El arte es esencial en la vida de Yamaguchi Tadashi, después de terminar la universidad con 23 años de edad, se dedicaría al arte y las esculturas.
Tsukishima Kei, estudiado en escritor, tratando de escribir una historia feliz y hermosa. Un final qu...
Las pecas que siempre quise ver, las contemplé en aquel momento cuando mire lo que tus ojos realmente transmitían.
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—No sabia que estarías aquí, Justo aquí en este lugar. —Dijo el chico con lentes.
—No sabes lo feliz que estoy, que estes aquí, y realmente nunca deje de pensar en ti. Cuando perdiste tu teléfono te intenté contactar por tus redes pero nunca contestaste. Incluso me hice una cuenta de fans, suena tonto lo sé pero tenía que hacerlo. Y lo más importante me leí tres de tus libros. —Hablo con rapidez sin separarse del chico. —Nunca deje de pensar en ti, pensé en ti cuando hice una de mis obras más conocidas.
—Lo se, esa obra "Luna juntos" crees que no notaría que la hiciste basada en la noche que nos despedimos. —Tsukishima lo había notado, esa obra iba dirigida a él, tan solo ver el paisaje de la obra lo supo.
[❄️✈️💎]
Tecleaba en su computadora portátil, escribiendo con su mayor sentimiento, el amor. El amor que sentía por el chico de pecas. Esas pecas estaban en su mente. Escribía "Una sombra que seguir" uno de sus libros mundialmente famosos. De los más famosos del mundo. La trama de una pareja. Un chico que se enamora de una chica sombra. Casi nadie sabe de ella, salvo de él, la chica termina siendo producto de imaginación y termina suicidándose. Escribía aún pensando en su chico.
Su chico de pecas, su pequeño departamento de Estados Unidos era acogedor para lo que él buscaba. Tenía la foto de Yamaguchi en el escritorio, la miro con una sonrisa triste. Pero una voz interrumpió.
— Y sigues escribiendo. —Dijo la voz de un chico, un poco mayor. Akiro.
—Si exactamente sigo escribiendo, y si no te molesta podrías ¿dejar de molestar? Tengo que entregar esto a la editorial para pasado mañana. —Hablo quitándose los lentes para dirigir su mirada a él.
—Te dije que había una exposición de arte hoy, además quiero ir, esta uno de mis artistas favoritos. —El era fan del arte le recordaba un poco a su chico. Cabello castaño y un azul en sus ojos. —Además de que creo que Kageyama y Hinata están de paseo en la ciudad a lo que escuche. Los jugadores de Volley. —Esos nombres recordó su antiguo equipo de Volley.
—Nunca había escuchado de ellos. —dijo Tsukishima negando a sus amigos de preparatoria. —No iré.
—Vamos deja un poco tu novela y vamos un rato para admirar el arte. —hablo Akiro.
Finalmente Tsukishima accedió a ir al Museo Metropolitano de Arte. Al entrar efectivamente estaba la exposición de arte, tantas esculturas y tantos cuadros. Ninguno había llamado su atención. Hasta que el organizador habló.
