Tarde En La Playa

1.8K 169 247
                                    

(Porque un buen anime siempre tiene un episodio en la playa o en una alberca)

—Mmmhhhh, si, se ve bien —dijo finalmente Palmer tras examinar un cristal color rojo carmín por aproximadamente un minuto, procediendo después a pagarlo y ponerlo en un bolso que cargaba consigo.

Ese día de sábado, Palmer había ido a comprar las cosas que necesitaría para regresar a Willow y Boscha a la normalidad al mercado, además de algunas otras cosas para otros hechizos, la acompañaban Luz y Amity, ya que necesitaban ropa nueva para su nuevo cuerpo conjunto, Boscha y Willow, que también querían ropa más cómoda (creo que a este punto, puedes ir deduciendo por donde va este asunto) y Edric, que la acompañaba por el simple hecho de ser buen novio.

—¿Por qué Porter no vino? —preguntó Boscha de brazos cruzados y molesta.

—Es un chico, los chicos no salen a comprar ropa —dijo Luz.

—Él está aquí —agregó Boscha señalando a Edric.

—Palmer no esta comprando ropa, y deberías ver como me pongo cuando Emira me hace acompañarla a comprar ropa, me arrastra por las escaleras para obligarme a pararme de mi cama para empezar —aseguró Edric.

—Ja, pero seguramente si te dijera que voy a comprar ropa interior o algún traje de baño aceptarías acompañarme —intervino Palmer divertida.

—Para que lo niego si es verdad.

—Jaja, eres un lujurioso Edric Blight —exclamó Palmer con una cara algo lasciva y completamente sonrojada, golpeando suavemente la cabeza de su novio (Nagatoro, sal de ahí, este no es tu anime).

—Esto es tan incómodo —susurró Luz a su compañera de cuerpo.

—Ven Ed, necesito que me ayudes con los colmillos de veneniardilla —dijo Palmer jalando del brazo a Edric para que la siguiera una vez que se calmaron (se besaron como por 30 segundos y los vendedores podían asegurar que si hubieran estado en privado, se hubieran desnudado).

—Bueno, podemos aprovechar para comprar ropa libremente, sin la presencia de los tortolos —comentó Amity señalando con su cabeza a su hermano y su novia —. Nos veremos aquí en una hora.

Las chicas se dirigieron a la sección de ropa. Luz y Amity buscaron prendas de mayor talla de las suyas, los vendedores ciertamente estaban impresionados, habían visto todo tipo de criaturas y brujos, pero nunca una chica de dos cabezas, pero ellas les aseguraban que no debían preocuparse, con que la ropa les quedara estaba bien, ellas se encargarían de hacer los arreglos necesarios. 

Willow y Boscha comenzaron a probarse varias prendas en búsqueda de algo que fuera cómodo para ellas en sus nuevos cuerpos, tanto camisas, faldas y suéteres fueron modelados en sus cuerpos, cada vez que encontraban algo que les agradaba lo compraban, esperaban (y más les valía) que la otra agradeciera que expandieran su guardarropa.

—¡Al fin, ropa cómoda! —exclamó Willow alegremente luciendo una sudadera color naranja que le había comprado a un vendedor por 15 caracoles.

Boscha realmente no había encontrado nada que le pareciera totalmente cómodo, así que todas las prendas que compró eran lo mejorcito que encontró.

—No sé si decir lo mismo, ya que esta ropa es un poco incomoda —se quejó Boscha mientras lucía un suéter verde olivo —. Pero creo... Entender el par de razones por las que tus padres te cuidan tanto —admitió Boscha dirigiendo su vista abajo, a sus pechos, bueno, los pechos de Willow. La lujuria le ganó en ese momento por lo que no pudo retener su pregunta —. ¿Puedo tocarlos?

—¡NO! —gritó Willow horrorizada, su cara se tornó roja de la vergüenza, ¿Cómo Boscha se atrevía a preguntarle algo así?

—Agh, de acuerdo —chilló la chica bajando su temperatura.

En el cuerpo de la casi-brujaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora