Peleas Y Revelaciones Doradas

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El castillo del emperador Belos era un lugar siempre muy ordenado aún cuando su gobernante faltaba, lo cual era el caso. Philip Wittebane, mejor conocido como Emperador Belos, había tenido que ausentarse por algunas semanas en compañía de Camila, la madre de Luz, en su búsqueda de estudiar los animales y plantas mágicas de las Islas Hirvientes como hacia en sus días de juventud en su antiguo trabajo como investigadora paranormal. Y así era como se estaba manejando justo ahora.

—¡JAJAJAJAJAJAJA! —se reían los guardias del castillo, inundando el comedor de estrepitosas risas, mientras todos miraban un video proyectado en una gran pantalla.

—Bueno, tenemos a este par de imbéciles, los cuales su única función en la vida es repetir lo que escuchan —dijo el youtuber del video mostrando dos peluches de un videojuego humano llamado Among Us.

—¡Este chico es hilarante! —dijo Steve sin poder contener su risa.

—¿De verdad estás segura que nos puede ayudar? Este lugar parece una cantina y se supone que está a cargo del "Mejor guardia del aquelarre del emperador" —dijo Boscha con tono burlesco y enojada.

—Lamentablemente, si —dijo Luz avanzando por las mesas del comedor, seguida de Willow, Boscha y Edric —. Lindo lugar el que tienes aquí, Callum.

—Oh, jajaja, Luz, estás aquí —exclamó Callum calmando su risa —. Por cierto, felicidades por sus dos días de novias, dime ¿Qué los trae por aquí?

—Necesitamos tu ayuda con un tema, algo complicado —dijo Luz nerviosamente.

—¿Puede esperar? Estamos viendo a Missasinfonia, es lo más gracioso que existe —dijo antes de volver a enfocar su atención al greñudo del video.

—¿No ya viste ese video? —preguntó Edric observando el video.

—Solo ocho veces.

—Apuesto a que Kikimora te dará una buena regañiza cuando vea todo esto —pensó Amity burlonamente.

—... Y gracias a esto, hemos llegado a la perfección al imitar a las ardillas. ¡Nueces! —gritó el youtuber vestido con un disfraz de ardilla a mitad del parque.

—¡JAJAJAJAJAJAJA! ¡Este tipo es lo mejor! —reía Kikimora sentada sobre algunos libros para poder ver bien sobre la mesa.

—O tal vez no —dijo Willow.

—Tú solo ven con nosotros —gruñó Boscha tomándolo de la nuca de la camisa, jalándolo, tirándolo de su asiento y arrastrándolo por el suelo hasta sacarlo de la cafetería del castillo.

—¡Oh wow, Willow, te estás portando algo ruda! —exclamó Callum levantándose del suelo —. Bien, ¿Qué es lo que necesitan? —preguntó molesto.

—Quiero que definas a Willow y Boscha con tus propias palabras —solicitó Luz.

—¿Frente a ellas?

—Sin miedo, tú solo hazlo, siéntete libre de expresar lo que quieras.

—Bueno, empecemos por Willow. Ella es una chica dulce y amable, si no estuviera enamorado de Emira seguramente sería a la que cortejaría. En cambio Boscha, es una idiota, narcisista y debería estar en alguna institución mental.

—Awww, gracias —habló Willow sonrojándose —Boscha la miró feo.

—Bueno, yo tampoco creo que estés muy cuerdo Callum —bramó Boscha enojada —. Dime, ¿Cómo te dieron tu puesto de guardia número uno? Apuesto a que no debe ser por alguna habilidad mágica realmente poderosa. Apuesto a que es solo porque eres hijo de la dama búho y el emperador te tenía mucha estima, seguramente su plan original era solo usarte para atraerla a sus garras y luego asesinarte junto con ella —sugirió Boscha.

En el cuerpo de la casi-brujaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora