En el cuerpo de la casi-bruja

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El primer día de la tercera semana en el cuerpo de la casi bruja comenzaba, y un horrible zumbido sonaba en la cabeza de Boscha, obligándola a despertarse, dando un grito de terror al ver a una abeja gigante volando sobre su cara, dándole un rápido almohadazo. La abeja dio un par de vueltas en el aire antes de retomar el control de su vuelo y regresar a donde estaba Boscha.

—Agh, eres el taliamigo de Willow, ¿No es así? —preguntó al ver a la abeja descender a su regazo, la abeja agitó sus alas —. No creí que todo pudiera empeorar, dos semanas y no habías aparecido... ¿Y qué me cuentas? —la abeja terminó picando a Boscha en la cara, lo que la hizo gritar de dolor.

(Se que están pensando, "Ay Fernando, ¿Por qué te la pasas agregando cosas a la historia cuando estás ni siquiera estaban en un comienzo?". Y la respuesta es: Porque es mi pinche puta perra historia y agregare cuantas cosas se me de la gana conforme avance la serie)

—¡Asquerosa abeja! ¡No eres como Maya, ella es buena! ¡Tú eres un espantoso insecto! —se quejó Boscha mientras el taliamigo de Willow zumbaba enojado —. ¡Oh no, Maya! ¡Ha de estar sufriendo estando en manos de Willow!

Realmente era todo lo contrario, Willow se hallaba en el cuarto de Boscha tratando de sacarse al cangrejo de su nariz golpeándolo con una almohada.

—¡Debo asegurarme que esté bien! ¡Tú quédate aquí mientras yo me arreglo para salir! —dijo Boscha antes de salir disparada al baño a bañarse.

Clover solo observó molesto a Boscha, no sabía quien era esa chica pero en definitiva no era Willow.

—¡... Y todo solo va de mal en peor! —chilló Boscha, Fido solo la escuchaba algo desinteresado —. ¡Ya fui a una cita por Willow, tengo otra cita el viernes, me pelee con los padres de Willow y ahora su taliamigo me ataca! —enlistó observando a la ventana del cuarto de Willow, donde Clover le lanzaba una mala cara —. No sé que hacer.

—Muuuuu.

—Grrr, tienes razón, debo arreglar mis problemas con los padres de Willow prinero, pero solo si me toma menos de cinco minutos, debo asegurarme que Maya este bien —dijo entrando a la casa.

—Muuuu —mugió Fido, muy posiblemente el significado de ese mugido haya sido algo así como "Un placer ayudarte, loca".

Los padres de Willow estaban bajando del piso de arriba, posiblemente con dirección a la cocina para hacer el desayuno. Boscha respiró hondo y se acercó a ellos para disculparse por lo ocurrido dos días atrás, increíble las cosas que hacia por Park.

—Oh, calabacita, ya estás abajo —dijo Eliot sorprendido.

—Padres, yo... Quiero disculparme por lo ocurrido el lunes, no era mi intención explotar así y...

—No hija, nosotros somos los que nos deberíamos disculpar —esa respuesta impactó a Boscha completamente —. Tu padre y yo lo estuvimos hablando y, creemos que tienes razón, ya no eres una niña pequeña, has crecido tanto estos últimos años.

—Ya eres cada vez más independiente y creo que nos asustó la idea de perderte antes de tiempo.

«Aghh, es como las pláticas motivacionales de mis padres», pensó Boscha enjugando una lágrima, ciertamente las extrañaba.

—Estamos muy orgullosos de la bruja en la que te estás convirtiendo, y de ahora en adelante, trataremos de no ser tan sobreprotectores contigo —aseguró Iseul. Boscha no lo resistió más y comenzó a derramar lágrimas de nostalgia, era como hablar con sus padres, a los cuales realmente extrañaba.

—Ven aquí pequeña flor —invitó el matrimonio Park a su hija a un abrazo familiar, al cual Boscha llegó corriendo, uniéndose al abrazo que le daban los señores Park.