Nada es lo que parece

Cap 15

Cuando Mew fue bajado en la habitación de Gulf no sabía que decir o cómo actuar, pero fue rápidamente empujado por Gulf hacia el baño, el menor tomo una bolsa pequeña y se la dio antes de cerrar la puerta del baño con el mayor dentro.

- ¡Prepárate! – grito Gulf desde afuera, Mew se quedó un momento sin saber qué hacer, al salir de su aturdimiento abrió el bolso que le había entregado el menor.

- Esto es.... ¿Lubricante? – en ese bolso el mayor encontró una botella de lubricante - ¿quiere que yo... me dilate solo? – pensó en voz alta Mew.

Mew no había experimentado tanto con su sexualidad como podría haber hecho, sentía que ser omega era una especie de maldición para él, no tenía ningún juguete sexual porque aunque había querido comprarlos se sentía avergonzado de hacerlo, se había masturbado antes, pero no metiendo sus dedos en él, cuando se masturbaba tomaba su pene y aunque sentía que algo faltaba no se atrevía a usar sus dedos.

El aroma de Gulf había logrado que se excitara, pero necesitaba una dilatación mayor para estar con Gulf y lo sabía, pero se sentía demasiado avergonzado de hacer eso, llevaba algunos minutos pensando en eso hasta que un gruñido lo saco de sus pensamientos; Gulf estaba afuera, noto que la puerta no tenía seguro pero no le preocupaba que el menor entrara, si lo metió ahí era porque no quería lastimarlo al tomarlo sin preparación.

Si Mew iba a ayudar al alfa que por sus gruñidos se estaba desesperando cada vez más tenía que hacerlo rápido

- Ya estoy aquí, entonces puedo darme una ducha rápida – el mayor continuaba hablando consigo mismo, se sacó la ropa rápido y mientras escuchaba los gruñidos se sentía más excitado, "él está así por mí", sentir que un alfa lo deseaba no era algo completamente nuevo, sabía que su aroma atraía a la mayoría de alfas, pero normalmente su físico los ahuyentaba, pero aunque el menor conocía perfectamente su cuerpo seguía necesitándolo, eso elevaba como nunca su autoestima.

Pensó que sería raro para el empezar a usar sus dedos mientras estaba bajo la ducha, pero en realidad fue bastante sencillo empezar a meterlos dentro de él, el lugar no ayudaba mucho ya que estaba básicamente doblado para poder alcanzar su entrada, pero cada gruñido de Gulf hacia que su cuerpo lo necesitara más, su lubricante natural empezó a fluir, iba a salir rápido cuando eso paso pero decidió dilatarse un poco más, ya conocía el tamaño del menor y sabía que una buena preparación era necesaria si no quería sentir solo dolor.

Cuando por fin término de prepararse recogió su ropa para ponérsela otra vez, pero los gruñidos que escuchaba de Gulf le dejaban claro que no le quitaría la ropa con delicadeza y era una de sus camisas favoritas, por ello solo tomo una toalla y la enredo en su cintura.

Al abrir la puerta Mew noto que Gulf sentado en la cama masturbándose con los ojos cerrados, no estaba seguro si tanto fluido era obra del menor o de la botella de lubricante que sostenía en la otra mano, tal vez un poco de ambos.

Cuando Gulf abrió los ojos, Mew sintió quedarse sin aliento; esa mirada que le dio el menor era de completa hambre; tal vez se asustó un poco, principalmente porque cuando el menor se levanto pudo ver la erección que este tenía.

Mew no pudo decir o hacer mucho, apenas pudo pensar cuando fue empujado a la cama, cayo boca abajo, luego las manos de Gulf en sus caderas haciendo que las levantara; el mayor estaba en cuatro, ni siquiera tuvo tiempo de sentirse avergonzado por su postura ya que una rápida embestida lo dejo sin aliento.

Mew mentiría si dijera que no le dolió, aun con la preparación y el lubricante que Gulf parecía haberse untado, sintió completamente lo rápido que fue abierto, además de eso el menor no le dio tiempo de acostumbrarse a la intrusión, las embestidas no se detuvieron ni fueron leves, Gulf golpeaba dentro de el con mucha fuerza; Mew sintió el pecho del menor pegarse a él, después el aliento de Gulf rozar su oreja.

- Lo siento – dijo Gulf.

Mew lo entendió, inmediatamente, el menor no podía detenerse, se disculpaba por eso, pero era innecesario porque aunque hubo dolor en un principio, ahora todo lo que sentía era placer, Gulf se clavaba en él, golpeaba su próstata con fuerza, solo se escuchaban gemidos, de tanto placer que el mayor sentía no pudo callar sus fuertes gemidos, no le importaba que con el ruido que el menor y él estaban haciendo todo el edificio podría estarlos escuchando.

Un fuerte orgasmo golpeo a Mew y que el menor no parara de darle placer al punto exacto que hacía ver fuegos artificiales hizo que fuera un orgasmo tan fuerte que se sintió desfallecer, pero el menor no le dio tiempo de descanso continuo hasta liberarse dentro de él.

El mayor sintió todo el semen con el que estaba siendo llenado, sonrió pensando lo bien que se sentiría el nudo del menor dentro de él para cerrar una noche perfecta, pero eso no paso, apenas unos segundos después noto que el pene de Gulf que continuaba dentro de él se estaba endureciendo nuevamente.

En algún punto Mew se desmayó, el menor era insaciable, no jugaron con poses diferentes, todo el tiempo Mew estuvo en cuatro debajo de él, la pausa más larga fue cuando el mayor ya no podía sostenerse con sus piernas y Gulf tomo una almohada para colocarla debajo, levantando el trasero del mayor para seguir con las embestidas. Las sabanas debajo de Mew estaban llenas de semen, igual que su trasero, luego de que Mew eyaculara por sexta vez dejo de ser consciente de su cuerpo, sabía que le dolerían las caderas demasiado al día siguiente, tal vez no lograría ponerse de pie, pero aun medio desmayado el placer que sentía era mayor y esperara que continuara por mas tiempo.