Nada es lo que parece

Cap 18

Mew y Gulf estuvieron muy ocupados con sus distintos trabajos, aunque ninguno de ellos era juntos. Se mantuvieron en contacto por medio de mensajes, el mayor se sentía nervioso cada vez que recibía un nuevo mensaje, tenía la esperanza de que fuera Gulf pidiéndole una cita o tal vez mostrando que su relación estaba avanzando, pero los mensajes terminaban siendo los mismos, ellos hablando de trabajo, videojuegos y nada demasiado profundo.

El fin de semana de la cena familiar había llegado, aunque Mew a había ofrecido a pasar por el menor para ir juntos a casa de su abuelo, el menor había rechazado la oferta alegando que era demasiado trayecto y que resultaba más sencillo para el mayor conducir directamente hacia el lugar y esperar por el menor.

Mew había tenido que ir a casa de su abuelo antes de lo previsto porque su madre le envió un mensaje pidiéndole que le llevase algunos ingredientes que olvidaron para preparar la comida. Al entrar a la casa fue directamente a la cocina, donde se encontró con su madre y su tía, quienes estaban preparando algunas cosas.

- Hijo, lamento haberte molestado, pero Jom tuvo que quedarse más tiempo en el trabajo por un imprevisto y ya no pudo traer las cosas – Dijo la madre de Mew, mientras tomaba las compras que su hijo había hecho.

- No importa, ya estaba despierto – Mew pudo ver desde la cocina que su padre, tío y abuelo estaban en el patio preparando la parrilla, queriendo evitar comentarios maliciosos de su tío decidió que se quedaría dentro de la casa – ¿dónde están mis primos?

Mew tenía una buena relación con sus primos, bueno eso mientras no se encontrara su tío cerca, el había notado desde muy pequeño que su tía y primos cambiaban su comportamiento con su tío alrededor, sabía que su tío no los golpeaba pero en cambio usaba su voz de mando cada vez que alguno de ellos no lo obedecía inmediatamente, aunque eso no era algo nuevo, su tío usaba su voz de mando con todos, presencio ocasiones en las que uso la voz de mando con su padre y algunas menos con su abuelo, todos en su familia sabían que el aprovecharía ser un alfa de alfas para que su palabra fuera la última en una conversación.

Los primos de Mew se encontraban arreglando una fuga de agua en el baño de una de las habitaciones de invitados, pero parecía que habían tenido más problemas de los que habían pensado ya ambos estaban totalmente empapados y el agua seguía desperdiciándose sin control en la ducha.

- Deberían haber cerrado la llave de agua antes de intentar repáralo – les dijo Mew en modo de saludo apenas entro a la habitación.

- Está en el sótano – dijo Alex el mayor de sus primos – y odio entrar ahí.

- Esta obscuro y tenebroso – completo Tom su otro primo.

- Y yo que pensaba que los alfas no le temían a nada – Mew estaba sonriendo al verlos batallar para ajustar un perno parecía que solo eso le faltaba para terminar con la fuga.

- Mis hijos no le temen a nada – la voz de su tío hizo que los tres se pusieran tensos – un omega defectuoso no debería hablarle así a un alfa – dijo mientras miraba con desdén a Mew, luego dirigió su mirada a sus hijo – y ustedes no deberían permitir que les hablen así.

Nadie dijo nada, no importaba si sus primos querían defenderlo o no, sabían que lo mejor era quedarse callados y esperar que su tío se fuese. Mew sintió escalofríos al sentir la mirada de su tío volver a él, estaba agradecido de no estar solo porque siempre se sentía incómodo en presencia de su tío.

- Alguien está buscándote – dijo cortante el tío de Mew.

Solo eso le basto a Mew para salir de allí, al pasar junto a su tío noto el aroma que este estaba expulsando, era uno agrio, como si estuviera molesto por algo pero él no se quedaría a averiguarlo.

La incomodidad acabo en el segundo que noto a quien estaba sentado en una de las sillas de la cocina con Chopper en su regazo, sonriendo mientras hablaba con su madre y tía.

