lamo el cuero y lo siento tensarse.

— ¿Qué me darás? —Pregunta y noto la perversión en su voz— ¿Qué me darás a cambio, pequeña rata? —agrega con algo de burla y respiro hondo.

—A mí —respondo con seguridad sabiendo bien que no es tanto el sacrificio.

—Ya te tengo hace mucho —suelta y sonrío, eso lo hace tensarse más.

—Eso crees —susurro con malicia y este pasa sus dedos mojados por mi cuello.

— Змея —masculla y sonrío con suficiencia.

‹‹Víbora››.

Unos minutos después siento como las camionetas se detienen y me bajan a las malas, el terreno por el que camino es irregular y mi corazón comienza a latir demasiado fuerte cuando recuerdo lo que me dijo Edik.

‹‹Los calabozos están rodeados de bosques, para llegar ahí se necesitan todo terreno, por lo general llevan ahí a las alimañas que tarde o temprano morirán››.

Siento que alguien me toma del brazo guiándome con cuidado mientras trato de no mostrar mi nerviosismo ya que sigo atada y con los ojos cubiertos. Sé que puedo morir, sé que acabo de cederle mi alma al diablo, pero si eso me quita una carga de encima, lo acepto. Minutos después escucho el murmullo del agua y miro a todos lados cuando el frio cubre mi cuerpo, se detienen y me giran y por lo que logro percibir, el rio o lo que sea eso, está tras de mí. Escucho unos pasos alejarse y temo que me dejan aquí, pero un alivio recorre mi cuerpo cuando siento unas manos rodeando mi cintura y de entre el olor a naturaleza, percibo el perfume de Duman.

— ¿Qué haces? —pregunto cuanto siento que desabrocha el corsé.

Un escalofrío me recorre la espala cuando el cuero roza mi piel y segundos después siento mis pechos al aire causando que mi respiración se torne irregular, relamo mis labios cuando la respiración de Duman se torna brusca y sus manos acarician mis pechos haciéndome gemir para después descender por este hasta llegar a la cinturilla de mi pantalón y con destreza lo baja y junto con este mis bragas. Lo escucho maldecir y segundos después me sobresalto cuando su mano cubre mi sexo el cual arde por su tacto, relamo mis labios y percibo como se aleja pero su mirada arde sobre mi piel.