- Llegas temprano

Gulf sonrió en dirección de Mew, bajo con cuidado a Chopper y camino hacia él.

- Hola Phi – Mes estaba estático, feliz pero en shock, el menor lo había abrazado, frente a su tía y madre, él no solía ser cariñoso frente a otras personas y además siempre que se veían le tomaba unos minutos acercarse, usualmente siendo Mew quien tendría que dar el primer paso al contacto físico o la conversación.

- Hola Gulf – respondió Mew finalmente envolviendo sus brazos en el menor, y respirando su aroma.

La madre de Mew y tía los observaban con cariño en los ojos, ambos chicos se veían tiernos abrazados en medio de la cocina, por otro lado estaba el tío de Mew quien tenía los ojos rojos de ira después de observar la escena.

Habiéndose separado Mew llevo a Gulf al jardín para que saludara a su abuelo y padre, luego de unos minutos su tío decidió unírseles, el mayor se tensó esperando cualquier comentario para incomodar u ofenderlo al menor o a él, pero no pasa nada; su tío se mantuvo en silencio observándolos, noto las miradas confusas de su padre y abuelo por momentos, su tío amaba dominar las conversaciones.

El abuelo de Mew estaba haciéndole varias preguntas al menor, Mew se puso feliz cuando la conversación se dirigió hacia el futbol, sabía que el menor hablaría con confianza y cómodamente de eso y a su abuelo le gustaba mucho hablar de ese deporte, estaban tan cómodos que su abuelo y Gulf se sentaron en la mesa del jardín mientras charlaban por eso cuando su padre le pidió ir por más carbón al sótano Mew obedeció inmediatamente.

Tal vez Mew nunca le había tenido miedo al sótano, pero tampoco le encantaba el lugar, era frio y obscuro además de tener que ir hasta una esquina de la casa para poder entrar no tenía ventanas y con las paredes tan gruesas si quedabas atrapado tal vez no te escucharían pedir ayuda.

Mew sabía que las bolsas de carbón estaban en un pequeño cuarto al otro lado de la entrada, intento prender las luces pero no funcionaron, así que tomo la linterna que siempre estaba junto a la puerta, su abuelo era bastante precavido, cuando tomo una bolsa de carbón escucho un fuerte golpe en un principio creyó que tal vez la puerta se cerró pero luego escucho unos pasos en el sótano, su piel se erizo, incluso creyó sentir de formas ligera el aroma de su tío.

Empezó a salir de la habitación pequeña y la linterna fallo, pero pudo ver entrada ya que la puerta estaba abierta y se filtraba la luz de afuera, no sabía porque pero se sentía muy asustado, luego escucho un golpe fuerte, parecido a algo cayendo y una especie de jadeo, corrió hacia la puerta, cuando salió cerro de golpe la puerta y la aseguro.

Cuando alcanzo a su padre vio que estaba solo en la parrilla, pensó que su abuelo llevo a Gulf a ver su colección de trofeos, el abuelo de Mew había sido un gran jugador de futbol cuando era joven. No se preocupó por su tío, él podía estar donde quisiere mientras se mantuviera lejos de él.

Entro a la casa buscando al menor y fue fácil encontrarlo ya que todos estaban en la cocina, sus dos primos su tía, su madre y su abuelo pero faltaba el menor.

- Abuelo donde dejaste a Gulf – pregunto Mew.

- Me dijo que iría a ayudar a tu tío

- El que...

- Tu tío nos dijo que necesitaba una mesa pequeña para poner más cosas ahí – dijo el abuelo de Mew – cuando Gulf vio que se iba en dirección al sótano fue tras él, me dijo que le ayudaría.

Mew salió corriendo, estaba preocupado, dejar al menor y a su tío juntos era una mala idea, además los sonidos que escucho, tal vez su tío le había hecho algo al menor por eso no dijo nada cuando el salió de ahí.

No se dio cuenta que sus primos fueron tras él, su madre e incluso su abuelo estaban ahí, una vez abrieron la puerta todos quedaron en shock.